Las tierras raras: ¿un nuevo riesgo geopolítico?

Bruselas ha diseñado un Plan de Acción para asegurar que Europa pueda acceder de manera más segura, fiable y sostenible a aquellos metales, minerales y materiales naturales -denominados materias primas fundamentales- que se utilizan en una gran variedad de sectores industriales. China, EEUU, Japón y otros países ya se han puesto en marcha para garantizar el suministro futuro, diversificar las fuentes de abastecimiento mediante asociaciones con países ricos en recursos, y desarrollar sus cadenas de valor internas basadas en materias primas. Ahora, es el turno de Europa.

La Comisión ha dado a conocer el listado actualizado de materias primas fundamentales para 2020, y que Bruselas tiene en cuenta a la hora de negociar acuerdos comerciales o tratar de eliminar distorsiones al comercio. La nueva lista incluye 30 materiales respecto a los 27 de la lista de 2017. El helio ha sido eliminado, mientras que la bauxita, el litio, el titanio y el estroncio se incorporan por primera vez al listado para poder garantizar, entre otras cosas, el proceso de electrificación de la economía que Bruselas quiere acelerar.

El principal problema a la hora de acceder a estas materias primas es que el suministro de muchas de ellas presenta un alto grado de concentración, lo que obliga a Europa a depender de terceros países fuera de la Unión e, incluso, de un solo país. Según datos de la Comisión Europea, el 98% de las tierras raras que importa la UE proviene de China, el 98% del borato procede de Turquía, y Sudáfrica suministra el 71% del platino que necesita la UE y un porcentaje aún mayor de iridio, rodio y rutenio, metales del grupo del platino.

La crisis provocada por la Covid-19 ha revelado la rapidez con la que pueden interrumpirse las cadenas de suministro a nivel mundial, de ahí que surja la necesidad de reducir la dependencia de ciertos países para minorar las importaciones y gozar de mayor autonomía. La clave será el uso que se dé a estos materiales y tener claro que en un proceso de electrificación se puede cambiar la dependencia del petróleo por la dependencia de otro tipo de materiales. De ahí la necesidad de realizar un buen análisis de las tecnologías que se quieren imponer antes de lanzarse a un desarrollo desaforado.

El Ministerio que encabeza Teresa Ribera ha lanzado a consulta pública la Hoja de Ruta para la gestión sostenible de Materias Primas Minerales, al objeto de configurar una política nacional que permita garantizar el suministro de los recursos minerales autóctonos y disminuir la dependencia de las importaciones, pero los desarrollos mineros cuentan con importantes problemas para desarrollarse en nuestro país.