La carga, además de eléctrica, también puede ser inteligente

Una comercializadora de luz escandinava nos propone reducir a la mitad el consumo por recargar el vehículo eléctrico en casa a través de una ‘app’.

En España hay en estos momentos alrededor de 292.000 vehículos eléctricos. Representan menos del 2% del parque automovilístico total. Si tenenos en cuenta que la Comisión Europea va a impedir que en el año 2035 se sigan vendiendo coches de combustión, mucha prisa vamos a tener que darnos para voltear la tortilla. Desde que publicáramos en esta misma revista ocho años atrás un reportaje sobre la electrificación de la movilidad, hay que reconocer que la situación no ha cambiado demasiado. Estos vehículos siguen siendo más caros que los tradicionales; sí han mejorado su autonomía, pero no tanto como desearíamos para hacer un viaje largo con ellos; tampoco se han incrementado demasiado los puntos de recarga... Y, para colmo, la subida de los precios de la luz tampoco ha sido el mayor estímulo. Así, solo quienes usan el vehículo para trayectos relativamente cortos y disponen de punto de recarga propio se terminan animando. Lo de disponer de enchufe no es para nada baladí porque eso es lo que permite llevar el control de lo que se consume. No olvidemos que el precio medio de ‘llenar el depósito’ en un vehículo eléctrico se sitúa en 18,26 euros.

Una startup de origen escandinavo se ha propuesto que ese consumo se reduzca a la mitad. Actúa como una de las casi 300 comercializadoras de electricidad que hay ahora en España. Cobra 3,9 euros al mes, y, a partir de ahí, nos sugiere que paguemos la luz al precio exacto que tiene en el mercado sólo cuando consumimos. “Evitamos los euros de más de las tarifas fijas, con las que las compañías de luz sacan grandes beneficios”, nos explica Pol Brau, responsable de crecimiento y desarrollo de Chippio. Para monitorizar la carga del coche eléctrico, han lanzado la herramienta ‘Smart charging’, compatible con todos los cargadores para hogar e insisten en que no necesitamos ningún hardware adicional. “Basta contratar la electricidad con nosotros y vincular tu coche en la aplicación Chippio para poder hacer uso de la herramienta”, añade a eleconomista.es.

“Smart Charging automatiza la carga del vehículo en las horas de menor coste, pero siempre priorizando al porcentaje de batería que el usuario quiere tener a la hora que determine. De esta manera, si elegimos tener nuestro coche disponible mañana a las nueve de la mañana al 80% de carga y lo enchufamos a las siete de la tarde, nuestra app calculará las horas de menor coste y planificará la carga en esas horas para llegar al objetivo gastando lo menos posible”, explica. De esta manera, el sistema aprovecha las horas de luz más baratas -que son también las horas con menor demanda- por lo que están cubiertas en mayor parte con energía renovable. “Esto no solo nos permite ahorrar, también nos permite ser más responsables con el medio ambiente”, añade.

Resume Pol Brau que “Chippio ofrece luz y potencia a precio de coste. Lo único que nos llevamos nosotros es una cuota mensual de 3,9 euros al mes. No ganamos más si la factura sube. A su vez, este hecho también nos alinea mucho con nuestro principal interés: como no ganamos más si consumes más, nuestro objetivo es que gastes lo menos posible. Por eso ponemos a disposición distintas herramientas -además de Smart Charging para los vehículos eléctricos- para poder tomar el control de la factura de la luz”.

En cuanto a su funcionamiento, todos los días, en torno a las 21 horas, y una vez se publican los precios de la luz para el día siguiente por parte de Red Eléctrica Española, el sistema de Chippio aplica un algoritmo para comprobar si alguna hora tiene un precio excepcionalmente alto o bajo con respecto al precio de los últimos 30 días. “De esta manera, aunque el precio de la luz cambia cada hora, la tecnología de Chippio y nuestra tarifa ofrecen el precio más justo posible al no añadir ningún margen oculto al precio fijado por el mercado. Esto nos permite ahorrar en la factura de la luz y aprovechar las horas más baratas del día”, señala Brau.

Más allá de este sistema de carga inteligente de vehículos eléctricos, el responsable de Chippio nos reconoce que su objetivo “es devolver el control de la factura de la luz a los consumidores ofreciendo información transparente que ayude a los usuarios a poder tomar decisiones y cambiar sus dinámicas”. “En nuestra app pueden consultar los precios de la luz con antelación, reportes detallados de sus consumos o cuánto llevan gastado. Esta información da la oportunidad de elegir trasladar cierto consumo a horas de menor coste o, por qué no, intentar reducirlo”, aconseja. Y preguntado sobre los planes de futuro de la compañía, Brau reconoce que su cuota mensual les permite “seguir trabajando en más innovaciones para reducir el consumo y, por ende, la factura de la luz, pero siempre dando las herramientas al usuario para que decida cómo y cuándo hacerlo”.