Grandes fortunas y ‘family offices’ españoles se lanzan al capital riesgo

Las sociedades de capital riesgo atraen cada vez más a grandes fortunas y altos patrimonios españoles, con los ‘family offices’ muy activos en sus estrategias.

Los family offices españoles aumentan su apuesta por el capital privado como activo de inversión.Toman el relevo a los inversores institucionales en un escenario donde se ven abocados a reducir su exposición, rebajar sus programas o incluso vender en un mercado secundario boyante.

“Muchos inversores institucionales han parado sus programas en private equity para este primer semestre del año”, confirma Romain Ribello, Country Head Iberia de Cedrus & Partners. “El mal comportamiento de las bolsas ha provocado que hayan sufrido el efecto denominador y hayn tenido que ralentizar o pausar sus programas de inversión. Observamos también que algunos institucionales se han visto obligados a deshacerse en los mercados secundarios de parte de su cartera para poder seguir alineados con su política de inversión y sus objetivos de asignación de activos. Esta tendencia ha provocado una cierta ralentización en la recaudación de nuevos fondos”, añade.

Como consecuencia muchos gestores han decidido crear divisiones especializadas para clientes de banca privada que históricamente no habían sido atendidos por el mundo del capital riesgo por falta de infraestructuras y de recursos. Según Bain Capital, los inversores con patrimonios de entre 1 y 30 millones de dólares representan un volumen de 70 trillones de dólares frente a los 17 trillones de dólares de inversores con un patrimonio superior a 30 millones. “Existe una clara oportunidad para las gestoras de ofrecer acceso a sus fondos a inversores sin experiencia en capital riesgo.Todo ello reforzado por la volatilidad de los mercados financieros, incentivando las gestoras a cambiar la cartera modelo 60/40 hacia una asignación estratégica con un mayor peso en activos alternativos”, concluye.

En España, el impuesto de patrimonio también ha forzado a los family offices a revisar sus estrategias de inversión en productos como las SICAVs, que durante muchos años fueron el instrumento favorito de los grandes patrimonios españoles para invertir en bolsa y en otros activos cotizados. Hoy en día éstas se han disuelto o han optado, en su mayoría, por transformarse en sociedades de capital riesgo (SCRs).

Banca privada y gestión patrimonial

Cedrus & Partners ayuda a entidades de banca privada y de gestión patrimonial a crear su propia gama de productos alternativos en España y construye programas a medida para family offices. “A través de nuestra plataforma de análisis de fondos estamos en contacto con un universo de más de 1.400 fondos alternativos. El sentimiento entre nuestros más de 90 GPs de secundarios es unánime: aprecian cada vez más una actividad mayor y un nivel de dealflow y de descuentos relevantes. Los fondos de secundarios representan una clara solución de liquidez para los institucionales que quisieran deshacerse de parte de su cartera (operaciones de LP-led) o aquellos gestores de primarios que busquen dar salida a sus participadas (operaciones de GP-led) en un contexto de ajustes en las valoraciones y de ralentización en las distribuciones a LPs”, confirma Romain Ribello. Hoy en día, la firma trabaja con algunos de los mayores family offices de España y ha firmado un acuerdo estratégico con Tressis Gestión para construir su gama de productos alternativos. “Hemos cerrado nuestro primer vehículo, Tressis Plan Capital Alternativo con 30 millones”, confirma.

Tras un profundo análisis, en 2018 Cedrus & Partners decidió dar el salto con una oficina local al identificar que España era el mercado óptimo para replicar y desplegar los servicios de la firma, alentada por el éxito y el amplio despliegue de sus servicios en Francia. “Un factor decisivo fue el gran margen de crecimiento que vimos por el escaso capital invertido actualmente en activos alternativos (10 veces inferior que en Francia, según Preqin). Cuando aterrizamos en España la cifra de activos alternativos bajo gestión no alcanzaba los 23.000 millones de euros. Nuestra convicción y misión por aquel entonces como hoy es plena: acercar la oportunidad a quienes deseen involucrarse en capital privado, siempre con un sello diferenciador y al alcance de los mejores fondos, independientemente de su origen o de su estrategia”, concluye Ribello.