Alberto Rodríguez de Lama, cofundador y presidente de TheCUBE: “Debemos tener más respeto por nuestros grandes empresarios del siglo XX”

El ecosistema de emprendimiento e innovación español TheCUBE cumple cinco años. En este lustro, la compañía ha lanzado diez startups, ha analizado más de 5.000, y ha desarrollado más de 190 proyectos en grandes empresas, algunas del índice Fortune Global 500. Cuenta con dos centros, en Madrid y en Zahara de los Atunes (Cádiz).

Hablamos con Alberto Rodríguez de Lama, cofundador y presidente de TheCUBE, para conocer las inquietudes de los emprendedores españoles: “Creo que necesitamos creernos de verdad que tenemos un potencial enorme, necesitamos perder el miedo a crecer, al tamaño, a la internacionalización”.

¿Qué balance hace de estos primeros cinco años de TheCUBE?

Estamos contentos, los inicios de un proyecto siempre tienen mucha incertidumbre y creo que hemos superado los objetivos que nos planteamos. Han pasado más de 40.000 personas por eventos celebrados en TheCUBE con una pandemia global que ha frenado esa parte de nuestra actividad durante 2020 y 2021. Mantenemos los partners que iniciaron el viaje con nosotros, como Procter & Gamble, Enel, Uber o Mercedes Benz, y hemos sido capaces de crear un concepto y una marca potentes y un equipo joven y comprometido.

¿Este ecosistema demuestra la necesidad de la colaboración a la hora de innovar?

Creo que demuestra que innovar desde la colaboración con personas de fuera de nuestras propias compañías añade experiencias y conocimientos que no tenemos, añade velocidad si los intereses están alineados y la agenda es clara y permite contar con talento de forma temporal que, de otro modo, no participaría porque no está dentro de tu organización, por definición, hay más talento fuera que dentro.

Hemos aprendido la lección de la colaboración... ¿Qué otras lecciones nos quedan?

Para aumentar tu tasa de innovación solo tienes que aumentar el número de experimentos, debes tolerar e incluso a veces premiar el error en tus equipos, aprender algo nuevo a diario para potenciar algo que los emprendedores tenemos muy desarrollado: la flexibilidad cognitiva, esa capacidad de no bloquearse al enfrentarse a un problema o una disciplina nueva. Hay que competir sí, pero no en la forma clásica de competir por el mercado, sino competir en la tasa de aprendizaje, que es la capacidad que tienen los individuos de tu organización para aprender, interiorizar e incorporar nuevas disciplinas, herramientas y conocimientos.

¿Cómo puede afectar a la innovación la alta inflación y una posible recesión?

Solemos sobre reaccionar al corto plazo y modificar nuestro plan de vuelo por las turbulencias. La innovación debe ser una palanca a largo plazo, con objetivos ambiciosos y no debe variar mucho su hoja de ruta en función de movimientos coyunturales del ciclo económico. Se tarda años en construir una función de innovación potente y días en destruirla, motivada por recortes y virajes del corto plazo. No debería verse afectada por estos factores que comentas.

¿Están teniendo dificultades los emprendedores y empresas para acceder a los fondos Next generation?

Mi opinión es que sí, la realidad es que las grandes consultoras han decidido liderar la conversación y han hecho lobby para convertirse en agentes clave para que las ayudas lleguen. Espero que el Gobierno encuentre más medios e ideas para acelerar la distribución de los fondos Next Generation a las startups, que son las que pueden realmente hacer mejor uso y generar más empleo de calidad.

¿Qué previsiones manejan para TheCUBE en los próximos cinco años? ¿Qué objetivos se marcan?

Nuestros próximos cinco años deberían hacer que tripliquemos nuestro tamaño y nuestro equipo, abriremos más hubs, traeremos a España los mejores eventos de innovación y creatividad del mundo y ayudaremos a grandes corporaciones en su estrategia de innovación radical ya fuera de España.

¿Qué papel asume en este contexto la alianza de TheCUBE con el MIT?¿Qué les permite?

Que TheCUBE sea un proyecto conocido y querido en la Comunidad de profesores e investigadores del MIT y ser socios del Centro de Emprendimiento del MIT nos permite conocer de primera mano en qué se está trabajando a nivel científico para los próximos diez años, nos permite atraer a Madrid proyectos incubados en el MIT y conectar el ecosistema emprendedor de Madrid con el de Boston.

¿Qué consejos daría a las empresas o a los emprendedores españoles?

Debemos tener más respeto por nuestros grandes empresarios del siglo XX como Amancio Ortega, Rafael del Pino o Juan Roig, y más admiración a la nueva generación de emprendedores del siglo XXI. Creo que necesitamos creernos de verdad que tenemos un potencial enorme, necesitamos perder el miedo a crecer, al tamaño, a la internacionalización, debemos liderar el cambio de modelo productivo e impulsar nuestra economía hacia un PIB menos material, más digital.