La eólica marina flotante se abre camino en España

De los 27 modelos de plataformas flotantes identificados a nivel mundial, siete corresponden a patentes españolas. Varias de ellas ya se están instalando en nuestras costas

Europa supera actualmente los 22 GW de potencia eólica marina instalada, una cifra muy alejada de los entre 230 y 450 GW que la Comisión Europea dice que se necesitan en 2050 para descarbonizar el sistema energético, de los cuales 13 GW podrían ser factibles de instalar en nuestro país según recomienda WindEurope. El 80% de la capacidad eólica marina instalada se concentra en Reino Unido y Alemania, mientras que en España su presencia es básicamente testimonial a pesar del gran potencial existente en sus más de 6.000 kilómetros de costa y de las sinergias que presenta con otros sectores estratégicos -como el naval y el marítimo-portuario-, en la fabricación de grandes estructuras -fijas y flotantes, principalmente-, equipos y componentes eólicos en astilleros nacionales ubicados en zonas cercanas a los puertos.

El sector considera positivo que a pesar de que en la última actualización del borrador del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) de finales de enero no se hayan establecido objetivos específicos en eólica marina, el Ministerio haya puesto en valor a esta tecnología en España, cuyo potencial para 2030 se estima que puede estar entre 2.000 y 3.000 MW según cifras de la Asociación Empresarial Eólica (AEE). El último borrador del PNIEC identifica a la eólica marina como una de las tecnologías llamadas a contribuir al cumplimiento de los objetivos de descarbonización y mitigación del cambio climático, describe las ventajas de la eólica flotante reconociendo su enorme potencial para España y abre la vía a la convocatoria de subastas específicas de eólica marina en determinados ámbitos geográficos, cuestiones que figuran entre las ocho medidas que AEE propone para impulsar y agilizar la construcción de este tipo de instalaciones en nuestro país. La asociación también plantea un calendario de subastas que dé entrada a proyectos de eólica marina, un marco retributivo específico para la instalación de prototipos y parques precomerciales, financiación pública para proyectos demostrativos, así como el despliegue de la eólica marina flotante en Canarias mediante la convocatoria de una subasta en el corto plazo.

Según datos aportados por AEE, el primer y único aerogenerador marino que existe en España hasta la fecha es el proyecto Elisa, de la empresa Esteyco, instalado en aguas de la Plataforma Oceánica de Canarias (PLOCAN) en 2018. Un innovador diseño de cimentación por gravedad con torre de hormigón telescópica autoizable que le convierte en el primer aerogenerador eólico marino de cimentación fija instalado en el mundo sin necesidad de grandes barcos o grúas marinas.

En el caso de la eólica flotante -cuya potencia total instalada en Europa suma 45 MW-, de los 27 modelos de plataformas flotantes identificados a nivel mundial, siete corresponden a patentes españolas. La plataforma W2Power de la empresa andaluza EnerOcean ha sido el primero de los diseños de plataformas flotantes de tecnología española ensayados en el mar. En primavera de 2019 se instaló un prototipo a escala 1:6 a 4 km de la costa en Gran Canaria, en el área de ensayo en aguas abiertas de Plocan, gracias al proyecto DemoWind WIP10+, en el que también han participado tres empresas más. Esta instalación supone un hito a nivel mundial al ser la primera solución multiturbina probada en mar abierto.

La empresa catalana X1Wind está ultimando su salida al mar este otoño con PivotBuoy, un novedoso sistema de amarre de un solo punto con el que se busca reducir el coste de la eólica marina flotante, allanando el camino para alcanzar los 50 euros/MWh en parques eólicos a escala comercial. El proyecto, del que forman parte otros nueve partners, ha recibido 4 millones de euros de financiación de la Comisión Europea.

La española Saitec y la alemana RWE han anunciado la próxima puesta en marcha de un proyecto piloto conjunto de plataforma flotante de hormigón, dotada de una turbina de 2 MW que se ensamblará en el puerto de Bilbao con tecnología SATH. El prototipo se instalará en la plataforma de ensayos de BIMEP a 2 millas de la costa vasca y 85 metros de profundidad. El inicio de las operaciones se prevé para el tercer trimestre de 2021, momento en que se conectará a la red para suministrar energía a 1.500 hogares. Otras plataformas como Nautilus, Telwind de la empresa Esteyco o ActiveFloat del grupo ACS, cuentan con avanzados diseños que les permitirán iniciar proyectos demostrativos en los próximos años.

Líderes a nivel mundial

El fuerte tejido industrial y empresarial que existe en el país en eólica marina, está permitiendo a muchas empresas españolas participar con éxito en proyectos offshore en todo el mundo, exportando componentes y servicios en toda la cadena de valor.

Es el caso de Siemens Gamesa, que se ha convertido en el fabricante número uno en eólica marina con una cuota de mercado del 55% y 15 GW instalados -unas 4.150 turbinas-. Iberdrola tampoco se queda atrás. Actualmente cuenta con una cartera de proyectos marinos que ronda los 12,4 GW en torno a tres ejes: el Mar del Norte, el Mar Báltico y Estados Unidos. Sin embargo, ninguna de las dos compañías contempla la puesta en marcha de algún proyecto marino en nuestro país en el corto plazo.

EDPR, filial portuguesa del Grupo EDP, también apuesta por la eólica marina. En el caso de España, consideran a Canarias como una oportunidad, principalmente en eólica flotante, “debido a que el precio medio de la energía en los archipiélagos es alta, y las islas son muy dependientes de la generación a través de combustibles fósiles”, señalan. De momento, afirman desde la empresa, “estamos trabajando y haciendo estudios de prospección, pero tiene que haber una decisión del Gobierno en el sentido de propiciar un concurso para Canarias”.

Junto a Repsol, Engie y Principle Power, EDPR participa en el parque eólico flotante Windfloat Atlantic, a 20 km de la costa portuguesa de Viana do Castelo, en el que algunos de los proveedores son empresas españolas. La instalación tendrá una capacidad total de 25 MW, dividida en tres aerogeneradores de 8,4 MW cada uno, dos de los cuales ya han sido conectados a la red eléctrica portuguesa. El montaje de la tercera turbina se ha completado con éxito en el puerto español de Ferrol.

El despliegue de proyectos eólicos marinos en todo el mundo se está viendo favorecido por la importante caída de costes de los últimos años. En eólica marina de cimentación fija se ha pasado de 150 euros/MWh en 2014 a 44 euros/MWh en 2019, mientras que en eólica marina flotante se espera una reducción de costes desde los actuales 180-200 euros /MWh hasta los 80-100 euros/MWh en 2025 y los 40-60 euros/MWh en 2030.