Ricardo Gabaldón, presidente del Consejo General de Graduados Sociales: “Los despachos de los graduados sociales están desbordados desde el inicio del estado de alarma”

Dentro de la lista de héroes que han dado más allá de lo exigible en el desempeño de su profesión en la actual crisis del Covid-19, destacan con nombre propio los graduados sociales, encargados de gestionar una buena parte de los más de 850.000 Ertes presentados hasta ahora y el cobro del desempleo de los trabajadores afectados

Para conocer un poco más sobre el esfuerzo realizado por este colectivo profesional, hablamos con Ricardo Gabaldón, presidente de su Consejo General e interlocutor ante la Administración en estos momentos.

¿Cuándo se debería empezar a negociar la devolución de los días correspondientes al permiso retribuido recuperable?

El Real Decreto es de 29 de marzo, habla de un permiso retribuido para buena parte de los trabajadores, ya que han quedado fuera aquellos comprendidos en los servicios esenciales, como es el caso del graduado social, que está considerada una actividad esencial por el trabajo que estamos haciendo ahora con toda la confección de los Erte, y con todos los expedientes que estamos pasando al SEPE. Tampoco ha operado para quienes están realizando teletrabajo y alguna excepción más. Pero del 30 de marzo al final de la Semana Santa, lo que ha ocurrido es que prácticamente se ha parado la actividad. Trabajadores y empresarios han estado en sus casas confinados. La norma dice que se recuperarán estos días con posterioridad con un plazo que concluye el día 31 de diciembre. Esta medida hay que consensuarla con los sindicatos. Esto para las empresas pequeñas es complicado. Creo que habría que diferenciar entre la gran empresa y la que tiene solo uno o dos trabajadores, que están muy distante de la capital de provincia, a los que se les tendría que facilitar un poco más esta negociación. Creo que el Gobierno debería poner un número de trabajadores a partir del cual se tuviera que negociar. Hay empresas que son familiares y se tendría que normalizar un poco más.

A la vista de la avalancha que se ha presentado de Erte y de expedientes para poder percibir el paro de los trabajadores, ya que son las empresas las que tienen que tramitar los expedientes ¿En qué situación están los graduados sociales?

Los despachos de los graduados sociales están desbordados desde la declaración del Estado de Alarma. Estamos trabajando 24 horas al día y nos estamos dejando la piel. Nuestros clientes, tanto empresas como autónomos, se han visto abocados en más de un 90% a paralizar su negocio, con lo cual, por una parte, tenemos que preparar los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (Erte), y por otra, la prestación de cese de actividad de los autónomos. Incluso, en muchas empresas tenemos que preparar los dos procedimientos. Estamos trabajando día y noche sin parar, intentado colaborar con la Administración, pero ésta está cerrada físicamente y colapsada con el volumen de solicitudes y comunicaciones en vía telemática, con lo cual el profesional se ve solo para poder gestionar y asesorar bien al cliente. Y la segunda, no podemos ir, como antes, a nuestros trabajos, con lo cual tenemos que trabajar desde nuestras casas y eso hace muy difícil nuestro trabajo. Hubo unos días en que se temió que, además, se pudiera sancionar por no cumplir el plazo de cinco días regulado en las medidas del Gobierno, hasta que el Ministerio de Trabajo nos comunicó que no se habían previsto sanciones. Quiero agradecer el esfuerzo a todos los graduados sociales, que además lo están redoblando, al juntarse ahora las exigencias fiscales que hay que atender.

¿En qué situación han quedado con las medidas adoptadas por el Gobierno los autónomos y las pymes?

Los autónomos han tenido que cerrar la actividad, pero pueden solicitar la prestación por el cese, y, el resto, cuando tengan una disminución en el rendimiento en sus ingresos del 75%, también lo pueden solicitar. En este caso, la documentación es más simple, y se ha simplificado el formulario y el trámite y va a ser más rápido, aunque empezarán a cobrar a mitad o a finales del mes de abril En el caso de las pymes las medidas adoptadas son más complicadas como la presentación de los Erte, si bien se ha simplificado el procedimiento y los requisitos para esta situación en concreto, las medidas van a ser insuficientes, habrá que buscar fórmulas que proporcionen liquidez, y no solamente a través de los prestamos ICO o el aplazamiento de algunos pagos o impuestos, pues son medidas que ayudan pero endeudan a las empresas , es evidente que la situación de cada una de ellas es diferente y se debería tener en cuenta esa personalización para que el asesor tenga las herramientas posibles dentro de la normativa y así dar soluciones diferentes en cada caso según las circunstancias de cada una de ellas.