Catalunya vuelve a aparecer en el mapa de los inversores extranjeros

Desde la reanudación de la actividad tras la pandemia, Catalunya ha centrado sus esfuerzos en atraer más inversión extranjera tras cinco años de caída por la pandemia y el ‘procés’, que mermaron la imagen de la región fuera de sus fronteras mientras comunidades como Madrid mejoraban sus cifras.

Una de las prioridades del Govern una vez superada la pandemia, o al menos cuando ya se retomaba una cierta normalidad, era optimizar el atractivo de Catalunya para la atracción de inversión extranjera. Cabe recordar que, antes del Covid-19, el conflicto político catalán provocó una reducción importante de la inversión extranjera en la región. Mientras en 2013 Madrid concentraba el 63% de la inversión procedente de otros países, en 2020 fue el 75% en una subida que, en paralelo, conllevaba una caída de la misma en Catalunya.

Con datos del Idescat, la inversión extranjera en Catalunya descendió desde los 8.272 millones de euros en 2016 hasta los 2.968,8 millones en 2021 en una tendencia negativa que solo dio visos de recuperación en 2018 cuando se mejoraba desde los 3.431,1 millones de euros de 2017 hasta los 4.326,4 millones de 2018. Esa mejora quedaría en nada tras la caída de 2019 hasta los 3.838,7 millones. Lo que no ha cambiado, eso sí, es la procedencia de la inversión, con la Unión Europea concentrando la mayoría de la inversión y con América del Norte, Asia y Oceanía y varios paraísos fiscales, por este orden, repartiéndose el resto.

No obstante, parece que los esfuerzos del Govern por atraer nuevos inversores, así como el atractivo natural de la región por su posición privilegiada en Europa, por las infraestructuras de Barcelona y por su posicionamiento como una de las ciudades preferidas para el talento digital, están funcionando. Según datos de DataInvex proporcionados por el Ministerio de Industria y Comercio, el primer semestre del año se captaron en la región 1.690 millones de euros desde el extranjero, 277 millones más en comparación con el mismo período del año pasado. Esa cifra suponía el 10,7% de la inversión extranjera total en España. Pese a que la representación sobre el total español parece baja, cabe destacar que el país ha casi duplicado la captación hasta los 15.660 millones de euros.

Récord de empresas extranjeras en Catalunya

Las cifras ofrecidas por el ministerio, sin embargo, no diferencian entre la inversión destinada a la creación de empleo o nuevas fábricas, por ejemplo, y otras inversiones como la compra de acciones. Para ello, hay otros indicadores que muestran la buena posición de Catalunya de cara al mundo ahora que parece que lo peor del Covid-19 ya ha pasado y, lo que es mejor a ojos del inversor extranjero, que las disputas con el Estado tampoco llegarán al punto vivido en 2017, cuando no solo cayó la inversión, sino que además muchas empresas decidieron cambiar su sede a otras regiones o dirigir sus planes de futuro hacia otros lugares.

Uno de estos indicadores es la cantidad de empresas extranjeras establecidas en la región. En ese sentido, el pasado mes de noviembre, Roger Torrent, consejero de Empresa y Trabajo de la Generalitat, anunció, en presencia de Pere Aragonès, presidente de la Generalitat, y de Natàlia Mas, consejera de Economía y Hacienda, que Catalunya cuenta con 9.155 empresas extranjeras establecidas, lo que supone un 2,8% más que antes de la pandemia -2019- y la cifra más alta de la serie histórica. Estos datos, según comentaron, se desprenden de un estudio de Acció.

Durante la presentación, Torrent reiteró que atraer inversión extranjera “es una prioridad de este Govern”, que celebró además que “casi la mitad de los proyectos son industriales”. Según la Generalitat, Catalunya trabaja ahora mismo con 613 proyectos de inversión extranjera que potencialmente podrían desembarcar en Catalunya, un 56% más respecto a 2020. Desde el gobierno catalán entienden que no se van a poder concretar todos los proyectos, pero prometen que se trabajará para ampliar la cifra al máximo.

