Esto no me lo esperaba...

Se van a cumplir diez años desde el primer número de esta revista Digital 4.0. En aquel número 1 incluíamos una entrevista con el CEO y fundador de iRobot, Colin Angle, en la que nos explicaba cómo esta compañía que se había dedicado en su origen al diseño y producción de robots para desactivar explosivos y minas había dado un giro hacia la tecnología de consumo. Decidieron utilizar toda esa innovación para introducirse en los hogares y mantenerlos limpios sin que nos tuviéramos que preocupar más por esa ingrata tarea. Uno de aquellos primeros artilugios con fines militares permaneció un tiempo expuesto en el Museo de los robots de Juguetrónica en Madrid.

iRobot fue la primera compañía en ofrecer este tipo de robots aspiradores y, desde su primer lanzamiento, han sido muchas las empresas que se han adentrado en esta familia de productos. Ahora, hemos tenido la oportunidad de probar el último de sus lanzamientos, la Roomba j7+. Está disponible ya por 999 euros si optamos por el modelo con clean base o estación de autovaciado o por 799 euros sin ella. Estamos, pues, ante uno de esos modelos que van depositando toda la suciedad que va recogiendo en una bolsa desechable y cerrada alojada en su base. Reconocemos que pueden pasar varios meses antes de tener que cambiar esa bolsa por otra, dependiendo del nivel de suciedad y del tamaño de la casa. Este sistema nos evita cualquier contacto con el polvo, algo que agradecerán especialmente las personas con alergias.

Para interactuar con el robot, nos descargaremos en el móvil la aplicación iRobot Home y desde ella podremos programar tareas, pedirle que limpie zonas específicas de la casa, que se coordine con otro robot friegasuelos Braava cuando haya terminado de aspirar, etc.

Hay que decir que no estamos ante el modelo más potente o premium de la firma, que sigue siendo el s9+, pero en cambio este j7+ incorpora novedades interesantes en cuanto a la inteligencia artificial y se le acerca en potencia y rendimiento al s9+ con un precio bastante menor, por lo que es una propuesta a considerar si estamos pensando en hacernos con uno de estos dispositivos.

De esta manera, la cualidad más interesante de esta Roomba j7+ es su capacidad para esquivar objetos que le ponemos por delante. Esto lo hace gracias a su sistema de Navegación PrecisionVision. Comparado con otros modelos, antes si dejábamos unas zapatillas olvidadas debajo de la cama, el robot solía empujarlas para seguir limpiando y luego las encontrábamos pegadas a la pared. Hemos comprobado que este j7+ detecta las zapatillas, un cable con cargador que podamos dejar en su trayectoria o los regalitos que pueda depositar la mascota y directamente los rodea. Así evitamos posibles riesgos de atasco, pérdida de objetos o males mayores. Tan convencida está la empresa de esta nueva capacidad, que se compromete a la devolución de aquella máquina que no cumpla con esta norma. Cuando encuentra uno de esos imprevistos, la Roomba j7+ puede tomar una fotografía y enviárnosla a nuestro móvil para que le digamos cómo actuar de ahí en adelante. Todo ello, a través de la ya mencionada aplicación iRobot Home.

También gracias a la tecnología iRobot Genius 3.0, esta Roomba j7+ va aprendiendo de sus trabajos de limpieza y mejorando los mapas de las habitaciones, optimizando sus recorridos por la casa. Además, las funcionalidades de la plataforma iRobot Genius 3.0 también están disponibles para el resto de robots aspiradores de la firma. Esto nos da por ejemplo la posibilidad de pedirle que vaya a limpiar una habitación específica pero que hasta llegar a ella lo haga de forma silenciosa, que se active cuando detecte por la geolocalización de nuestro móvil que hemos salido de casa y regrese a su estación cuando detecta que hemos vuelto, comprobar cuánto tiempo tardará en limpiar las zonas que le hemos pedido, etc. Esta mayor inteligencia de la Roomba también nos demandará algo de colaboración al principio hasta que haya aprendido de nuestras costumbres. Así, si por ejemplo detecta que le mandamos limpiar la cocina siempre a una hora concreta, nos preguntará si queremos establecer una rutina para que haga siempre eso sin que se lo tengamos que pedir en sucesivas ocasiones.

En su diseño, también encontramos novedades. La estación de carga y de autovaciado es ahora más baja y ocupa toda la zona trasera, por lo que pasa más desapercibida frente a la torre del modelo s9. En su interior, nos permite alojar una o dos bolsas de reemplazo para tenerlas siempre a mano. Una lengüeta de cuero para tirar de la tapa superior también le da un toque distinto. En cuanto al robot en sí, ha sido rediseñado para acceder a más lugares sin perder esa potencia de la que hablábamos antes y presenta un acabado en metal pulido con un único botón central.