La Roomba se vuelve casi cuadrada

El robot aspirador s9+, el más avanzado de la compañía, cambia su tradicional forma circular para que no se le resista ninguna esquina

Muchos usuarios de robots aspiradores se habrán preguntado por qué estos dispositivos suelen ser redondos y no cuadrados. Más allá de las cuestiones de diseño, los ingenieros consideraban que de esa forma accederían a más lugares y que los cepillos que van atrayendo la suciedad serían suficientes para no dejarse nada en el camino. Ahora iRobot, la marca fabricante de los originales Roomba, ha dado el salto con su robot más completo hasta el momento, el s9+. Su precio (1.499 euros) ya nos avisa de que estamos ante el modelo premium de la marca y puede parecer elevado, pero si tenemos en cuenta que a cambio nos olvidaremos de pasar la aspiradora y la mopa durante unos cuantos años...Una de sus características lo vuelven esopecialmente útil en tiempos como estos de confinamiento y de mayor higiene y desinfección: el s9+ incluye un sistema antialérgico que atrapa y bloquea la suciedad, los residuos y los alérgenos desde el robot hasta la estación Clean Base evitando así que vuelvan a escarparse al aire. Leemos en su tabla de especificaciones técnicas que cuenta su filtro captura el 99% de los alérgenos del moho, polen, polvo y ácaros.

Recordamos que iRobot empezó su actividad como fabricante de robots militares para la desactivación de explosivos, entre otras misiones. Con el tiempo, terminó volcando esa experiencia en los productos de consumo en el hogar y abandonó la anterior línea de negocio. La compañía sigue apostando por dos familias de modelos: los Braava para realizar el fregado y los Roomba como aspiradores. El Roomba s9+ destaca por ese diseño cuadrado en su zona delantera, que le permite acabar con cualquier resto que dejemos lo más arrinconado posible. En las pruebas, le hemos hecho unas cuantas perrerías y trampas y aun así hay que reconocer que se lo lleva todo. Si ya el modelo anterior que tuvimos ocasión de probar, el i7+, era bien eficiente incluso en esas esquinas -si dejaba algo era imperceptible-, ahora ya no hay duda. La marca ya había apostado por los robots cuadrados para aquellos moderlos que utilizan agua para hacer el fregado, como el Braava Jet m6.

Aparte de su forma exterior visible, en su zona inferior también se ha modificado la posición de las ruedas para permitir que los cepillos de goma que van arrastrando la suciedad y también abrillantando el suelo crezcan un 30%. También en la base el orificio por el que aspira la suciedad hacia el tanque ha cambiado de lugar. Y es que, al igual que el Roomba i7+, la base aspira a su vez el depósito del robot y va acumulando toda la suciedad en unas bolsas desechables estancas que pueden almacenar hasta 30 depósitos del aspirador. Basta levantar la cubierta de esa torre de la estación de carga para extraer la bolsa cuando nos haya enviado un mensaje desde la aplicación en el móvil de que debemos hacerlo. Así, solo tendremos que manipular directamente la Roomba en casos muy puntuales, cuando hayamos dejado olvidados unos zapatos con cordones o se haya podido quedar atascada con una puerta entreabierta que le impide regresar a su base.

Otra de las novedades del Roomba s9+ es que su capacidad de succión es 40 veces superior a los anteriores modelos de las series 600 de Roomba AeroVac. Este dato nos permite conocer hasta qué punto han evolucionado este tipo de dispositivos.

También es novedad en el s9+ lo que sucede al detectar que se encuentra sobre una alfombra. Entonces, activa el llamado Power Boost y así aumenta el poder de succión para llevarse toda la suciedad que ni vemos y que se va depositando entre las fibras de esos tejidos que pisamos.

No podemos olvidarnos de hablar de su sistema de mapeo inteligente, ya incluido en anteriores productos como el i7+, ahora también mejorado. Sus múltiples sensores le permiten trazar en cada caso la ruta más rápida una vez que ha dibujado el mapa de toda la casa. Como saben, en las primeras jornadas, el robot se afana en inspeccionar cada estancia de la vivienda hasta que realiza el plano completo. Como controlamos todos los robots desde la aplicación de iRobot en el móvil, podemos dar nombre a cada habitación y a partir de ahí pedirle que lo limpie todo o solo determinadas zonas.

También desde el smartphone vaciaremos el depósito hacia la Clean base o sabremos si ha habido alguna incidencia, si ha vuelto a la base para recargarse antes de concluir el trabajo, etc. Como también sucedía con el i7+, podemos coordinarlo con el friegasuelos Braava Jet m6 y que, una vez concluido el trabajo de aspirado, su compañero de equipo salga a concluir la faena. Comunicación máquina a máquina. En las especificaciones técnicas encontramos otro dato que llama la atención: su nuevo sensor 3D escanea constantemente cuando tiene delante a una velocidad de 25 veces por segundo. Eso le permite llegar con la máxima intensidad a cualquier rincón y aminorar la velocidad a medida que se acerca a un obstáculo.

Con Roomba s9+ la compañía inicia un nuevo camino en el sector más premium de robots aspiradores. Más allá de su nuevo diseño, la tecnología que incorpora lo sitúa en lo más alto en esta categoría de productos para el hogar. Su precio, como decíamos (1.499 euros) puede asustar de primeras, pero si pensamos en el trabajo que nos va a ahorrar a la larga, lo cierto es que termina compensando. Será cuestión de tiempo, pero igual que hoy es impensable un hogar sin lavadora y lavavajillas, los robots aspiradores quieren volverse igualmente indispensables en cualquier casa. Más aún si se tiene mascota en casa...