Los 15 grandes peligros que esperan a la empresa tras la pandemia del Covid

Los Institutos de Auditores Internos Europeos han elaborado un informe en el que analizan los grandes retos que va a traer la crisis económica posterior a la santitaria
a las empresas de todos los tamaños

El ejercicio 2020 pasará a la historia como el año de la pandemia del Covd-19, porque a la crisis sanitaria le va a seguir una recesión económica cuya profundidad y duración aún se desconoce, según analiza el informe Risk in Focus 2021, elaborado por varios Institutos de Auditores Internos de Europa, incluido el de España.

Todo lo acontecido tiene un gran impacto en las empresas y en sus perfiles de riesgo. Se impulsó el teletrabajo de forma masiva, con grandes riesgos para la seguridad; hubo que paralizar o reducir drásticamente la producción y las cadenas de suministro se vieron abruptamente interrumpidas.

Además de la encuesta a los directores de auditoría interna (DAI) -este año participaron 579, un 10% más-, se llevaron a cabo 42 entrevistas personalizadas a DAI y miembros de Comisiones de Auditoría. Además, fueron entrevistados 51 expertos en diferentes materias, utilizando la metodología Delphi para completar el análisis cualitativo . Sus comentarios y recomendaciones están incorporados al informe . Este año han colaborado 10 Institutos representando a once países : Austria, Bélgica, Alemania, España, Francia, Italia, Luxemburgo, Países Bajos, Suecia, Reino Unido e Irlanda .

Risk in Focus 2021 revela algunos cambios reseñables en los riesgos a los que se enfrentan las compañías en 2021 y en un horizonte a tres años, hasta 2024. Aunque la ciberseguridad y la protección de datos repite este año en el top1 de los riesgos, a medio plazo, la digitalización y el cambio climático escalan posiciones más relevantes.

Señala el informe, que la crisis ha dado un giro al perfil de riesgos de las compañías, priorizando algunos que antes apenas estaban considerados y que ahora requieren la máxima atención . La pandemia ha reubicado en el mapa los riesgos ya existentes, Así, las respuestas de los DAI ante la pregunta de cuáles son los cinco principales riesgos para las empresas. Algunos riesgos han aumentado su importancia, como los de salud y laborales y los riesgos financieros -de capital y liquidez- por la necesidad de preservar la supervivencia.

También los riesgos operacionales, ligados a la cadena de suministro. Y vuelve a escalar posiciones el riesgo climático y la sostenibilidad.

Actualmente, la auditoría Interna dedica más tiempo y esfuerzo a los siguientes riesgos: ciberseguridad y protección de datos (72% de las respuestas); cambio regulatorio y compliance (72%); gobierno corporativo y reporting (64%); riesgo de liquidez, de capital y financiero (54%) y riesgo de fraude, corrupción y otros delitos financieros (50%).

Así, donde no hay cambios es en el primer puesto, nuevamente ocupado por un riesgo prominente: ciberseguridad y protección de datos. Éste, que cosechó el 79% de las respuestas de los DAI, cobra importancia por la aceleración digital de las empresas durante la pandemia. Con el teletrabajo, el riesgo de ciberseguridad ha adquirido nuevas dimensiones, un nuevo y mayor perímetro que no va a desaparecer en el futuro inmediato. Ciberseguridad también encabeza el de las previsiones a tres años: 75% de las respuestas.

Según Sonsoles Rubio, presidenta del Instituto de Auditores Internos, “el estudio nos revela además que el phishing o la suplantación de identidad y el contagio con malware serán las principales ciberamenazas que las compañías tendrán que hacer frente el próximo año. Hay que tener en cuenta que más de 4.500 millones de personas fueron confinadas en el mundo, lo que llevó a que los empleados tuvieran que acceder de la noche a la mañana a infraestructuras de IT y datos críticos desde sus dispositivos y wifis personales. Esta digitalización acelerada ha aumentado el perímetro del riesgo de ciberseguridad de las organizaciones, ampliando así las probabilidades de sufrir ataques y brechas de seguridad y obligando a las empresas a revisar y reforzar todos los sistemas de control para mitigar riesgos”.

Aunque en la pandemia los reguladores y supervisores adoptaron diversas iniciativas y relajaron sus exigencias para aliviar la carga regulatoria, la normalidad regresará, y por eso, para un 59% de los encuestados, los cambios regulatorios y compliance siguen estando entre los principales riesgos empresariales, colocándose en el segundo lugar del ranking.

El informe también pone de manifiesto la relevancia estratégica de la digitalización. La pandemia ha priorizado la necesidad de las empresas de avanzar en sus objetivos digitales. De esta forma, el 50% de los encuestados considera la digitalización y tecnologías emergentes el tercer riesgo más importante para las organizaciones y escala al segundo lugar (67%) cuando se les pregunta por un horizonte a tres años vista.

El 50% de los directores de auditoría interna apunta la digitalización como uno de los cinco principales riesgos para las organizaciones, lo que la sitúa en el tercer puesto del ranking. Y escala al segundo lugar (67%) cuando se les pregunta por un horizonte a tres años. La digitalización, junto con la innovación, es clave para sobrevivir. Se calcula que el 75% de las empresas del S&P 500 no existirán en 2027: la edad media de esas empresas ha bajado de 61 a 22 años en apenas 60 años.

Este estudio también recoge la preocupación actual con respecto a la capacidad de las empresas para seguir siendo solventes en un mundo en recesión. En medio de una demanda deprimida, los riesgos financieros y de liquidez ”han tomado mayor protagonismo. Con un 42%, se sitúan en la cuarta posición del ranking, que este año al puesto cuarto del ranking (30% de las respuestas el año pasado). Probablemente incidió el que la encuesta se llevó a cabo en marzo, cuando el brote estallaba en Europa y ponía en riesgo la liquidez inmediata de las empresas.

El sector financiero se ha mantenido bastante fuerte gracias a la solidez de sus balances y niveles de capital, reforzados tras la crisis de 2008. Sin embargo, los riesgos pueden elevarse si crecen las quiebras o impagos de préstamos en los sectores más afectados como restauración, ocio y turismo.

Señala el informe que todo dependerá de la duración de la crisis. La prioridad de las empresas en 2020 ha sido evaluar el riesgo de liquidez, analizando todos los parámetros, empezando por la caja y las cuentas a pagar, por cobrar, inventario, impuestos... Se intentó frenar las salidas de caja y asegurar los ingresos, sin ahogar a los proveedores. El frenazo de la actividad originado por la pandemia, algo para lo que prácticamente nadie estaba preparado, ha hecho que este año aparezca un riesgo nuevo entre los más relevantes: respuesta a crisis y catástrofes, citado por el 34% de los encuestados. Ello refleja la creciente atención que se presta a la gestión de crisis y a la resiliencia empresarial. Factores como la gestión del talento, el bienestar del personal y los desafíos en la diversidad han tomado mayor peso. El 35% de los encuestados cita la gestión del talento como uno de los cinco principales riesgos, ocho puntos por encima con respecto a hace un año (27%).

Las empresas tendrán que hacer frente a desafíos como: ser capaces de preservar la cultura y crear un sentimiento de unidad y pertenencia desde la distancia; tener en cuenta el impacto psicológico que los meses de confinamiento y aislamiento pueden haber causado entre sus empleados; dar formación y desarrollo profesional; o afinar sus políticas de captación y gestión de talento a distancia.

El 22% de los encuestados cita el cambio climático y la sostenibilidad como uno de los cinco principales riesgos, sin embargo, esta cifra se incrementa hasta el 41% a tres años vista, lo que muestra la importancia creciente que está adquiriendo.