Repsol y Cepsa tendrán que apretarse los cinturones en 2020

Repsol y Cepsa tendrán que ajustarse los cinturones en 2020 por culpa de la fuerte caída de los precios del petróleo y las consecuencias todavía impredecibles de la extensión de una pandemia mundial como el coronavirus. Algunas petroleras europeas como BP o Total ya han comenzado a dar las primeras pistas sobre su respuesta ante este nuevo escenario. Por un lado, la petrolera británica calcula que reducirá notablemente sus inversiones este año, mientras que Total anuncia un plan de ahorro de costes.

En el caso de las petroleras españolas ambas tienen pendiente dar a conocer sus planes estratégicos para los próximos años. La primera de ellas tenía incluso fecha para la presentación este próximo mes de mayo, pero no sería de extrañar que acabara retrasándolo ya que probablemente los números que debía tener hechos casi seguro se han ido completamente al traste con la caída del precio del petróleo y del consumo que provoca el coronavirus. En el caso de la segunda, la compañía está en plena transformación y necesita un tiempo para ajustar su nuevo organigrama directivo y preparar sus planes de futuro, que podrían darse a conocer a finales de año, pero que seguro que también incluirán una contención de los costes.

Con todo este escenario, la Agencia Internacional de la Energía ha lanzado sus primeras alertas sobre los riesgos que tendrá para algunos países como Irak, Nigeria, Argelia, Omán, Angola, Azerbaiyán y Ecuador, que sufrirán caídas de los ingresos de hasta un 85%, lo que generará amplios déficits comerciales. Por ese motivo, no es extraño ver como algunas de las compañías tratan de avanzar rápidamente hacia la transición energética como vía para incrementar sus resultados.