El capital privado, crucial en los grandes avances tecnológicos de la historia

El 85% de los empleos que habrá en 2030, o lo que es lo mismo en nueve años, todavía no existen y la gran mayoría de estos nuevos oficios estarán relacionados con la tecnología, según datos que se recogen en el informe de Dell Technologies Realizing 2030: A Divided Vision of the Future. La creación de estos nuevos puestos de trabajo superará la destrucción de empleo.

La pandemia ha acelerado los procesos de digitalización de las empresas hasta tal punto que se encuentran que una situación que con las mejores estimaciones se iba a dar en cinco años sin la llegada del Covid-19. No solo las compañías están apostando por la tecnología, los fondos también se han subido a este carro.

La mejor forma de ilustrarlo es analizando la foto del sector ahora y la que había hace más de diez años. En el primer semestre de 2021, la mayor parte del capital invertido se ha asignado a sectores que se han visto impulsados por la pandemia. Las compañías de software y de diversas soluciones digitales centradas en el consumidor -videojuegos, tecnología financiera, tecnología de la educación, logística y entrega de comidas, así como asistencia sanitaria y biotecnología- gozaron de una gran demanda. Pero no se trata meramente de una respuesta a corto plazo, la tendencia viene de lejos.

Desde 2012 ha aumentado la inversión total de los sectores de software, de farmacia y biotecnología, y de servicios y sistemas sanitarios. Mientras que la inversión en los sectores más tradicionales, como por ejemplo el energético o los medios de comunicación, se ha reducido hasta niveles irrisorios.

Al pensar en esta industria lo primero que viene a la cabeza son los grandes players: Facebook, Alphabet, Apple, etc. Pero la realidad es que hay mundo mucho más allá y el capital privado es una alternativa cada vez más atractiva. El mejor ejemplo de ello es que muchas de las diez mayores compañías del mundo por capitalización bursátil, incluidas varias empresas líderes tecnológicas, fueron inversiones de capital riesgo en algún momento.

La inversión en capital privado ha favorecido los grandes avances tecnológicos de los últimos años. De hecho, se considera uno de los factores responsables de la burbuja tecnológica que estalló en el 2000. La llegada de la pandemia y la irrupción de la digitalización hacen pensar que el capital riesgo es una de las formas más interesantes de explotar el progreso tecnológico y el talento emprendedor. No obstante, hay que tener en cuenta que hace falta contar con un conjunto diversificado de inversiones de Capital Riesgo para cubrirse frente a los fracasos de las empresas individuales.