Según detalla el informe de Acció, hay compañías de 90 países diferentes, siendo Francia el país que más apuesta por Catalunya, concentrando el 13,6% de las empresas, por delante de Alemania, con un 12,2%, Estados Unidos, con un 13%, y el Reino Unido, con un 10,5%. Por sectores, los vinculados a la industria más relevantes son los de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) y la digitalización, así como la maquinaria y los bienes de equipo, que representan el 17% del conjunto de filiales de empresas extranjeras.

Catalunya en el extranjero

Pero no solo son las compañías extranjeras en Catalunya las que aportan riqueza a la región, también es importante la presencia de empresas catalanas en el extranjero, compañías que, si bien invierten en otros territorios, generan riqueza que se reinvierte en Catalunya. En ese sentido, la cifra de filiales catalanas en otros países es muy cercana a la de filiales de empresas extranjeras en Catalunya. Según los datos revelados por Acció, hay 8.382 compañías catalanas con filiales alrededor del mundo, un 3,1% más que antes de la pandemia. Esta cifra pone de manifiesto, dicen desde el Govern, la fuerza de la industria catalana, que “se ha adaptado a la nueva manera de hacer negocios en el mundo y ha seguido apostando por estar cerca de sus clientes y proveedores extranjeros mediante las filiales”.

Todas las filiales repartidas por el mundo corresponden a 3.165 empresas en total, concentradas sobre todo en Europa y América, siendo Portugal el país que más filiales catalanas alberga, un 9,3% del total; seguido de Estados Unidos, un 8,7%; México, un 6,1%; Brasil, con otro 6,1%, y Francia, con un 6%. Según destacan desde Acció, el 30,3% de las compañías catalanas que se han internacionalizado son del sector servicios, mientras que el 19,5% son manufactureras y un 18,1% son comerciales. Por volumen de facturación, destacan las empresas del sector de la alimentación, un 11,8%; las infraestructuras y la construcción, un 10,6%; las finanzas y los seguros, un 10,4%, y la industria farmacéutica, un 8,9%.

Estas cifras se suman a las otorgadas por el ministerio de Industria, Comercio y Turismo sobre las exportaciones en Catalunya para crear un retrato de optimismo que puede sentar las bases de una recuperación y subida de la inversión extranjera en Catalunya y de un buen rendimiento comercial de las catalanas en el extranjero. En ese sentido, según los datos del ministerio, hasta junio las exportaciones catalanas subieron un 17,2% respecto al primer semestre de 2021 hasta un total de 46.492,6 millones de euros. Este montante supuso el 24,2% de las exportaciones totales de España y un 24,4% más respecto a la cifra de 2019, antes de la pandemia, con lo que la actividad de las compañías catalanas presentes en el extranjero ya ha recuperado los niveles previos al Covid-19. Sin embargo, también se dispararon las importaciones a la región, un 28,2% hasta los 55.393,6 millones de euros hasta junio, con lo que el saldo comercial acumulado durante el primer semestre de 2022 en Catalunya fue negativo.

De este modo, los esfuerzos del Govern se concentrarán también en incrementar la competitividad de las compañías catalanas fuera del Estado. Según cálculos de Acció, las exportaciones del primer semestre fueron también la cifra más alta de la serie histórica, pero desde la Asociación de Empresas Industriales Internacionales se llama a la precaución, ya que dicen haber detectado una “ralentización” en la demanda del mercado exterior. Según la entidad, los próximos meses son una “incógnita”, con el contexto internacional de guerra e inflación amenazando al desempeño de las catalanas fuera de las fronteras españolas. No obstante, desde la asociación “no se contempla” la posibilidad de “un gran frenazo” de las exportaciones de cara al segundo semestre del año gracias al “gran número” de pedidos que acumulan las empresas catalanas.

Con el procés en el recuerdo y el Covid-19 en fuera de juego, Catalunya va por buen camino para recuperar su atractivo internacional.