Los directivos piden escuchar a las empresas ante las ayudas europeas

Los empresarios no conocen todavía el alcance del fondo de reconstrucción ante la crisis del coronavirus y, a juicio de los expertos, es “crucial” aumentar la cooperación entre el Gobierno y los empresarios para conseguir un reparto eficiente de los 140.000 millones de los fondos europeos

Los expertos y directivos españoles destacan que las empresas no conocen todavía el alcance de las ayudas europeas del fondo de reconstrucción ante la crisis del coronavirus. A su juicio, es “crucial” aumentar la cooperación entre el Gobierno y los empresarios para conseguir un reparto eficiente de los fondos europeos.

Los directivos consideran que será fundamental la colaboración entre la Administración y las empresas para que nuestro país sea capaz de sacar el máximo provecho de las ayudas para la reconstrucción aprobadas por la Unión Europea. Esta es una de las principales conclusiones de la encuesta sobre El Fondo Europeo de Recuperación, realizada por PwC entre un colectivo de empresarios, directivos y expertos de universidades y centros de investigación económica. Concretamente, el 44,2% de los encuestados cree que sería necesaria la creación de un grupo de trabajo, coordinado por la Presidencia de Gobierno, que se ocupe de preparar los proyectos en estrecha colaboración con las empresas españolas y con las comunidades autónomas.

No obstante, los expertos, directivos y empresarios que han participado en el informe no las tienen todas consigo y temen que la falta de información no permita a nuestras empresas sacar el máximo provecho de los fondos. Sólo el 9,6% de los encuestados asegura que el sector privado es plenamente consciente de su existencia y de cuáles son los procedimientos para poder acceder a los mismos, y un 37,5% cree que hay un enorme desconocimiento por parte de las empresas sobre cómo plantear propuestas viables y qué tipo de proyectos serán financiados por el programa de recuperación.

En este sentido, la reciente creación de una Oficina Técnica de Apoyo para Proyectos Europeos por parte de la CEOE y de PwC para dar apoyo técnico a las compañías y aprovechar de la manera más eficaz los recursos procedentes del Fondo Europeo de Recuperación podría mitigar este riesgo. Los encuestados señalan tres obstáculos que podrían impedir absorber los fondos europeos y lograr la transformación de la economía. El primero de ellos, según el 77,1% de los entrevistados, es la fragmentación y la polarización política, que reduce el escrutinio y el peso de los argumentos técnicos. El segundo, para el 54,3% de los expertos, se centra en el hecho de contar con una Administración Pública poco ágil y excesivamente burocratizada. Y el tercero -según el 41,9%- tiene que ver con la actual estructura territorial del Estado y con los problemas de coordinación entre el Gobierno central, las distintas comunidades autónomas y los ayuntamientos.

Los fondos europeos tienen como grandes objetivos la transformación digital, verde e inclusiva, y la intención es que sean estos proyectos los que aglutinen un mayor apoyo económico.

Sin embargo, cuando se les pregunta a los directivos y empresarios sobre si estas prioridades responden a las necesidades de la economía española, no hay una opinión claramente definida, aunque la mayoría (40%) considera que estos objetivos son lo suficientemente genéricos como para poder incluir bajo cada uno de ellos las grandes inversiones que necesita el país. Otro 38,7% cree, sin embargo, que estos ejes no coinciden con las prioridades de España. Sobre cuáles consideran los encuestados que deberían ser las grandes reformas estructurales que necesita España, la opinión de los expertos, empresarios y directivos es más evidente. Si se pudieran pactar cinco grandes reformas ambiciosas para nuestra economía, los encuestados apuestan, en este orden de prioridad, por la educación (68,6%), el mercado laboral (50,4%), la Administración Pública (48,6%), las pensiones (47,6%) y por una reorganización de la fiscalidad (40%).

Los expertos y directivos también se pronuncian sobre el grado de condicionalidad que, finalmente, irá asociado a la utilización del Fondo de Reconstrucción. El 61,3% de los encuestados se muestra contrario a que estas ayudas no tuvieran condicionalidad y se incorporaran a los presupuestos nacionales sin mayor control posterior, y el 41,5% asegura que deben estar sujetos a una estricta condicionalidad, similar a la de los programas de rescate que se produjeron, entre 2010 y 2013, para evitar el riesgo de que no se utilicen correctamente. En general, existe una falta de certidumbre entre los entrevistados sobre si España conseguirá aprovechar los fondos europeos para transformar la economía y ponerla en una mejor posición para competir, ganar convergencia económica con los países del norte de Europa y tener más influencia en la Unión Europea. Cuando se interroga a los participantes de la encuesta sobre cómo creen que verán el impacto de estos fondos en 2030, la mayoría prefiere no pronunciarse sobre este asunto.