El sector legal debe ponerse al día ante los cambios de la nueva economía digital
La vuelta del verano se ha convertido en un tiempo legislativo de intensidad, aunque como es tradicional desde hace años, la técnica legislativa deja bastante que desear y, como en el caso del Código Penal o de la Ley Concursal, los parches necesarios se han convertido en una habitualidad. Muchas de estas normativas, por otra parte, llegadas de Bruselas, versan sobre actividades que siembran sobre un terreno ignoto para la mayoría de los juristas y de los ciudadanos, como son las medidas regulatorias de las criptomonedas o las SPAC o compañías de cheque en blanco (blank check companies), que son entidades que no tienen un plan o propósito comercial específico y cuyo modelo de negocio suele estar centrado en participar en una fusión o adquisición con otras empresas.
En la actual coyuntura, los perfiles con más proyección de futuro son los de abogados especializados en nuevas tecnologías, blockchain, Internet de las cosas y smart contracts, que conllevan mejores ingresos ante la escasa oferta que hay en el mercado legal en la actualidad. Sin embargo, los más demandados son los especialistas en fusiones y adquisiciones (M&A, por sus siglas en inglés). El movimiento de operaciones de compra y venta de empresas en un país suele ser un termómetro para determinar el dinamismo y expansión de la economía y lo atractivo o no que resulta ese mercado para los inversores, tantos externos o locales. En España, en los dos últimos años se han producido distintos movimientos en el mercado de M&A y de operaciones transaccionales.
Este tipo de letrados asesora a sus clientes en las operaciones que van a realizar, en los contratos que pretenden firmar y en las decisiones que van a tomar de cara a su propia organización interna y a su negocio. Se trata de un asesoramiento integral del negocio, lo que hace que este tipo de letrados tengan que estar en constante reciclaje, fundamentalmente en las tendencias internacionales más exitosas y en la necesidad de saber adaptarla a la legislación española y a la filosofía empresarial que se desarrolla en el país. Cualquier despacho de abogados que quiere ser competitivo debe contar con un área de mercantil fuerte. Como ejemplo, las compras de empresas efectuadas en el sector farmacéutico han alcanzado un valor de 25.000 millones de dólares.
La actividad de fusiones y adquisiciones en Europa va en aumento en el sector de las fintech a medida que el capital se va acabando y las valoraciones a la baja atraen tanto a bancos tradicionales como a inversionistas privados. Y es en este terreno en el que buscan jugar su papel las citadas SPAC y otra serie de vehículos de inversión, que para que funcionen necesitan una adecuación y una protección no solo a los pequeños inversores, sino también a los sponsor y a los bancos de inversión, tal y como está haciendo en la actualidad Estados Unidos.