El Ibex acelera ventas para reducir 9.000 millones de deuda

Los grandes grupos españoles aceleran la desinversión de activos para reducir su endeudamiento en un contexto en el que los costes financieros se han visto afectados al alza por la subida de los tipos de interés. En las últimas semanas se han rubricado operaciones de venta por parte de empresas cotizadas, la mayoría incluidas en el Ibex 35, que elevan la cifra en 2023 a más de 9.000 millones de euros.

En paralelo, varias compañías que mantienen en la rampa de salida algunos de sus negocios o que han anunciado su intención de sacar al mercado activos con el objetivo prioritario de recortar su endeudamiento. Con ello, el volumen total supera los 13.500 millones -al margen de otros procesos no públicos-. La transacción más relevante, por volumen, es la que ha acometido Iberdrola en México. La eléctrica vasca ha llegado a un acuerdo vinculante con México Infraestructure Partners para desprenderse del 80% de su negocio en el país (8.436 MW de ciclos combinados y 103 MW eólicos). El valor acordado para la venta asciende a 6.000 millones de dólares (5.507 millones de euros al cambio actual). Esta desinversión se produce tras los sonados enfrentamientos entre el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador y la compañía que preside Ignacio Sánchez Galán, que incluso en algún caso se ha trasladado al terreno judicial. Con la transacción, Iberdrola reducirá deuda y potenciará su posición financiera, al tiempo que refuerza su estrategia hacia el crecimiento en redes y renovables con EEUU como polo prioritario de inversión.

La multinacional española también protagonizó a comienzos de año otra gran desinversión cuando acordó con el fondo soberano de Noruega, gestionado por Norges Bank Investment Management, el traspaso del 49% en una cartera de 1.265 MW de nueva capacidad renovable en España por unos 600 millones de euros. Iberdrola y Norges negocian ahora ampliar esta alianza hasta cerca de 1.800 MW al incluir una nueva cartera de 500 MW en España y Portugal, por lo que la eléctrica podría ingresar 250 millones adicionales. Las operaciones se dirigen fundamentalmente a coinvertir en los proyectos renovables, permitiendo a Iberdrola asumir un desembolso menor. La desinversión de la eléctrica en México no ha sido la única realizada este año por una empresa española en el país. Enagás y Elecnor cerraron en abril la venta del 100% (50% cada una) en las sociedades mexicanas Gasoducto de Morelos y Morelos O&M a un fondo administrado por Macquarie por 190 millones de dólares (173 millones de euros).

La autopista en Texas de ACS

Dentro del Ibex 35, Telefónica ha ingresado 200 millones por la venta del 64% de su filial de fibra peruana a KKR y Entel. En marzo traspasó también el negocio en Latinoamérica de su participada de centros de datos Nabiax -tiene un 20% y Asterion un 80%- en una operación a la que el mercado atribuye un precio de unos 500 millones. Mientras, Inditex cerró en abril la venta del negocio en Rusia al grupo Daher. En el selectivo también Sacyr ha concretado varias desinversiones orientadas a eliminar su deuda neta con recurso -situada al cierre de marzo en 644 millones de euros-, un objetivo estratégico para 2025 que pretende alcanzar en 2023. Sobresale la venta del 100% de Valoriza Medioambiente a Morgan Stanley Infrastructure Partners (MSIP) por 734 millones. Un valor que arroja plusvalías de 250 millones para la compañía presidida por Manuel Manrique. La firma ultima también el traspaso del 100% de Valoriza Facilities por cerca de 100 millones. Asimismo, en las últimas semanas ha pactado las ventas del 49% de la Autovía del Eresma (Madrid-Valladolid) a GED Infrastructure y Caser por 69 millones y del 45% de la autopista irlandesa N6 al fondo de infraestructuras de Bestinver -el importe se estima en el entorno de los 20 millones-. En el marco de su nuevo plan estratégico, que presentará en los primeros meses de 2024, Sacyr también planea dar entrada a un socio en su división de Agua con una participación del 49% para replicar en sus concesiones de Colombia una alianza con un fondo, con una posición minoritaria, como hizo en Chile.

Sin salir del ámbito de las infraestructuras, ACS ha continuado este año desinvirtiendo en su filial de servicios en Australia, Ventia. El grupo que lidera Florentino Pérez se ha desprendido, en dos operaciones, de casi el 14,5% de la compañía cotizada, por las que ha ingresado unos 216 millones de euros. Para la segunda mitad del presente ejercicio la compañía española prevé cerrar el traspaso de la autopista SH-288, en Texas. Negocia con Abertis con una valoración de alrededor de 2.000 millones.

También FCC, que cotiza en el mercado continuo, ha rubricado una venta de relieve: ha dado entrada en su filial de Medio Ambiente al fondo de pensiones canadiense CPP Investments con una participación del 24,99% del capital. La firma que dirige Pablo Colio obtendrá así 965 millones para impulsar el crecimiento de la filial y reforzar su posición financiera. A finales de este año, el vencimiento de los bonos emitidos por esta sociedad en la bolsa de Dublín por 600 millones de euros. Grifols, acuciada por su abultada deuda, ha confirmado su intención de vender la mayoría de su 26% en la china Shanghai RAAS por más de 1.400 millones. Asimismo, Colonial estudia lanzar un nuevo plan de desinversiones tras concretar ventas por 500 millones de euros durante los últimos años.