Inteligencia artificial: el puente que cruza la brecha generacional

La mano de obra actual está experimentando una rápida transformación, y hay muchos factores en juego. Los cinco días universales en la oficina han dado paso a estilos de trabajo más remotos e híbridos, la Gran Dimisión ha visto una movilidad laboral masiva, y las empresas tienen ahora que competir por el talento en un mercado dirigido por los candidatos.

Acelerado por la pandemia, muchos miembros de la generación del baby boom se están jubilando antes, ya que sus prioridades cambian. En España, según una encuesta de la X Encuesta Instituto BBVA de pensiones, hay más de 14 millones de Baby Boomers, algunos ya se han jubilado y hay muchos que empezarán a jubilarse el año que viene.

Con el tiempo, si esta tendencia se mantiene, las organizaciones podrían quedarse con un desequilibrio considerable de experiencia y conocimientos. Por ello, cada vez hay más presión para sustituir a estos empleados de larga duración, además el fenómeno de la brecha digital en España no hace más que encarecer el problema. La perspectiva de sustituir las décadas de conocimientos y experiencia de estos empleados es desalentadora. Así pues, ¿por dónde deben empezar las organizaciones y cómo puede la tecnología ayudar a racionalizar su estrategia?

Dentro de poco, los millennials formarán el 75% de la fuerza laboral del mundo para el 2025, por lo que desempeñará un papel fundamental a la hora de ascender y cubrir los huecos que dejará el grupo de baby boomers, cada vez más reducido. Sin embargo, los millennials también son una generación muy exigente con sus puestos de trabajo. El 67,7% de directivos encuestados en varias empresas españolas admiten que los millennials han abandonado su puesto de trabajo a lo largo de los últimos dos años”, la insatisfacción suele ser citada como una de las causas principales. Esto podría suponer un problema para las organizaciones que buscan mejorar las competencias y retener a los trabajadores para cubrir las nuevas carencias.

El desarrollo de competencias debe convertirse en un objetivo principal. Sin embargo, en la actualidad, esto está demostrando ser un reto por la confianza de los empleados y los empresarios en la prioridad que su organización da al desarrollo de competencias. Es evidente que hay que hacer más para preparar a las organizaciones para este cambio generacional. Las empresas deben convertir el desarrollo de competencias en una prioridad o seguirán perdiendo trabajadores.

Un componente clave para pasar la antorcha entre las generaciones será la gestión del conocimiento. ¿Cómo pueden las empresas transferir de la mejor manera posible los conocimientos acumulados por la generación anterior a la nueva? Las empresas tienen que identificar quiénes encajan bien en un puesto, qué habilidades tienen, qué habilidades necesitan y cuál es la mejor manera de desarrollarlas. Esto implica muchos datos, pero analizar, evaluar y aplicar estos datos es una tarea cada vez más imposible para los humanos solos. Aquí es donde entra en juego la IA.

En cada organización, hay muchos requisitos de aprendizaje y aspiraciones profesionales diferentes para cada empleado, y a menudo esta información no se entiende o no es conocida completamente ni siquiera por los propios empleados. Mediante la recopilación de datos sobre los empleados, y aprovechando el poder de la IA, las organizaciones pueden crear ricos perfiles de habilidades para toda su fuerza de trabajo.

La IA puede entonces conectar a los individuos con las oportunidades de crecimiento, ayudando a impulsar las conversaciones con los gerentes en torno al desarrollo: hacia dónde quieren ir los empleados y cómo quieren llegar allí. Utilizando la IA de este modo, las organizaciones pueden ofrecer trayectorias profesionales claras a sus empleados, actuando como incentivo para que los trabajadores de la generación del milenio permanezcan en sus puestos actuales, ayudando a combatir el cambio demográfico.

Este uso eficaz de la IA también puede combinarse con una estrategia exhaustiva de inversión en contenidos. Mediante la creación de una biblioteca de contenidos de aprendizaje relevantes y curados, las organizaciones pueden proporcionar a cada individuo el viaje de aprendizaje adecuado para ellos.

La personalización también puede estar en el centro de esta estrategia, con la IA intuitiva seleccionando el contenido más relevante para cada individuo en función de sus habilidades y objetivos personales. Esto ayuda a desarrollar una cultura de aprendizaje autodirigido, permitiendo a los empleados trazar su propio desarrollo y progresión. Este enfoque también puede utilizarse para ayudar a cubrir eficazmente las lagunas de competencias existentes en una organización.

A medida que las organizaciones tratan de hacer frente a los enormes cambios que se están produciendo en el mercado de trabajo y tratan de adquirir, retener y desarrollar a las personas adecuadas con las habilidades adecuadas, la IA va a desempeñar un papel cada vez más importante. Su capacidad para recopilar, analizar e interpretar datos y ofrecer soluciones claras, personalizadas y procesables será fundamental a medida que avancemos. Su capacidad de aprender y evolucionar constantemente nos permitirá evolucionar con ella y abordar cualquier carencia de competencias, ahora y en el futuro.

El aprovechamiento de la IA puede proporcionar información sobre las competencias básicas y especializadas de una organización, así como sobre las carencias existentes. Esto permite a las organizaciones invertir de forma más decidida en el desarrollo de habilidades y recursos para hacer crecer a su gente, y a sus negocios, de forma más efectiva.