La hibridación: herramienta clave en la descarbonización de la economía

No cabe duda de que estamos ante el inicio de una década llena de oportunidades para el sector. Las energías renovables han logrado posicionarse en primera línea y se han convertido en un tema prioritario a nivel global, europeo y para el gobierno español. Impulsada por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, la Ley de Cambio Climático y Transición Energética, tiene como objetivo que España alcance la neutralidad de emisiones de gases de efecto invernadero, poniendo como fecha límite el año 2050. Además, las energías limpias se han convertido en protagonistas de los fondos de recuperación europeos (Next Generation UE). Del presupuesto total de 750.000 millones, al menos el 30% de los fondos mencionados se destinarán a la consecución de los objetivos climáticos, y las energías renovables desempeñarán por tanto un papel fundamental.

Esta urgencia por impulsar las energías limpias, que se ha visto acelerada por la pandemia, confirma el gran protagonismo que van a tener en el futuro. El sector tendrá que enfrentarse a retos, pero va a continuar ofreciendo estabilidad y crecimiento, aportando valor añadido y siendo ejemplo de innovación y de compromiso con el medio ambiente. Para hacer frente a estos desafíos futuros, será necesario apostar por la innovación y convertirla en una palanca de crecimiento para el futuro. En este sentido, la hibridación, surgida ante la necesidad de explorar nuevas soluciones renovables, va a jugar un papel fundamental. La combinación de energías sostenibles como la eólica, la solar y el almacenamiento, permitirá alcanzar de manera eficaz la descarbonización de la economía y, al mismo tiempo, disminuir costes para el sector y particularmente para nuestros clientes.

La combinación de estas tecnologías va a permitir no solo asegurar la ventaja competitiva, sino también impulsar el crecimiento de las renovables en el largo plazo. Ya en 2018, desde EDPR impulsamos la construcción del primer proyecto híbrido en la península ibérica, concretamente en Cádiz. La combinación de energía eólica y fotovoltaica permitió a este prototipo incrementar el factor de capacidad y la producción energética anual. Impulsar un mercado de energía renovable que sea más eficiente y competitivo es crucial y con la hibridación podemos lograrlo. Al aprovechar las infraestructuras de evacuación de energía existentes, aumentamos la rentabilidad de la instalación en su conjunto. Nuestra apuesta por esta tecnología es clara y decidida. Muestra de ello fue la subasta de renovables en España, que nos permitirá aprovechar la potencia solar de 98,4 MW de los 143 MW que nos adjudicamos para ampliar la potencia de cuatro parques eólicos. Los vamos a convertir en las primeras instalaciones híbridas eólicas y solares plenamente comerciales de España.

Esto es simplemente un pequeño ejemplo de muchos de una historia que todos tenemos que seguir escribiendo. Una historia que tiene que llevarnos necesariamente -por el bien de nuestros hijos y nietos- a cero emisiones en 2050.