¿Cómo valora el mercado bursátil la política medioambiental de la empresa?

La sostenibilidad medioambiental y los desafíos que se presenta son cada vez más importantes. Además, la correlación que tiene con los resultados económicos ha despertado el interés de académicos y directivos desde hace tiempo. La propia Agenda para el Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas recalca la necesidad de contar con empresas más sostenible. Pero, ¿es rentable para una empresa ser sostenible? Por un lado, tenemos los argumentos teóricos que sugieren que las preocupaciones medioambientales de las empresas tienen un impacto negativo en su cuenta de resultados. Por otro, que una empresa más sostenible obtendrá ventajas competitivas en términos de diferenciación e imagen, que se traducirá en una mejora de sus resultados económicos.

Con el fin de arrojar luz sobre el tema, en colaboración con el profesor David Castillo y la doctoranda Nour Chams, hemos publicado un estudio en la revista Business Strategy and the Environment, que investiga específicamente la valoración de la política medioambiental de la empresa por parte del mercado bursátil. Se analiza un conjunto de más de dos mil empresas de todo el mundo desde 2014 hasta 2017, y ha permitido obtener algunas conclusiones interesantes.

La primera de ellas es que las empresas que obtienen un mejor desempeño medioambiental son peor valoradas por el mercado bursátil. La segunda, que la relación negativa entre el desempeño ambiental y valoración bursátil no se da de manera uniforme en todas las regiones del planeta, sino que se observa fundamentalmente en los Estados Unidos y, en menor medida, en China. En el caso de Europa, el mercado bursátil parece mostrarse más bien neutral. De cualquier forma, cabe mencionar que en ninguno de los países estudiados, incluidos los escandinavos, considerados como los más avanzados en temas medioambientales, se ha observado una valoración positiva del mercado bursátil a las buenas prácticas medioambientales de las empresas.

¿Qué implicaciones prácticas extraemos? La más evidente es que la evaluación negativa -o neutra, en el mejor de los casos- del mercado bursátil hacia el desempeño medioambiental actuaría como elemento disuasorio para lograr el objetivo de contar con empresas más comprometidas con el medio ambiente.