¿Cómo gestionar la crisis de la pandemia desde una ‘startup’?

Los expertos recomiendan a los emprendedores no hipotecarse y acabar con pequeñas empresas ‘zombies’: es mejor cerrar y empezar de cero.

Muchas startups están atravesando un trance muy complejo. Empresas que se encuentran en los sectores económicos más golpeados por la pandemia y que dudan entre seguir adelante o cerrar esta etapa mediante un concurso de acreedores. Una decisión muy dura profesional y personalmente tal y como reconoce Carlos Mateo, presidente de la Asociación Española de Startups (AES).

“Si tu proyecto no está en el mejor momento, no estás solo, hay muchos emprendedores que están pasando por lo mismo. Si has llegado a un punto en el que crees que tu proyecto no va a levantar cabeza, no se acaba el mundo. No dejemos startups zombies, no acabes con todo tu patrimonio o hipoteques tu casa”, recomienda.

Bajo esta premisa, la Asociación Española de Startups y ECIJA han organizado recientemente el webinar Cómo cerrar una startup y no morir en el intento, con el objetivo de ayudar al tejido emprendedor a la hora de afrontar un concurso de acreedores de forma ordenada para que no sea un impedimento en aras de volver a emprender. Para empezar, Mateo recomienda “no avalar ningún crédito personalmente, mantener la responsabilidad limitada de la sociedad y pensar que no es el final, habrá mas proyectos y todo lo que has aprendido te servirá para nuevos retos”. Cada intento, cada paso, aumenta las probabilidades de hacer un gran éxito. Según el presidente de AES, estadísticamente es el cuarto proyecto del emprendedor el que acaba siendo un éxito, el camino hasta él solo puede ser aprendizaje.

“Es muy importante que el emprendedor aprenda de los proyectos que no salen bien para convertirse en un emprendedor en serie, pero eso exige hacer uso de herramientas para no dejar startups a medio cerrar”, explica. Esas herramientas de cierre de compañías son complejas en España. Por ello, desde el sector reclaman al Gobierno que la futura Ley de Startups, que hace unas semanas anunció la ministra de Economía Nadia Calviño, incluya mejoras que faciliten ese cierre. La Asociación de Startups quiere que se incluyan las modificaciones oportunas para que “estos procesos concursales sean mucho menos burocráticos, menos costosos y más sencillos, para que los emprendedores se pongan en modo de creación de una nueva startup lo más rápidamente posible”.

El concurso, sin errores

José María Abella, socio de concursal de ECIJA, hizo hincapié en que la situación que vivimos actualmente, de incertidumbre por la Covid-19, está marcando el devenir de una gran cantidad de startups. En este contexto, destacó que las empresas necesitan conocer cuándo empiezan a encontrase en una situación de insolvencia para cumplir con los plazos de presentación de concurso que por ley son dos meses. Sin embargo, el Gobierno ha ampliado la moratoria ya existente para que las empresas insolventes presenten concurso de acreedores hasta el 14 de marzo. Además, por lo que respecta a los concursos que se hayan presentado desde el 31 de octubre, se suspenderá su tramitación, fruto de esta extensión de la moratoria aprobada por el Gobierno.

Sin perjuicio de lo anterior, Abella recomienda que “es crucial que las empresas presenten concurso de acreedores cuando estén obligadas a ello, y, en cualquier caso, eviten que algún acreedor les presente un concurso necesario”. Una empresa está en esa situación cuando no puede cumplir de una forma regular con las obligaciones exigibles con terceros. La ley concursal establece unos supuestos claros y específicos: imposibilidad de pagar a Hacienda, las nominas, la Seguridad Social; etcétera, durante un periodo de tiempo prolongado. A partir del tercer mes ya se entiende que la empresa está en una situación de insolvencia. También la empresa está en insolvencia cuando se producen embargos que afectan al patrimonio del deudor.

Desde ECIJA recomiendan presentar el concurso cuando la empresa tenga estas circunstancias porque no solo permite estudiar una fase preconcursal, donde el deudor podrá negociar con sus acreedores (un acuerdo de refinanciación, un acuerdo extrajudicial de pagos, una propuesta anticipada de convenio o incluso evitar el concurso de acreedores, sino que además permitirá tener el control del proceso y cumplir los plazos. Según el letrado, la clave del éxito en estos casos de concurso se encuentra en tener la documentación contable, fiscal y mercantil rigurosamente actualizada.

“Tener la documentación bien ordenada va a ser una de las claves para que luego el concurso transcurra con normalidad teniendo en cuenta que es una situación que no es agradable”, asegura Abella. No se termina la vida del emprendedor porque tenga que presentar el concurso de una o dos empresas, hay muchas alternativas, aseguran los expertos. Lo fundamental es “salir bien parado por si tenemos las ganas y la oportunidad de emprender nuevos proyectos profesionales lo hagamos y esos nuevos proyectos no se vean truncados por el pasado”, añade el letrado.

Volver a emprender

Respecto a las dudas que surgen a la hora de volver a emprender, Oliver Von Schiller, socio de ECIJA Advisory, subrayó en ese webinar que no es recomendable usar activos de la sociedad anterior y que cabe estudiar cada caso concreto, dependiendo del resultado del concurso, para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad, ya que “es una ley perfilada para situaciones límites”. En este sentido, Paula Herrero, directora adjunta de eactivos.com, explica que, el nuevo texto refundido de la Ley Concursal ha recuperado el tratamiento especialmente privilegiado en los créditos públicos, impidiendo su exoneración aun en los supuestos de liquidación total del patrimonio del deudor.