El Miteco deberá gestionarlas bajo la supervisión de la CNMC

Fundación Renovables ha remitido sus alegaciones con propuestas para el nuevo diseño de subastas, que resume en siete puntos. Por un lado, considera que las subastas deben responder a un ejercicio previo de planificación energética para dar cumplimiento a los objetivos vinculantes ya establecidos. En este sentido, ven necesario establecer períodos para presentar las ofertas y realizar los proyectos al objeto de asegurar que estos se llevan a cabo, así como la apertura de procedimientos para la continuidad de explotación de las instalaciones después de finalizar el período contractual.

Asimismo, apuesta por una subasta de energía por tecnología, con un precio finalista para cada propuesta según su oferta, que suponga el abandono del marginalismo en la subasta, ya que entiende que el uso de fórmulas marginalistas para la adjudicación hace que se pierda el criterio de competitividad en el desarrollo, provocando, como en las últimas subastas, que el volumen subastado final sea superior al inicial. El mecanismo de adjudicación de la subasta debe ser mediante pay-as-bid.

La asociación señala que deberá ser el Miteco el encargado de gestionar las subastas bajo la supervisión de la CNMC. Para valorar las ofertas, añade, se deben tener en cuenta tres aspectos: el coste, la seguridad de ejecución y la sostenibilidad o externalidades que dan valor al proyecto.

Como elementos adicionales para adecuar su desarrollo señala, por ejemplo: exigir un desarrollo administrativo mínimo de los proyectos para poder acceder a la subasta y la obligatoriedad de la presentación de garantías por parte de los ofertantes con el fin de cubrir todos los elementos de riesgo.

Asimismo, apela a la necesidad de establecer limitaciones de transmisión de derechos de instalaciones no finalizadas y de gravámenes del valor para evitar la transmisión de actos administrativos. Así, dice, se deben establecer requisitos y penalizaciones que impidan que haya incumplimientos

Finalmente, considera que la subasta debe contar con la incorporación de tramos para la generación distribuida y agentes específicos en función de factores geográficos, y que el precio no debe ser el único elemento que se debe considerar.