Hacienda sube los expedientes contra los administradores

La Agencia Tributaria (Aeat) persigue a los administradores de las empresas para cobrar y ha aumentado los procedimientos de “derivación de responsabilidad” contra ellos y otras figuras un 119% en 2020, según la Aedaf.

La Agencia Tributaria (Aeat) persigue a los administradores de las empresas para cobrar y ha aumentado los procedimientos de “derivación de responsabilidad” contra ellos y otras figuras un 119% en 2020. La Agencia Tributaria utiliza esta figura legal para exigir el pago de deudas o sanciones no atendidas por las empresas a sus administradores.

Los fiscalistas destacan el contraste de las medidas facilitadas por el Ejecutivo en materia de insolvencia empresarial frente a las adoptadas en materia tributaria. Moncloa permitió retrasar las solicitudes de concurso de acreedores durante este periodo de pandemia y avaló la subsistencia de sociedades con déficit de fondos propios.

A su juicio, esto provocará derivaciones de responsabilidad “cuasi -automáticas” a los administradores de dichas sociedades, siempre y cuando no acrediten que han hecho lo necesario para su pago o que no hubieren adoptado acuerdos o tomado medidas causantes del impago.

En el contexto actual de la pandemia del coronavirus Covid-19 que sigue en España y para evitar situaciones de litigiosidad e inseguridad, la Asociación Española de Asesores Fiscales (Aedaf) pide a los legisladores y al ministerio de Hacienda que se establezcan directrices claras que permitan en este sentido a los administradores acreditar que se dan las circunstancias excluyentes de su responsabilidad que sean consideradas suficientes por Hacienda.

Destacan también los casos en los que, declarado el concurso de acreedores calificado por el juez de fortuito -lo que acredita la diligencia de los administradores-, la Hacienda Pública inicia severos procedimientos de derivación de responsabilidad frente a éstos, exigiéndoles una diligencia más exhaustiva, lo que, según los asesores fiscales miembros de la Asociación Española de Asesores Fiscales, genera dos diferentes “raseros” de medición del comportamiento de los administradores mercantiles de difícil comprensión.