
Yggdrasil, la inteligencia artificial de la mitología nórdica
Los siglos del VIII al XI vieron cómo los pueblos nórdicos asolaban todo el continente europeo, gracias a una fiereza incomparable en combate, y a su desprecio por la muerte. Según la mitología nórdica, todo lo que existe se encuentra en un gigantesco fresno llamado Yggdrasil, en el centro del cual está nuestro mundo, entre otros ocho. El árbol tiene también diversos habitantes, como una ardilla, llamada Ratatoskr, que lo recorre de arriba abajo constantemente, o, bajo sus raíces, tres mujeres, tres hermanas. Mujeres más poderosas que ningún otro ser vivo, ante cuyos caprichos ni los dioses pueden nada. Pocos lo saben, pero están hermanadas con los algoritmos que hoy, en nuestro mundo, lo dominan todo en el contexto de la inteligencia artificial.
Las tres hermanas tejen en un telar todo lo que ha ocurrido, ocurre y ocurrirá en Yggdrasil. El destino de todo. La primera de las tres, Urd (lo que fue, el pasado), es muy vieja, y teje lo que ya ocurrió. Siempre mira hacia la izquierda, hacia atrás. La segunda, Verdandi (lo que es, el presente), joven, teje aquello que está ocurriendo aquí y ahora. Siempre se representa mirando al frente y se relaciona con la primavera. Por último, Skuld (lo que será, el futuro), es la encargada de tejer lo que aún no ha ocurrido. En el mundo informático, cuando hablamos de Machine Learning y de Big Data, el objetivo es ser capaces de comprender qué es lo que va a ocurrir a través de lo que ha ocurrido... Es algo parecido a lo que sucede con el “destino” vikingo. De hecho, podríamos decir que lo que buscamos es conocer el telar de las normas gracias a los hilos de Urd, correspondientes al pasado. Una metodología con la que trabaja la startup INLAB Digital, compañía del sector publicitario que ha desarrollado sus algoritmos propios.
Este paralelismo con la mitología vikinga va más allá de lo anecdótico, y sirve para comprender mejor en qué consiste y cómo se aprovechan los datos desde que nacen hasta que se explotan, tal y como trabaja el algoritmo de INLAB. Los datos brutos, en crudo, tal y como los deja Urd, son poco más que inútiles por sí solos, han de florecer con la energía primaveral de Verdandi, para que podamos ver el presente en el telar. En esta etapa, el propósito es utilizar los datos para obtener conocimiento, para lo que podemos utilizar indicadores, agregados -como totales de registros- y gráficas o visualizaciones.