Marta Guisasola y Javier Gibert, CEO y director de inversiones de LLYC Venturing: “Esperamos cerrar entre dos y tres operaciones más en lo que queda de año”

LLYC Venturing cuenta con un capital de cinco millones de euros para invertir en compañías. La idea es inyectar durante cuatro años ‘tickets’ de entre 100.000 y 250.000 euros en compañías de un dígito de valoración y que, además de tecnológicas, estén muy ligadas con la comunicación y el ecosistema de la consultora.

La consultora LLYC, antigua Llorente y Cuenca, lanzó hace casi un año su primer fondo de capital privado. Su CEO, Marta Guisasola y su nuevo director de inversiones, Javier Gibert, cuentan a elEconomista.es cómo han sido los primeros meses, en los que han realizado su primera inversión en la startup Erudit. Tras un periodo más técnico, los directivos anuncian que en los próximos meses cogerán ritmo y cerrarán nuevas inversiones.

LLYC Venturing va a cumplir su primer año de vida. ¿Cuál es el balance de estos meses?

Ha sido un año en el que sobre todo hemos seguido nuestro plan inicial. Primero, educar internamente desde el punto de vista financiero a la compañía. Tenemos un Comité que se reúne una vez al mes y la valoración técnica de las empresas la hacemos nosotros mismos. Los seis primeros meses estuvimos más con la parte más técnica y en la segunda mitad es cuando hemos podido avanzar más en ver oportunidades. Durante esos meses hemos analizado 197 oportunidades. También nos hemos centrado mucho en darnos a conocer y que somos un agente del ecosistema a tener en cuenta.

El fondo nació con una dotación inicial de cinco millones. ¿Cuánto se ha invertido hasta el momento?

Hicimos una primera inversión en el mes de julio, inyectamos 200.000 euros en Erudit, una compañía de inteligencia artificial enfocada en el análisis del lenguaje. Seguimos trabajando para hacer más inversiones en los próximos meses, nos ha costado hacer la primera inversión, pero es lo normal, antes de nada teníamos que establecer los criterios de inversión.

¿Veremos más inversiones en lo que queda de año?

Sí. Con estas cosas nunca se sabe, pero nos gustaría cerrar entre dos y tres operaciones más en lo que resta de año. El ticket medio que estamos mirando es entre 100.000 y 250.000 euros de inversión, depende de las inversiones que hagamos efectivas, el total rondará en torno a las 20 en un abanico de hasta cuatro años. También habrá compañías, las más exitosas de nuestra cartera, que cuando vuelvan a abrir rondas, las volveremos a acompañar. Queremos apostar por los proyectos más fructíferos.

¿Se ha visto un parón de las operaciones como consecuencia del entorno económico actual?

De la incertidumbre hemos aprendido a manejarnos en venturing y también en LLYC como compañía. La inflación y Ucrania no estaban en el tablero de juego al principio, pero nosotros seguimos con nuestra hoja de ruta, que tardemos más en cumplir los objetivos puede pasar, pero no nos preocupa, pero sí nos estamos enfrentando a dilación de tiempos.

¿Qué rentabilidad media quieren conseguir con cada inversión?

Entorno al 20% y el 30%, sobre la media del resto de las operaciones del sector.

¿Qué requisitos tiene que cumplir una compañía para entrar en el radar de LLYC Venturing?

Lo primero que tuvimos claro es que tienen que estar relacionadas con la comunicación, no vamos a invertir en compañías que no tengan absolutamente nada que ver con nuestro negocio. Sí es verdad que la vinculación también puede ser indirecta, como es el caso de Erudit. Nuestra primera intención es que sea de habla hispana, pero tampoco nos cerramos a que sea en otro mercado y no nos cerramos a ningún vertical de tecnología concreto.

¿Y económicamente?

Buscamos rondas de capital que estén entre el millón y medio y los dos millones de euros, esto permite hacernos con aproximadamente un 15%. Más allá de los márgenes que registran, tienen que ser compañías con una valoración de un dígito. En estos estadios de evolución del negocio mirar ratios de ebitda, márgenes, etc., no tiene tanto sentido. No estamos buscando un negocio de márgenes, sino de proyecciones.

¿Por qué lanzar un fondo de capital privado en plena pandemia?

La idea está ligada al crecimiento inorgánico de LLYC. Nos dábamos cuenta que muchas compañías en las que nosotros queríamos invertir se nos iban un poco de nuestros múltiplos. Entonces la forma de hacerlo era con un vehículo de inversión que nos permitiera entrar en preseries A.