¿Qué alternativas tienen las ‘startups’ para sobrevivir?

Los expertos señalan la importancia de poner en marcha initiciativas específicas para el sector cuanto antes que inyecten capital a este tipo de empresas

La crisis del coronavirus ha pillado por sorpresa a muchas startups que estaban a punto de lanzar su proyecto alterando posiblemente sus márgenes y sus tiempos. En esta coyuntura, el Gobierno ha lanzado varias medidas dirigidas a pequeñas y medianas empresas. En primer lugar, el Ejecutivo ya ha activado el segundo tramo de la Línea de Avales del ICO con 20.000 millones de euros, destinados íntegramente a pymes y autónomos. Sin embargo, los expertos del sector consultados por elEconomista Capital Privado coinciden en señalar que no son las ayudas específicas que necesita el sector.

“Las startups se caracterizan por ser modelos de negocio en los que el balance suele ser negativo. No son las mejores candidatas para pasar el proceso de selección de un banco” que le otorgue la ayuda ICO, explica Javier Bustillo, socio de Corporate y M&A de Ecija.

“Es importante desarrollar más iniciativas específicas para esta tipología de empresa, que aparte de ser de reciente creación, cuentan con una base tecnológica relevante”, asegura Omar Garzesi, director de Ayudas e Incentivos de Deloitte Legal a esta publicación. Estas medidas deben tener como primer objetivo, a ojos de Garzesi, aportar estabilidad. Además, han de ser lo suficientemente accesibles como para que lleguen “de manera rápida y eficiente”. Y, lo más importante, “deben estar debidamente dimensionadas a la nueva realidad económica de cada colectivo”.

Con todo, desde Deloitte consideran que se deberían poner en marcha cuanto antes iniciativas que inyecten capital a las empresas: ayudas directas, a fondo perdido o mediante préstamos bonificados.

Enisa, CDTI y los fondos europeos

Dado que las ayudas aprobadas estos días por el Gobierno no son las más adecuadas para el sector queda acudir a las vías tradicionales. En primer lugar, está Enisa (Empresa Nacional de Innovación) y su préstamo participativo que como máximo otorga 75.000 euros -los socios tienen que aportar, vía capital o a través de fondos propios, al menos un 50% del préstamo-. “Este modelo ha funcionado bastante bien en los últimos años, más o menos estaban dando 80 millones en total”, explica Oliver. “La filosofía de Enisa es ir dándolo por tramos normalmente”.

El segundo organismo referencia del sector, el CDTI (Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial), ha ido lanzando diferentes programas para pymes. La estrella es NEOTEC que tiene como objetivo el apoyo a la creación y consolidación de empresas de base tecnológica. “Es probablemente lo mejor que hay a nivel nacional de proyecto individual”, asegura. Son 250.000 euros a fondo perdido, 70% del proyecto. El gran problema que tiene tradicionalmente es que es muy lento, afirma Oliver.

“Estábamos firmando hace tres semanas el NEOTEC del año pasado y la convocatoria fue en junio. Le decimos a nuestros clientes que seis meses de CDTI no te los quita nadie”, asegura el experto de Ecija, por lo que en esta situación crítica en la que estamos no parece la vía más rápida.

Parte de esa lentitud viene tras el análisis tecnológico, concretamente en el análisis financiero para startups porque en algunas ocasiones han pedido el 100% de avales. Una exigencia que a ojos de expertos de Ecija no tiene sentido en el caso de una startup y que “ahora en teoría lo van a mejorar reduciéndolo al 25%”. A su juicio, otra de las debilidades tanto de CDTI como de ENISA es la excesiva burocracia y tardanza en obtener el capital.

A nivel Unión Europea quizá lo más interesante sea el EIC Accelarator, “un programa imbatible a nivel europeo” según Oliver. En esta situación han puesto en marcha una vía salud para luchar contra el coronavirus. Va dirigido a proyectos de pymes innovadoras con hasta 2,5 millones de euros a fondo perdido financiando el 70%. La convocatoria forma parte del proyecto piloto del Consejo Europeo de Innovación (EIC) que apoya a los innovadores de primer orden y que en este caso va dirigido a startups innovadoras con soluciones en la lucha contra el Covid-19.

Por otro lado, la Fundación Europea de Financiación para la Innovación ha puesto en marcha una convocatoria para entidades con ingenios disruptivos en la prevención, lucha y recuperación del coronavirus. La fundación Finnova través de Startup Europe Awards Accelerator se encargará de las vertientes de salud. Los proyectos ganadores optarán a las convocatorias de la Unión Europea dotadas hasta con 2,5 millones de euros de subvención.

Capital riesgo corporativo

Otra de las vías de financiación para startups que empezaban a despuntar en España es el capital riesgo corporativo. Bustillo expresa su preocupación en esta coyuntura acerca de esta alternativa que se empezaba a consolidar en los últimos años y que “es una vía que lógicamente se va a contraer en esta situación”. Previsiblemente en estas circunstancias, las grandes corporaciones van a recolocar su caja en otras cuestiones.

“Sería una ayuda muy deseable si grandes o medianas empresas que ya tenían presupuestado un dinero para ayudar a startups, para invertir en ellas o para financiar esa innovación no lo cortaran” porque si ahora se cortan todo tipo de ayudas “se nos muere un sector, una industria startupera en general que llevamos muchos años intentando hacer crecer”.