Ribera frena la reforma de la tarifa por falta de consenso, ¿hará lo mismo en todas sus políticas?

La vicepresidenta y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha indicado que mantendrá el actual sistema de tarifas eléctricas porque no existe consenso sobre cómo modificarlo. La respuesta no puede dejar de ser sorprendente porque parte de la responsabilidad de gobernar, es justo esa, tomar decisiones cuando no hay consenso en los cambios.

Seguramente, si Ribera preguntara cómo están planteadas las subastas de renovables tampoco tendría consenso y las ha celebrado. Si hiciera lo propio con la cantidad de potencia a subastar en cogeneración pasaría lo mismo o sobre las condiciones de retribución de la distribución tampoco habría respuestas coincidentes y no por ello deja de estar fijada del modo que marcó en su día el ministerio.

Las tarifas eléctricas, tal y como las conocemos en estos momentos, tienen que cambiar antes de 2025. El Ministerio podría aprovechar la ocasión para adoptar las reformas necesarias y alinear el sistema tarifario español con las exigencias de Bruselas. Desde la Comisión Europea se asegura que el actual sistema no ha sido consultado con ellos y que dicho trámite tendrá que llevarse a cabo en cualquier momento para cumplir con los designios del Reglamento comunitario.

Básicamente, las exigencias son simples. Los consumidores no pueden contar con una tarifa refugio como el PVPC, aunque quizá la concepción de “refugio” ahora queda en entredicho.

España es el único país europeo donde el riesgo de mercado se traslada a los consumidores vulnerables. Esta situación, que ha beneficiado los últimos años a los consumidores, es hoy en día su principal carga.