Apunts supera el Covid-19 fiel a su misión social
Apunts, que da trabajo a personas con problemas de salud mental, supera la crisis gracias al valor del trabajo de sus empleados y a la calidad de sus productos
El trabajo, a veces, es mucho más que el modo de conseguir un salario con el que vivir. El trabajo, en ocasiones, es justo lo que necesita una persona para normalizar su vida, para integrarse en un colectivo y disfrutar de lo que consideramos ‘una vida normal’. Las personas con discapacidad valoran mucho la oportunidad de poder trabajar y ganar el dinero con el que mantenerse, que a la vez les hace ganar en autonomía. Gracias a entidades como la Fundació Joia, que cuenta entre sus proyectos el centro especial de trabajo Apunts, muchas personas con discapacidades pueden disfrutar de un trabajo digno. Julio Castillo, gerente de Apunts, explica que el centro de trabajo “es un espacio protegido para la gente que tiene discapacidad con problemas de salud mental y que se organiza en varias líneas de negocio, como la mensajería”. Según sus cuentas, en Apunts trabajan 87 personas con el certificado de discapacidad de más del 33%.
Castillo expone que Apunts lleva “30 años funcionando, desde que nació por una necesidad que la Fundació Joia detectó en su momento”. “Se detectó que hay gente que necesita un espacio especial de trabajo y la fundación lo hizo. Al principio lo vinculó a una copistería en una universidad, pero ha ido evolucionando y con el tiempo se han generado nuevas líneas de negocio, nuevas oportunidades de trabajo”, añade. En total cuentan con 107 empleados, de los cuales 87 tienen el citado certificado de discapacidad. Apunts, además de servicios de copistería, ofrece servicios de creatividad, diseño, impresión digital, merchandising, gran formato y post-impresión. Como a todas las empresas, 2020 ha sido un frenazo a todos sus planes, pero Apunts ha conseguido superar la peor parte de la pandemia sin la necesidad de buscar soluciones traumáticas como el Erte o los despidos. No obstante, en casos como los de Apunts no es el dinero lo más importante, sino cómo han superado sus trabajadores este príodo. “Ha sido muy duro”, reconoce Castillo. En el plano económico, el gerente de la emprea explica que “se cayeron muchas líneas de negocio, quedando paralizadas algunas como la parte de impresión”. Sin embargo, otras como la de paquetería subieron para sostener la economía de Apunts. “Estamos vinculados a la red de GLS, que con la primera ola disparó los envíos. Pasamos de 700 diarios y 1.200”, dice antes de poner una cifra a la caída. “Perdimos un 15% de la facturación durante la primera ola”.
En el plano personal “fue muy complicado”. “La repercusión de la pandemia en la gente con problemas de salud mental ha sido difícil. Había personas que no podían aguantar el estar en casa todo el día y tenían que venir y otras que, al revés, tenían miedo de salir, pero en general todos respondieron muy bien al reto y hemos sabido gestionar una situación que ha traído aumentos de bajas, situaciones de ansiedad, complicaciones...”, completa Castillo. En el acumulado del año, el gerente de Apunts estima que la facturación caerá alrededor de un 7,5% interanual. “Hemos recuperado desde el primer semestre”, añade.
El valor de una oportunidad
Con todo, ¿Qué beneficios tiene el trabajo para las personas con problemas de salud mental más allá del económico? Castillo lo tiene claro. “Con el trabajo se le reconoce cierta igualdad en competencias con otros trabajos, además de ofrecérsele un entorno que le ayuda a estabilizarse y a evolucionar. El trabajo les ordena, les exije, les hace enfrentarse a retos, les saca de la zona de confort y, por tanto, les hace evolucionar”, detalla antas de reconocer que “esto no quiere decir que el camino sea fácil y que no haya situaciones de tensión o recaídas, que las hay, pero son más cortas y la recuperación es más rápida”. En ese sentido, para poder ofrecer puestos de trabajo se necesitan clientes que permitan la autonomía económica de la empresa. Apunts cuenta con una buena base de clientes construida con el paso del tiempo, pero Castillo no esconde que las empresas siempre tienen, de primeras, cierto punto de desconfianza fente a sus trabajadores. “¿Quién puede pensar que personas con problemas de salud mental me van a hacer un trabajo de calidad y rápido? Nosotros debemos demostrar que sí, que somos un centro especial de trabajo porque gestionamos problemas que otras empresas no, pero de puertas hacia fuera nuestros productos tienen la calidad que exige el mercado”, asegura. “Cualquier producto y servicio de Apunts tiene una garantía de calidad”, promete antes de reflexionar que “al principio sí, te ponen problemas, pero a medida que trabajan contigo se dan cuenta de que eres un proveedor eficiente. Es la mejor garantía para mantener el vínculo con una empresa”. Apunts, cuenta Castillo, “tiene el orgullo de trabajar con empresas top y no porque ellas quieran trabajar con nosotros, que también, sino porque les damos la calidad que buscan. Nos cuesta más, sí, pero el producto es impecable”.
Educación y evolución
La salud mental es un campo en el que se ha avanzado mucho, sobre todo a nivel social. Castillo reconoce que hace años, “tenía un estigma muy acusado. Eran los ‘locos’, pero la salud mental es cada vez más conocida y hemos visto que todos somos candidatos a tener un problema”. “Hace años nadie reconocía que había tenido un brote o una depresión, ahora sí”, añade.
Una de las claves para su normalización es la educación. “Para nosotros es parte de nuestra misión: dar a conocer lo que somos y hacemos para que cale en la sociedad”, apunta Castillo. Apunts realiza, ahora no por culpa del Covid-19, visitas a centros escolares para ofrecer charlas con las que dar a conocer su misión y su trabajo, así como para concienciar sobre la salud mental. “La sociedad debe entender el problema para saber cómo afrontarlo de un modo efectivo”, cierra el gerente de Apunts.