
Más de 13 millones de personas están en riesgo de pobreza o exclusión en España
El VI informe del Observatorio Empresarial para el Crecimiento Inclusivo (OEPCI) concluye que un 66% de la población mundial carece de acceso a productos y servicios de primera necesidad.
La concatenación de las diferentes crisis ha provocado que la desigualdad se incruste en el segmento de menos ingresos de la sociedad y que lleve a una situación de exclusión, que va más allá de lo económico. La tendencia a la vulnerabilidad es, por tanto, ascendente. En 2021, los datos relativos a la tasa AROPE en España señalaban que el 27,8% de la población estaba en riesgo de pobreza o exclusión social, es decir, más de 13 millones de ciudadanos.
Según los datos de la Fundación FOESSA, vinculada a Cáritas, la tendencia de las principales dimensiones de la exclusión en nuestro país es ascendente -sobre todo debido a las tres grandes crisis: la económica de 2008, la sociosanitaria provocada por el Covid-19 y la de 2022, marcada, tras la invasión de Ucrania, por el desabastecimiento de materias primas y suministros, y la repercusión en la escalada de los precios. Además, se ha hecho evidente una desigualdad estructural persistente, incluso en los periodos de recuperación económica, que se vuelve dramática cuando la situación empeora.
En este contexto, Marc Simón, subdirector general de la Fundación “la Caixa”, ha señalado que “si queremos una sociedad mejor y más igualitaria, es necesario apostar por una colaboración público privada en la definición de una estrategia organizada y coordinada entre todos los agentes implicados para que las iniciativas de mejora tengan un impacto efectivo y positivo en la sociedad”.
Por ello, cada vez son más las empresas que, en su afán por contribuir a la mejora de la sociedad, centran sus esfuerzos en desarrollar negocios inclusivos -entendidos como una forma de satisfacer necesidades globales de manera más sostenible y crear prosperidad-. Estos se centran en la base de la pirámide, es decir, en los 4.000 millones de personas que viven en países en desarrollo y tienen una renta per cápita anual por debajo de los 1.500 dólares. En 2021, los datos relativos a la tasa Arope en España señalaban que el 27,8% de la población estaba en riesgo de pobreza o exclusión social, es decir, más de 13 millones de ciudadanos. Las principales causas de la pobreza actual de nuestro país son el empleo precario y desempleo crónico, los altos precios de la vivienda, los precios de los productos básicos y la pobreza energética. Sin embargo, a estas, se suman otras relevantes vinculadas a factores poblacionales, sanitarios, financieros, tecnológicos, de edad o físicos.
Según Pilar Hermida, Chief Communications & Sustainability Officer del Grupo DIA, “estamos trabajando en impulsar un cambio de hábitos en la alimentación a través de acciones de divulgación y generación de conocimiento dentro de nuestro programa Comer mejor cada día”.