El cine portátil de verdad cabe en una lata de refresco

Probamos el proyector Nebula Capsule 3 Laser, un dispositivo de alta gama que nos permite montar un cine en cualquier lugar en solo tres segundos.

La mayoría de los proyectores incluyen una bolsa de viaje para facilitar su transporte. Eso, en cambio, no los convierte de por sí en portátiles. Ese utensilio permite que lo llevemos protegido de un lugar a otro, pero muchas veces de solo pensar que tengamos que desinstalarlo de su espacio para configurarlo en otro sitio ya se nos suelen quitar las ganas de moverlo. Todo lo contrario sucede con el proyector Nebula Capsule 3 Laser de Anker, un dispositivo de alta gama (899 euros), que no alcanza el kilogramo de peso y cuyo tamaño y forma se asemeja al de una lata de refresco.

Esas características lo hacen muy fácil de transportar. Sin embargo, el factor que nos impulsa a llevarlo de un lado a otro sin problema es su capacidad para configurarse de forma automática en apenas tres segundos. Dotado de una cámara junto a su lámpara láser, ésta detecta la superficie plana sobre la que lo hemos dirigido y al instante aparece una cuadrilla blanca y negra para el autoenfoque. Después, al momento, ajusta también solo el tamaño y presenta la pantalla perfectamente rectangular.

Hemos tenido la oportunidad de probarlo unos días y reconocemos que le hemos hecho todo tipo de jugarretas, cambiándolo de posición en repetidas ocasiones, incluso durante una proyección, y en cuanto detecta cierto movimiento repite ese proceso. Su reducido tamaño y esa facilidad en la configuración automática -y sobre todo tan rápida- facilita de verdad que lo llevemos a cualquier viaje para montar el cine donde deseemos. Solo necesitaremos una pared y listo. Incluso un techo tampoco es mala opción: bastará colocarlo apuntando a esa superficie...

En cuanto a la calidad de imagen, que es bien importante, ofrece resolución Full HD y una luminosidad bastante reseñable de 300 lúmenes. Aunque huelga decir que un proyector se utiliza en la oscuridad, en este caso también lo hemos probado con algo de luz y aun así la calidad de imagen mantiene esa calidad. Hemos percibido que, si lo utilizamos enchufado, el brillo es algo superior a cuando lo usamos tirando de su batería de 15000 mAh. Ésta permite ver una película de hasta dos horas y media sin cables. Gracias al sistema CAIC, el proyector enciende y apaga cada píxel por separado para ahorrar energía. Para cuando necesitemos recargar su batería, también es compatible con el sistema de carga rápida Power Delivery de Anker.

Pensado, como decíamos, para llevarlo de viaje a cualquier parte, destaca también por su alta conectividad. Incluye como entradas una HDMI para cuando queramos conectarle sobre todo una consola de videojuegos o hacerle llegar la señal de vídeo por esa vía. También un puerto mini USB que emplearemos para cargar su batería o para insertar contenidos de vídeo. Una tercera entrada jack auxiliar de audio nos permite conectarle auriculares o altavoces por cable. Sin embargo, todo eso también lo podemos hacer vía Bluetooth.

Para mejorar aún más su conectividad, sobre todo con el teléfono móvil para enviarle cualquier vídeo de plataforma en streaming, incluye el sistema ChromeCast y Android TV 11. Lo cierto es que, aunque en su zona superior incluya un panel táctil para acceder a los principales ajustes y que también encontremos en la caja un mando a distancia, lo más práctico es acostumbrarse a gestionarlo todo desde el móvil. Ya sea por Android TV 11 o por su aplicación específica, Nebula.

Solo nos queda hablar del audio y también aquí tenemos una característica que hace interesante a este dispositivo. Gracias a un botón que encontramos en su zona trasera junto al de encendido y apagado, podemos cambiar el modo para utilizar el Capsule 3 Laser como proyector o como altavoz externo Bluetooth. Sus 8 watios de potencia responden muy bien para escuchar música y también para ver contenidos, aunque, como sucede con todos los proyectores y pantallas, el audio no es su especialidad. Ese altavoz nos sirve para situaciones puntuales o para realizar presentaciones, pero si queremos disfrutar de una película con sonido envolvente lo más normal es que le conectemos un altavoz de mayores prestaciones o un sistema 5.1 o 7.1. Aun así, el altavoz integrado es compatible con el códec de audio Dolby Digital.

Para garantizar su estabilidad y poder mantenerlo en una posición fija mirando a la superficie en la que lo queremos proyectar, incluye en su base la tradicional rosca de los equipos de fotografía y vídeo para mantenerlo bien ajustado a un trípode. Sí recomendamos hacernos con uno de ellos para sacarle todo el partido y garantizar que no se caiga.