El valor de las carteras de los fondos caerá hasta el 25%

Los expertos cifran así el impacto del coronavirus en la valoración de la cartera de las gestoras de capital riesgo a nivel global, pero alertan de que es pronto para valorar el impacto de la crisis

En momentos de elevada incertidumbre como el actual, estimar unas valoraciones probables para las carteras de los fondos de capital privado resulta un ejercicio casi titánico. Sin embargo, el consenso del mercado coincide en que todas van a verse afectadas. Las medidas para contener la pandemia han impactado prácticamente en todos los sectores productivos y por ende en los financieros. Sin embargo, la afectación ha sido totalmente asimétrica y depende, más que de países, de los sectores en cuestión a los que se dediquen las participadas. A groso modo, las valoraciones no dejan de ser los flujos de caja futuros y una tasa que refleja el riesgo, parece claro pensar que los flujos de caja con el coronavirus van a ser menores y el riesgo mayor, lo que va a provocar una bajada de las mismas. “Yo creo que todo el mundo espera que vaya a haber una caída en lo que es el valor reportado a los inversores por parte de los GPs, eso no es nada inesperado. La duda es la magnitud de la caída”, asegura Javier Zoido, managing director y líder de Valoraciones de Duff & Phelps en Iberia, en conversación con elEconomista Capital Privado. “Cuando estamos analizando estos temas, normalmente vemos rangos. Valoramos entre un 5 y un 25% de caída en lo que son posiciones de private equity, lo que es menos de lo que habían caído los mercados cotizados a fecha de finales de marzo de este año”, añade.

A pesar de estas cifras, se muestra optimista ya que “si miras de diciembre a marzo lo que ha pasado con los mercados de equity cotizados y lo que ha pasado con los mercados privados, es que han bajado menos. Esto es una tendencia que vemos que es bastante general. El capital privado es un poco menos volátil que el público”.

Por su parte, Borja Oria, managing partner de Banca de Inversión de Arcano, considera que aún es pronto para determinar o cuantificar una posible caída en las valoraciones. “Una vez superada esta fase, que por cierto en general ha sido muy positiva, están en una fase de entender cual puede ser la evolución del sector en el que está cada participada, la evolución del consumidor y del negocio para rehacer el plan de negocio 2020-2021. En general, salvo alguna excepción de compañías que podían estar mal previamente, es correr un año la inversión, pero no más allá de eso”, añade Oria.

Miguel Zurita, presidente de la patronal del sector (Ascri), cree que el sector del capital privado tiene que ser parte de la solución en esta crisis. “Nuestras compañías participadas lo hicieron mejor en la anterior crisis y ahora, más que nunca, estamos trabajando para mantenerlas vivas y que generen trabajo y riqueza”, ha explicado en un reciente webcast donde los expertos de Duff&Phelps y Ascri han discutido sobre la mejor manera de reflejar el impacto del coronavirus en la medición del valor razonable de cara al cierre de trimestral o semestral. Incide, además, en que son también parte de la solución para los inversores que “en su mayoría son pensionistas, y son los primeros beneficiarios de nuestra actividad”. Pese a muchas profecías apocalípticas “en la anterior crisis lo hicimos muy bien, nuestra rentabilidad lo hizo bien entonces y esperamos que en esta ocasión ocurra lo mismo. Las valoraciones de nuestros activos cayeron menos y lo hicieron de una manera más gradual”, asegura.

Una situación mejor

Un extremo en el que coincide con Javier Zoido que está convencido de que “habrá oportunidades. No sabemos el impacto de la crisis pero, al sector del private equity en general, le ha pillado mejor que en la crisis anterior”.

En la misma línea se posicionan desde Arcano donde están convencidos de que el impacto de la crisis en el sector va a ser menor que en la anterior. “En el 2008 había una crisis muy seria de liquidez y bancaria. Ahora los bancos tienen una buena situación de liquidez y de balance y están siendo muy colaborativos con las empresas. Está habiendo financiación que es lo fundamental. Creemos que va a ser un impacto transitorio”, asegura Borja Oria.

En lo que todos coinciden es en que el impacto va a ser asimétrico y sobre todo muy sectorial con mayor impacto negativo para las empresas dedicadas a viajes, ocio, restauración e incluso retail que han visto paralizada su actividad durante semanas. Sin embargo, empresas dedicadas a nuevas tecnologías, teletrabajo o elearning están viéndose beneficiadas.

Pesimismo en el ámbito internacional

Frente al optimismo en España, en clave internacional son varios los gigantes de la inversión que han avisado de turbulencias en los próximos meses, lo que ha alarmado a su vez a las gestoras españolas. Cuando las barbas de tu vecino veas cortar... En este sentido, el primero en alertar de esta situación fue KKR, que ha avisado a sus accionistas de una importante caída en sus ingresos este año por el impacto de la crisis del coronavirus en sus negocios y la consecuente caída de la valoración de su cartera de participadas.

Así se lo ha hecho saber KKR al regulador estadounidense SEC a través de un comunicado. El gigante de la inversión estadounidense se ha mostrado muy pesimista en lo que se refiere a sus participadas, ya que la mayoría de ellas están expuestas a las industrias más afectadas por la pandemia. Tienen gran presencia en restauración, entretenimiento pasando por residencias de ancianos. Por ello, desde KKR avisan de que si la situación no cambia y estas empresas no pueden volver a trabajar con una cierta normalidad los negocios de las mismas podrían sufrir considerablemente e, incluso, volverse insolventes provocando una disminución en los retornos de sus fondos.

Por su parte, Blackstone -conocido en España por su importante apuesta por el sector inmobiliario a través de Testa- ha dado un paso más y ha informado del impacto del coronavirus en sus cuentas. Sus fondos de capital privado se redujeron en un 21,6% en el primer trimestre, en comparación con la caída de 20% del S&P 500 en el mismo período. Un fuerte impacto que incluye no solo la pandemia del coronavirus, sino que también está muy influido por el desplome de los precios del petróleo que lastró las tenencias de Blackstone en el sector energético. En cualquier caso, excluyendo el impacto de esta materia prima que ha sufrido fuertes turbulencias por la parálisis mundial, la cartera de capital privado del gigante mundial de la inversión disminuyó el 11,1%.