Los inversores también son ‘gamers’: aumenta el apetito por los videojuegos

Esta industria facturó en 2019 a nivel mundial cerca de 150.000 millones de euros, más que la suma total de música, cine y ‘streaming’. En España, el sector equivale 0,11% del PIB, sin embargo, es uno de los países más importantes del sector en todo el mundo.

El refrán renovarse o morir también se puede aplicar al mundo de la inversión. Es más, no es que se pueda aplicar, es que ya se está aplicando. En 2010 cerca del 10% de las operaciones de inversión se producían dentro del sector energético, mientras que en 2021 (con datos hasta julio) apenas representan el 2%. Y, ¿quién ha ganado el terreno perdido?

Los sectores relacionados con el software y las soluciones digitales han ido ganando peso entre los fondos en los últimos años, una tendencia que se ha acentuado a raíz de la pandemia. Durante los seis primeros meses del año la mayoría de los fondos invertidos se destinaron a sectores impulsados por la pandemia, todos relacionados con la digitalización. Dentro de este campo se incluyen los videojuegos. De hecho, cada vez están despertando más interés entre los inversores.

Y no es para menos, se trata de una industria que ya ingresa más que la suma total de música, cine y streaming. Solo en 2019 la facturación rozó los 150.000 millones de euros frente los cerca de 100.000 millones que ingresaron las otras tres juntas, y las estimaciones apuntan a que para 2023 se superarán los 200.000 millones.

De vuelta a la actualidad el mejor ejemplo para explicar el terreno que ha ganado este sector es Twitch. La plataforma de videojuegos de Amazon ha pasado de 3,6 millones de personas retransmitiendo sus contenidos en directo en 2019 a superar los 9 millones en la actualidad. Además, en lo que va de año se han superado los 1.000 millones de minutos vistos, lo que supone un incremento de más del 35% con respecto al consumo registrado en 2020.

Pero, ¿qué explica este boom? “El sector de los videojuegos no solo viene creciendo en los últimos años con unas tasas de crecimiento brutales, sino que va a seguir creciendo en los próximos años por la entrada de todos los grandes países emergentes que van a adoptar los videojuegos como una de las opciones de entretenimiento a una velocidad brutal”, explica a elEconomista Capital Privado Mike Cobián, general partner de The Valley Venture Capital. “Creemos que va a haber una penetración de este tipo de entretenimiento a la misma velocidad a la que penetró el teléfono móvil en un país como por ejemplo Colombia”. The Valley Venture Capital nació hace dos años y su primera inversión fue en Nware, una compañía tecnológica española que tiene como objetivo remodelar la industria del juego permitiendo a sus usuarios conectarse a la nube sin necesidad de disponer de un equipo muy costoso.

La industria del videojuego apenas tiene peso en España. Según datos de la Asociación Española de Videojuegos, el sector equivale al 0,11% del PIB español, sin embargo, España tiene mucho peso en el mundo de los videojuegos. Cobián destaca que España se encuentra en el top cinco de países del mundo con más importancia en este sector.

“En España hay una industria en torno a los videojuegos cada vez más creciente, tanto que dentro del mix mundial somos más jugadores que la media. Se trata de un país pequeño que no importa excesivamente el PIB mundial, en cambio importa más el sector de los videojuegos en España en el sector mundial, que España en sí. Además, hay varias iniciativas que están haciendo las cosas muy bien lo que coloca a España en el Top 5 de importancia del sector del videojuego mundial”, asegura Cobián.

Una de estas iniciativas ha nacido de la mano de Big C y Gamers Hub Media Events. Ambas empresas han unido fuerzas y se han asociado a través de una joint venture para crear un grupo de referencia en Europa que cubrirá todas las necesidades de las marcas, equipos y estructuras de la industria de los esports a través de un ecosistema 360 único.

“Tenemos una base sólida en Oriente Medio organizando los principales eventos de deportes online y offline trabajando con las marcas más importantes. La asociación con Big C nos abre la puerta al mercado europeo con un servicio integral para las empresas que se dedican a la industria del gaming”, explica Saad Khan, fundador y socio gerente de Gamers Hub Media Event.

“Hasta ahora teníamos un ecosistema offline muy sólido, pero el alcance de GHME nos permitirá ampliar la parte online con enormes garantías. Ahora seremos capaces de ofrecer a las empresas una plataforma genérica de torneos con una experiencia completa del mundo de los eSports y el deporte”, añade Jean Sebastian Ventura, fundador del Big C.

Compañías con menos de 10 años de vida

Por lo general se trata de compañías muy nuevas, no tienen ni 10 años de vida. El boom por los videojuegos se produjo entre 2008 y 2010 coincidiendo con la aparición de Facebook, el impulsor por excelencia de los juegos sociales. Pero esta inexperiencia no le da miedo a los inversores. “La mentalidad del inversor es la misma, ya sea en trading, en real state o en cosas más nuevas, como los videojuegos. Nuestro perfil de inversor se siente cómodo con el riesgo. En proyectos como el nuestro el riesgo existe la oportunidad es gigantesca”, afirma Daniel Olmedo, CEO de Nware.

A pesar de que se trata de una industria muy popular -solo en Europa hay 715 millones de usuarios de videojuegos-, únicamente el 3% de los ingresos mundiales repercuten en empresas europeas. Dentro del mundo de los videojuegos, los esports (deportes electrónicos, los eventos competitivos de esta industria) están ganando terreno a pasos agigantados, con más de 400 millones de espectadores en el mundo y su debut como modalidad deportiva oficial en los Juegos Asiáticos de 2022 y en los Juegos Olímpicos de 2024.

El crecimiento del sector no es nuevo, aunque se ha acelerado en los últimos meses a raíz del impacto de la pandemia. “Las necesidades de entretenimiento con los distanciamientos y las medidas de confinamiento han cambiado, había poco más que hacer que quedarse en casa delante de una pantalla. Eso lo ha acelerado muchísimo y creo que es una tendencia que va a seguir”, augura Cobián.

Nware ha vivido este crecimiento en primera persona. “La pandemia nos ha dado mucha visibilidad, hasta tal punto que hemos registrado una tasa de crecimiento del 100% con respecto a antes del Covid-19. Para nosotros el virus ha sido un aspecto positivo”, asegura Olmedo. Un impulso que no se queda aquí, están preparando una ampliación de capital con la que esperan captar entre 800.000 y un millón de euros. A esta cantidad hay que sumarle que a principios de abril Nware culminó con éxito una ampliación de capital a través de la que captó 450.000 euros. Así, la startup ha podido mantener el apoyo de sus actuales socios a la par que dé entrada a The Valley Venture Capital, el fondo de capital riesgo encargado de liderar la ronda.

La idea de la compañía de gaming es destinar estos fondos, 100% privados, para sostener este crecimiento en el tiempo, además de poder ampliar el equipo hasta superar las 10-15 personas. En la actualidad está formado por 6 empleados. Se trata de un incremento significativo, sobre todo si se tiene en cuenta que se trata de un sector muy atomizado. De hecho, las empresas de menos de cinco empleados suponen la mitad de todo su tejido empresarial, mientras que las de más de 50 trabajadores solo suponen el 5%; tal y como aseguran desde la Asociación Española de Desarrollo de Videojuegos (DEV).