La prisas por cobrar a las tecnológicas crea ya 14 ‘tasas Google’
La tasa impositiva más alta la tienen Hungría y Turquía con un 7,5%, mientras la media se sitúa en torno al 3%, la misma tasa que tiene en vigor España
La prisa de los países europeos por cobrar a las tecnológicas ha generado una maraña tributaria con 14 Impuestos sobre los Servicios Digitales -la llamada ‘tasa Google’- con diferentes características. Estos 14 países europeos, entre ellos España, han provocado un complejo sistema para gravar la actividad de este sector por no esperar al consenso internacional, liderado por las propuestas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Las diferencias suponen unos tipos que van, en función del Estado, desde el 1,5% que ha establecido Polonia hasta el 7,5% que ha firmado Hungría. Por otra parte, la cifra de negocio que exigen estos países para cobrar la tasa Google varía desde los tres millones que marca Letonia hasta los 25 que exige Austria para aplicar el impuesto.
“A pesar de las negociaciones multilaterales en curso, varios países han decidido seguir adelante con medidas unilaterales para gravar la economía digital”, explica Elke Asen, analista de políticas en el Center for Global Tax Policy de la Tax Foundation. “Aproximadamente la mitad de todos los países europeos de la OCDE han anunciado, propuesto o implementado un impuesto a los servicios digitales, que es un impuesto sobre determinadas fuentes de ingresos brutos de las grandes empresas digitales. Debido a que estos impuestos afectan principalmente a las empresas estadounidenses y, por lo tanto, se perciben como discriminatorios, Estados Unidos ha respondido con amenazas de represalia”, añade.
“Aunque los países consideran estos impuestos como medidas provisionales hasta que se llegue a un acuerdo a nivel de la OCDE, no está claro si todos serán derogados en ese momento”, señala Asen. “Además, la Unión Europea (UE) tiene la intención de implementar su propio impuesto digital a partir de 2023 en adelante, con un proyecto de ley que describe los detalles que se esperan para mediados de año. Al mismo tiempo, las Naciones Unidas están considerando agregar disposiciones especiales para los ingresos de los servicios digitales automatizados a la Convención Modelo de Impuestos de la ONU, que se aplicaría a las partes del tratado que acuerden su inclusión”, añade. El Parlamento Europeo cree que la Unión Europea (UE) pierde un 13,7% en el tipo impositivo de las compañías tecnológicas. La Eurocámara asegura que “las empresas digitales son gravadas con un tipo impositivo efectivo de solo el 9,5%, frente al 23,2% tradicional”.