Por qué cada vez más empresas apuestan por la inclusión de la diversidad LGTBI

En un entorno recesivo, las empresas más resilientes serán las más innovadoras. Ya está demostrado que innovación y creatividad van de la mano de la diversidad y de permitir que el talento dentro de la organización se exprese con todo su potencial para aportar soluciones de negocio diferentes. Para un 10% de la plantilla, sin embargo, esto no es posible. Sencillamente porque les hemos dicho que oculten su singularidad en el trabajo, simplemente por desconocimiento de una realidad que culturalmente está cargada de prejuicios y estereotipos. Estamos hablando de aquellas personas con orientaciones sexuales e identidades de género diversas, es decir, lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, intersexuales, etc.

Durante muchos años discriminadas, las personas LGTBI aún se encuentran invisibilizadas en los entornos corporativos. Por un lado, las empresas lo consideran, erróneamente, como parte del ámbito privado de los empleados/as y prefieren no hablar de ello: según un estudio reciente de la Fundación IE, el 58% de las organizaciones en España no presta atención a la diversidad LGTBI, aunque sí están incorporando acciones para la inclusión de otras diversidades existentes en la empresa: género, personas en situación de discapacidad, generaciones, etc. Por otro lado, la existencia de sesgos culturales y el lenguaje poco inclusivo en las empresas -el 75% de trabajadores han visto algún tipo de agresión verbal hacia personas LGTBI en el ámbito laboral según un estudio reciente de UGT- hace que solo un 38% de las personas LGTBI se visibilice abiertamente con sus compañeros/as de trabajo por miedo a limitar su carrera profesional. Esta cifra se reduce a un 28% en el caso de los jóvenes LGTBI que, siendo perfectamente visibles en sus entornos personales, no encuentran en la empresa referentes que hablen con naturalidad de ello.

“Es difícil hasta que se intenta” es el comentario frecuente de las empresas una vez que se embarcan en desarrollar programas y acciones de inclusión de la plantilla LGTBI -que, aunque invisible, ya existe dentro de la empresa y podría acercarse a un 10% de la misma- ya que la principal barrera para que se hable de esta diversidad con naturalidad es la falta de información y visibilización. Además, existe la creencia generalizada de que hay poco por hacer, puesto que nuestra legislación ya otorga a las personas LGTBI similares derechos. Sin embargo, eso no impide a las empresas hablar con naturalidad de otras diversidades que gozan de igualdades legales mucho más consolidadas. Abrazar la diversidad en las empresas es, precisamente, aceptar y empatizar con aquellas personas que proceden de situaciones vitales diferentes y comprender que sus oportunidades laborales puedan ser menores a las de una mayoría consensuada.

Los datos así lo demuestran: un informe publicado en el 2019 por la Agencia de Derechos Fundamentales de la UE refleja que un 11% de las personas LGTBI se sienten discriminadas a la hora de encontrar trabajo. Ese porcentaje aumenta a un 38% en el caso de las personas trans, que presentan los mayores niveles de desempleo en España. Existe además un techo de cristal para las personas LGTBI, como demuestra su inexistencia o invisibilidad en las cúpulas directivas. Además, las Naciones Unidas reconocen a las personas LGTBI como grupo vulnerable y en riesgo de exclusión social y nos recuerdan que en cerca de 70 países del mundo -incluso dentro de la propia UE- aún existe un gran rechazo hacia ellas, en muchos casos aparejado a multas y penas de prisión. De hecho, las diferencias de libertades para las personas LGTBI son tan grandes a nivel internacional que suponen un quebradero de cabeza para la defensa de los derechos humanos y para las propias empresas multinacionales que quieren cumplir con sus códigos de ética empresarial en países donde éstos entran en fricción con las leyes y cultura locales, teniendo que evaluar las consecuencias que para un empleado/a LGTBI tendría el ser trasladado a ellos. Por eso es necesario, en primer lugar, aceptar esta diversidad como una realidad ya existente en la empresa y, por otro, hacer explícito y extensivo el compromiso con los valores corporativos de respeto y no discriminación hacia todos los empleados/as, también los LGTBI, allí donde se opere.

Pero las empresas tienen en cuenta a la diversidad LGBTI. Es mucho el talento que se pierde manteniendo unos armarios que la sociedad ya está desmontando y está suficientemente demostrado que, cuando las empresas emprenden programas dirigidos a la inclusión de la diversidad LGTBI se generan relaciones más empáticas entre empleados y empresa, el clima laboral mejora y el grado de visibilización y la productividad de la plantilla LGTBI aumenta significativamente. Además, la empresa eleva su reputación corporativa y se convierte en un mejor reflejo de las sociedades en las que opera, adelantando su ventaja competitiva en cuanto a comunicación y engagement con sus clientes diversos. De hecho, un estudio de Open for Business 2020 señala como uno de los indicadores clave en el incremento de la competitividad económica el grado de aceptación que una sociedad tiene hacia las personas LGTBI y establece rankings de ciudades económicamente más resilientes en base a este criterio.

Por todo ello, cada vez es mayor el número de empresas que han hecho explícito su compromiso con la no discriminación y el respeto de sus empleados/as LGTBI. Precisamente, para hablar de este tema con naturalidad, acompañar a las empresas y promover una buena gestión de la diversidad e inclusión LGTBI, en el año 2018 surge como asociación sin ánimo de lucro REDI, la Red Empresarial por la Diversidad e Inclusión LGTBI en España, a la que ya pertenecen más de 90 empresas de todos los tamaños y sectores, entre ellas varias de las grandes empresas del IBEX 35. De esta manera REDI se ha convertido en el foro experto y permanente de consulta sobre la diversidad LGTBI en el contexto corporativo español, proporcionando formación y herramientas de gestión, participando en los principales debates empresariales, gubernamentales y académicos al respecto, y estableciendo sinergias y colaboraciones con instituciones como la CEOE, gobiernos locales y regionales, etc. Por ello, invitamos a las empresas a conocer nuestra asociación y sus logros y a unirse al reto de desarrollar sociedades más inclusivas y justas considerando la inclusión del talento LGTBI como una práctica habitual y una ventaja competitiva.