Los Colegios de abogados consideran prioritaria la especialización

La Abogacía se prepara para afrontar un proceso autorregulatorio del establecimiento de un sistema que reconozca y acredite especialidades en el ejercicio profesional. El Consejo, de manera conjunta con las autoridades en materia de competencia, al considerar que existe justificación suficiente para ello.

La Abogacía se prepara para afrontar un proceso autorregulatorio del establecimiento de un sistema que reconozca y acredite especialidades en el ejercicio profesional, convirtiéndoles este asunto en la prioridad en los servicios colegiales. Tanto la formación continua como la especialización en la abogacía son consideradas por el nuevo Estatuto de la Abogacía como una exigencia activa durante toda la trayectoria profesional.

María Dolores Lozano Ortiz, presidenta de la Asociación Española de Abogados de Familia (Aeafa), considera que “la idea del abogado generalista ha muerto. La gran cantidad de información sobre las distintas áreas del derecho hace imprescindible la especialización”. Lozano compara la especialización en Derecho con la que existe en la Medicina, apuntando que “deberíamos abordar la especialización de las ramas del Derecho como en la Medicina, para beneficio de la profesión y de la ciudadanía”.

El debate está servido, entre quienes son partidarios de que se exija una especialización para las especializaciones en Derecho de las materias más complicadas, de una parte y de otra, entre la persistencia del abogado multifuncional frente al reconocimiento oficial de las especializaciones, tal y como ha quedado patente en las VIII Jornadas de Juntas de Gobierno de la Abogacía, celebradas en Bilbao. Con esta autorregulación, los Colegios de abogados pretenden que se avance en las garantías de libre mercado y competencia al ofertar servicios de mayor calidad para la protección de los derechos de la ciudadanía, evitando el fraude.

En sus conclusiones de las Jornadas, la Abogacía acepta el compromiso de trabajar a partir de ahora al efecto, de manera conjunta con las autoridades en materia de competencia, al considerar que existe justificación suficiente para ello y para evitar transgresiones legales.

Joaquín López Vallés, director del Departamento de Promoción de la Competencia de la CNMC, señaló en su intervención que la labor principal de este organismo “es tratar de dar acompañamiento en las iniciativas regulatorias”.

Así por ejemplo, señaló que en el ámbito de los servicios profesionales, se han dado tanto en España como en Europa regulaciones que imponían restricciones para el acceso, muchas justificadas y otras no tanto. Y el trabajo de Competencia en los últimos años ha sido tratar “de acompañar al sector público para eliminar esas restricciones no están justificadas”.

Considera la Abogacía, que el fin esencial de los Colegios de Abogados, conforme a su Estatuto, es la formación profesional permanente, que hoy ha de ser una formación especializada, acreditada, correlativa a la propia especialización que se pide a los tribunales.

A este respecto, no se puede olvidar que la Ley de Eficiencia Organizativa implanta en los tribunales de instancia secciones especializadas. Este tema se ha abordado en una sesión de las Jornadas, bajo el epígrafe de Los Colegios, comprometidos con la calidad de los servicios: la especialización en la formación de la Abogacía, moderada por Carlos Fuentenebro, decano del Colegio de la Abogacía de Vizcaya y presidente de la Comisión de Formación del Consejo de la Abogacía.

Para Lourdes Menéndez González-Palenzuela, asesora en el Ministerio de Justicia, “la especialización del abogado no es solo un derecho del profesional, sino también un deber del profesional correlativo al ciudadano”.

También, explicó que el ejercicio generalista entre los abogados “está cediendo en favor de la especialidad”.

José del Río, socio directos del despacho Del Río Miera Abogados, se mostró partidario de que los Colegios tengan un listado de colegiados en función de su especialidad, que serviría para “dar mayor información a los consumidores y evitar la información engañosa”.

Para muchos de los abogados presentes en las Jornadas, las nuevas tecnologías y la digitalización dan grandes posibilidades de colaboración entre los especialistas de las diferentes materias del Derecho, sin olvidar algo tan obvio como importante que es que generalmente, cualquier rama del Derecho se encuentra afectada de manera transversal por cualquiera de las otras ramas del Derecho. Además, la Abogacía también deberá trabajar codo con codo en la autorregulación de la publicidad, que tendrá carácter voluntario y que tratará de dar un respaldo oficial a quienes se acojan a las buenas prácticas establecidas por los Colegios.