El capital privado vuela de la mano del turismo este verano

El turismo fue uno de los más castigados por el Covid. Pero poco a poco va recuperando la normalidad y es en gran parte a la apuesta del capital privado por las ‘startups’ del sector

El verano de 2022 cada vez recuerda más a cualquier tiempo pasado, que como dice el refrán siempre fue mejor. La eliminación de las mascarillas en interiores y exteriores y que no sea necesario guardar cuarentena pese a dar positivo en Covid-19 está impulsando al sector turístico a datos que no veía desde hace tres años. La reactivación de la demanda turística mundial está teniendo un claro reflejo en la economía española cuyos ingresos por turismo rozaron los 15.400 millones de euros en los cuatro primeros meses del año, acercándose a niveles prepandemia. Unas cifras que también se están reflejando en el capital privado.

“La gente ha ahorrado durante la pandemia y estamos todos deseosos de viajar. En términos de volumen de pasajeros, se esperan más pasajeros que el verano de 2019 que ya fue considerado uno de los mejores años de la década pasada”, explica a elEconomista.es Felix Campano, CEO de Bob.io.

Esto está provocando que cada vez haya más movimientos alrededor de las startups del sector. Bien lo sabe Sarah Schwartz, socia de Across Legal. “Estamos recibiendo bastantes propuestas en el sector de startups este año. En la actualidad estamos asesorando múltiples deals, y tenemos entre nuestros clientes a multinacionales y empresas locales de subsectores como hospitality, agencias de viajes, plataformas de reservas y plataformas de inteligencia artificial especializadas en viajes”, detalla en declaraciones a este medio.

Para entender el apetito inversor que está despertando este sector en los últimos meses hay que tener en cuenta que durante 2020 y 2021 fue uno de los sectores más olvidados por el capital privado junto a ocio y restauración y la llegada de la guerra en Ucrania y el aumento descontrolado de la inflación han sido otros escollos que han tenido que hacer frente. Pese a eso, las perspectivas del sector son buenas. “En términos generales estamos viendo que el clima de inversión se está ralentizando desde principios de 2022. La realidad, sin embargo, es que las startups de nuestra industria todavía parecen mantener buen nivel de acceso a capital si nos fijamos en los datos de PhocusWire”, asegura Suzanna Chiu, head of Amadeus Ventures.

Y siguiendo con los refranes hay otro que dice renovarse o morir y esa es justamente la política que parece estar siguiendo el sector turístico en su vuelta a la normalidad. “Estamos viendo mucha innovación en el uso de fintech para ofrecer a los viajeros flexibilidad y para recuperar la confianza a la hora de reservar, sabiendo que puede existir incertidumbre entre el momento de la reserva y el del viaje”, añade Chiu.

Durante los meses más duros de la pandemia se produjo una ola sin precedentes de cancelaciones y cambios de vuelo, una tendencia que pilló desprevenido a más de uno. Esto ha acelerado la necesidad de automatizar los procesos. “Aquí, encontramos muchas startups que ofrecen tecnologías para ayudar a las agencias, aerolíneas y demás proveedores a ser más eficientes en el manejo de estas operaciones”, detalla la responsable de Amadeus Ventures.

En estos cambios el venture capital juega un papel fundamental. “El capital privado es un impulso al crecimiento con menos rigidez que los fondos públicos, que también pueden ser una opción en temas como los aeropuertos”, asegura la socia de Across Legal. En una línea muy similar se pronuncia el CEO de Bob.io. “El papel de los venture capital es fundamental. Una vez se detecta un problema o una nueva necesidad, se genera una nueva oportunidad de negocio que se traducirá en generación de nuevos puestos de trabajo directo (empleados) e indirecto (proveedores). Los venture capital son los primeros, o de los primeros, en arriesgar su capital para financiar este crecimiento”, añade.

El apoyo del capital privado al turismo no es algo nuevo y en parte se debe a que se trata de uno de los sectores que más aporta a la economía española. En 2021 representó el 7,4% del PIB español, pero hay que tener en cuenta que en 2019 la cifra fue de 12,4%. “Los fondos de Venture Capital en España siempre han apoyado startups relacionadas con el sector turístico y por supuesto juegan un papel fundamental para ayudar a construir negocios rentables. El primer ejemplo que me viene a la cabeza es Exoticca, una agencia de viajes online, basada en Barcelona, que ofrece paquetes turísticos a más de 50 destinos. Exoticca ha estado apoyada tanto por capital privado como por fondos de Venture Capital. Otro ejemplo, también basado en Barcelona, sería Caravelo que acaba de anunciar una nueva ronda de financiación con inversores españoles”, recuerda Chiu.

Caravelo es una firma tecnológica barcelonesa especializada en programas de suscripción de vuelos para las aerolíneas. El apoyo que está recibiendo en su ronda de financiación es tal que ya ha conseguido que Sabadell Venture Capital e Inveredy inviertan tres millones de euros. Una cifra que se suma a los 2,4 millones que ya había levantado. Los nuevos fondos se utilizarán para respaldar el crecimiento “del producto estrella” de la empresa: una solución SaaS que permite a las aerolíneas crear programas de suscripción de vuelos. Antes de convencer a estos dos fondos, Caravelo ya había despertado el interés de importantes inversores y emprendedores como Javier Pérez-Tenessa, fundador de eDreams; Alex Cruz, ex consejero delegado de British Airways y Vueling; y Adara Ventures.

En el caso de Exoticca ha cerrado varias rondas de inversión en los últimos años. En 2019 captó cinco millones de euros en una ronda liderada por Milano Investtment Partners. En 2020, en plena pandemia, fueron 11 millones. Y la última, en julio de 2021, ha superado los 25 millones de euros. Entre los inversores hay nombres como Bonsai y Kibo.