Transperfect supera los 1.000 millones de facturación y firma 30 años de crecimiento

El vicepresidente senior de Transperfect explica cómo trabaja un grupo nacional privado que opera en todo el mundo con Barcelona como su oficina más importante.

Parece parte de un proceso normal que una empresa nazca, crezca, busque inversores e incluso salga a bolsa para conseguir financiación. Sin embargo, uno de los líderes en soluciones lingüísticas y creación de contenidos, Transperfect, es una empresa privada, que opera en todo el mundo con más de 100 oficinas y presenta una tasa de crecimiento más alta que Apple, aunque es más pequeña en cuanto a valor. Barnaby Wass, vicepresidente senior de la compañía, supervisa las actividades de la oficina de Barcelona, entre otras como la de Estambul o Tokio, y bajo su mando la ha convertido en la más importante de todo el grupo. “Empecé en Barcelona hace 15 años con un equipo de tres personas y ahora es la más grande del grupo con 1.116 trabajadores. En Barcelona trabaja gente de muchos países y sin esta oficina estoy seguro de que no hubiéramos conseguido unos ingresos récord”, dice Wass a elEconomista.

Estos ingresos de los que habla Wass son los 1.100 millones de dólares que Transperfect facturó el año pasado, superando los 1.000 millones por primera vez y manteniendo una racha impecable de 30 años seguidos, y todos sus trimestres, creciendo. “Además, la mayoría del crecimiento es orgánico y sin las adquisiciones realizadas el año pasado también habríamos superado los 1.000 millones”, afirma Barnaby Wass. El peso de España sobre esa facturación es superior a los 100 millones de euros. Desde Transperfect, Wass confirmó en exclusiva para elEconomista que el primer trimestre del año la compañía creció a un ritmo del 12,1% a nivel global y que las oficinas bajo su cargo mejoraron un 22,7%. De hecho, el tercio de los ingresos de Transperfect se consiguen bajo la supervisión del directivo.

Barnaby Wass explica que el secreto del modelo de la compañía es “la diversificación”. “Lo importante es tener muchos servicios y mirar siempre al cliente. Al ser una empresa privada no tenemos que presentar balances económicos ni retornar inversiones. Podemos pensar a 10 años”, argumenta. “Pensar en los clientes es sinónimo de éxito porque podemos ver qué necesita y anticiparnos a sus demandas. Trabajamos en base a los servicios que compran y cuando una unidad de negocio no va bien por el contexto del momento, otra la compensa”, añade. Como ejemplo pone un servicio de impresión y entrega en Nueva York, parado durante la pandemia, pero compensado por el crecimiento del negocio de pantalla: el subtitulado, la traducción, el doblaje. “Luego en 2021 volvió la actividad y fue un año de mucho crecimiento”.

Este enfoque cercano a los clientes “nos hace únicos”. “La competencia debe mirar los costes y a veces decide ir a sitios de bajo coste. Nosotros tenemos talento en sitios de bajo coste, pero también en Londres, París, Barcelona o Madrid. Tenemos más de 100 oficinas y así podemos unir culturas distintas, estar más cerca de los clientes y tener presencia comercial y de producción en todo el mundo”, concreta Wass. En ese sentido, el directivo pone el ejemplo de un manual de instrucciones. “Hay lugares donde todo es digital, pero por ejemplo en China todavía lo quieren impreso. La evolución de cada mercado es distinta y nuestro enfoque nos permite tener muchos negocios distintos integrados en uno grande para escuchar al cliente, darle lo que necesita y resolver sus necesidades”, acaba.

Barcelona, pilar del grupo

En Barcelona, Transfperfect tiene profesionales en todas las áreas de negocio. “Hay investigación y desarrollo, hay ejecutivos, una plantilla de agentes para videojuegos, localización de ensayos clínicos. Tenemos estudios de grabación de primera calidad y hasta una sala con tecnología Atmos en el Poblenou”, describe Wass. “Tenemos todos los servicios aquí y la oficina es también un centro de innovación. Se realizan inversiones en los sectores nuevos y tradicionales. En Barcelona hay una efervescencia única”, añade.

Barnaby Wass confía en mantener el éxito de la oficina de Barcelona y asegura que “las cifras de este año indican que está creciendo por encima del grupo. Hemos demostrado nuestro éxito convirtiéndonos en la primera oficina del grupo”. Este ambiente competitivo, defiende Wass, hace que todo el grupo trabaje mejor. “Es como en los Juegos Olímpicos, trabajamos juntos en el grupo, pero es importante mirar por nosotros y mantener el liderato. Tengo confianza en que Barcelona siga con este crecimiento”.

Con todo, Wass indica que los objetivos a largo plazo de Transperfect es seguir como hasta ahora con su filosofía de “innovar, diversificar, crecer en nuevos mercados, sobre todo el este de Asia, y en tecnologías como la inteligencia artificial”. El directivo adelanta que seguirán realizando adquisiciones.