La financiación inteligente, una receta de futuro para tiempos díficiles

Siemens Financial Services apadrina un nuevo concepto para facilitar la renovación del equipamiento tecnológico de la industria alimentaria 4.0 en la ‘nueva normalidad’

Financiación inteligente. El concepto está llamado a convertirse en la solución para afrontar la crisis del Covid-19 de manera audaz. A grandes rasgos, se trata de una estrategia por la que las condiciones de los créditos se condicionan a los resultados comerciales, con un creciente número de proveedores de soluciones de tecnología y maquinaria que ahora ofrecen opciones de financiación integradas como parte de su propuesta general de valor para el cliente. De esa forma, ciertas industrias encuentran un valioso resquicio para renovar su tecnología cuando las situación se pone cuesta arriba. Y ése es el caso del sector de alimentos y bebidas, especialmente dependiente de las innovaciones tecnológicas.

Parece admitido que los patrones de consumo han cambiado de forma radical en los últimos meses y que las circunstancias exigen reflejos a las empresas que suministran los alimentos y las bebidas la población. No queda otra respuesta que adaptarse rápidamente a una nueva normalidad que no admite titubeos. “Las empresas que invierten en tecnologías ágiles, como la automatización, la digitalización y los proyectos de modernización, están en mejores condiciones para reaccionar ante las demandas cambiantes del mercado con flexibilidad y capacidad de recuperación óptimas”, explican desde Siemens Financial Services sobre un fenómeno que ha venido para quedarse.

Todo lo anterior se desprende de una investigación realizada por Siemens Financial Services (SFS) con el título Rising to the New Challenge: The role of Smart Financing in helping the Global Food & Beverage Sector navigate the economic ‘new normal’ (A la altura del desafío: el papel de la financiación inteligente para ayudar al sector mundial de alimentos y bebidas a incursionar en la “nueva normalidad” económica). En ese informe se explica un modelo de SFS que estima de manera conservadora la magnitud del desafío de inversión que enfrenta la industria manufacturera mundial de alimentos y bebidas, puesto que busca implementar tecnología para fábricas digitales durante el período de 2020-2024. Según sus estimaciones conservadoras, basadas en un modelo de SFS, las necesidades de inversión en transformación de este sector para los cinco próximos años superará los 567.000 millones de dólares.

Ante semejantes exigencias, Dirk Budach, de Siemens Financial Services (SFS), explica que “la capacidad de adaptarse de forma rápida e inteligente a mercados en rápida evolución sigue siendo una necesidad urgente para las empresas de todos los tamaños. Ante esa situación, “la financiación inteligente permite una inversión sostenible basada en resultados comerciales deseados claramente identificados para los fabricantes de alimentos y bebidas, facilitando el acceso a la tecnología y a los servicios correctos con el apoyo de un financiero experto”. El mismo experto considera “un factor competitivo significativo durante este crisis todo lo relacionado con “la flexibilidad que ofrece la actualización de las plataformas existentes a través de la automatización de la modernización (retrofit) o la digitalización»,

Asimismo, los analistas lo tienen claro e invitan a las empresas a que “diversifiquen sus fuentes de financiación, alimenten las líneas de crédito existentes y aprovechen las fuentes de financiación alternativas para preservar las líneas de crédito existentes”. Y entre esas soluciones creativas sobresale la referida financiación inteligente, por el que la inversión en tecnología y equipos se alinean con los resultados y así “se integra estrechamente la financiación con la tasa esperada de rentabilidad de la inversión realizada a través de los beneficios de modernizar las instalaciones existentes y/o adoptar nuevas tecnologías ágiles digitales”.

Parece también asumido que la crisis originada por la pandemia y sus secuelas económicas convierte en un elemento crítico la importancia de invertir en tecnologías ágiles. La evidencia histórica juega de su parte: “Las empresas que continuaron invirtiendo en crisis anteriores se recuperaron antes que sus competidores. Estas inversiones suelen permitir a los fabricantes alcanzar niveles de flexibilidad operativa que pueden hacer frente a mercados inciertos y volátiles, una flexibilidad que se está convirtiendo en una ventaja competitiva cada vez más importante, ya que es probable que los patrones de oferta y demanda, así como las prácticas y condiciones de trabajo, cambien drásticamente a medida que la crisis retrocede y las empresas y los consumidores adoptan “la nueva normalidad”

Las mismas fuentes de Siemens apuntan que la financiación inteligente cierra la brecha entre la renuencia a recurrir a fondos de capital y el deseo de invertir en tecnologías competitivamente superiores. Estas soluciones están diseñadas por proveedores especializados específicamente para permitir la inversión en tecnología, equipos y transformación digital. Esto proporciona un trayecto financieramente sostenible a través de un período económico bajo, junto con la agilidad y la capacidad de recuperación para sortear las dificultades a mediano plazo, de modo que los fabricantes puedan finalmente emerger listos para el crecimiento a medida que los mercados se recuperan. Dichas organizaciones que continúan invirtiendo tienden a ser más exitosas y hace que los clientes fabricantes accedan a una gama más amplia de posibles opciones tecnológicas, porque también pueden utilizar métodos de financiación que hacen que la inversión sea asequible y financieramente sostenible. Efectivamente, la inversión del fabricante en soluciones ágiles se posibilita mediante una financiación que considera los beneficios comerciales esperados de la inversión. Esto proporciona una forma financieramente sostenible de mantener las ventas de tecnología de fabricación de alimentos y bebidas, incluso en estos tiempos difíciles.

¿En qué consiste la financiación inteligente?

Diversas fuentes de financiación: Una fuente adicional de financiación, separada de la banca relacional, brinda acceso a financiación que no socava las líneas de crédito existentes.

Conocimiento tecnológico: Un proveedor de financiación con un profundo conocimiento de la tecnología subyacente, la forma en que se aplica, y los beneficios comerciales que trae, ofrecerá acuerdos de financiación que se adapten al perfil financiero de cada organización.

Experiencia y compromiso del sector: Proveedores de financiación que no solo conocen el sector y comprenden su dinámica, sino que también cuentan con un historial de apoyo financiero continuo para la industria.

Rango de financiación: Los instrumentos de financiación especializados pueden ofrecer las capacidades necesarias para garantizar la continuidad del negocio en tiempos difíciles. Financiación alineada con los resultados comerciales; financiación de ventas que ayuda a persuadir a los clientes a invertir