¿Cómo mide el nivel oxígeno en sangre el nuevo Apple Watch?

La última edición del reloj inteligente de Cupertino señala algo más importante que la hora, la mensajería, las apps o las llamadas: nos advierte si algo falla en nuestro organismo para estar sobre aviso

Apple Watch Series 6 pone la tecnología al servicio de la salud con la incorporación de un sensor capaz de informar sobre el nivel de oxígeno en la sangre. A través de un haz luminoso, el dispositivo puede interpretar el color de la sangre y, con la ayuda de los algoritmos, determinar el nivel de oxígeno en sangre en función de la intensidad del color rojo bajo la piel: si es muy oscuro tiene menos oxígeno que si es un poco más claro. De esa forma, la aplicación ‘Blood Oxygen’ (Oxígeno en sangre), actúa como lo haría un oxímetro o un pulsioxímetro: toma la lectura del oxígeno transportado por la sangre desde la muñeca y en apenas 15 segundos.

Además, la nueva familia de relojes de Apple puede capturar esta información mientras que el usuario duerme. En todos los casos, cualquier lectura inferior al 90% invita al usuario a contactar con su centro de salud para realizarse un chequeo en condiciones.

A grandes rasgos, la saturación permite conocer el oxígeno que circula por la sangre, un dato de especial relevancia cuando la persona sufre problemas respiratorios o sensación de asfixia. La misma herramienta se utilizaba hace décadas para conocer hasta qué altitud podrían soportar los pilotos em pleno vuelo sin déficit severo de oxígeno ni capacidades físicas. Por lo tanto, El funcionamiento del Blood Oxygen está inspirado en los referidos pulsioxímetros que presionan un dedo para averiguar la densidad de glóbulos rojo que transitan por cada miligramo de sangre y así estimar la oxigenación del paciente.

La enfermedad del coronavirus ha magnificado esta información ya que, entre los síntomas más relevantes de la Covid-19 se encuentran las dificultades respiratorias, no siempre evidentes por los afectados. Pese a que no se trata de un termómetro (no tardará en aparecer en futuras generaciones de relojes inteligentes), la saturación del oxígeno arroja datos sobre el estado febril del usuario. De hecho, la alta temperatura corporal reduce el nivel oxígeno en la sangre al aumentar el flujo sanguíneo, algo también frecuente entre los infectados por la Covid-19.

Los nuevos Apple Watch ayudarán a detectar contagios y prevenir el Covid-19

Fuentes de Apple explican que la app Oxígeno en Sangre del Apple Watch Series 6 sirve “para medir el porcentaje de oxígeno de los glóbulos rojos que transportan oxígeno desde los pulmones hasta el resto del cuerpo. Saber si la sangre está bien oxigenada puede ayudar a entender cuál es el estado de salud y bienestar general”. La compañía de California también deja claro que las mediciones de la app Oxígeno en Sangre “no están pensadas para uso médico, autodiagnóstico o consulta profesional y solo deben utilizarse para cuidar el bienestar general y la forma física”. En cualquier caso, la función de control y prevención siempre son valiosas para detectar de forma temprana posibles enfermedades.

Para la correcta lectura del oxígeno en sangre se debe evitar que el reloj esté demasiado bajo en la muñeca, mientras que la correa debe estar ceñida, pero sin apretar. El usuario debe colocar el reloj hacia arriba y procurar no moverse, por lo que Apple recomienda dejar apoyada la mano sobre una mesa.

Desde el punto de vista técnico, el Apple Watch Series 6 utiliza el sensor óptico de frecuencia cardíaca ya presente en otras familias de relojes de Apple para añadir funciones de lectura de oxígeno en sangre. Durante la captura de información, “el cristal trasero se ilumina con luces LED rojas y verdes para proyectar una luz infrarroja en la muñeca. En ese momento, los fotodiodos miden la cantidad de luz reflejada a través de la arteria humeral a la altura de la muñeca”. En un estado óptimo de forma, la saturación debería situarse en el 99%, mientras que lo que descienda de 90% sería motivo de preocupación. Ahora bien, durante el reposo prolongado de la noche resulta habitual que la saturción descienda al 93%.