Sierra Nevada cuelga el cartel de completo en el puente del 28F

La estación de esquí alcanza el ecuador de la temporada con cifras positivas y dando empleo a más de 3.000 personas de manera directa.

El invierno está siendo atípico en casi toda Andalucía, a la ausencia de lluvias se han unido temperaturas elevadas que parecen acercar la primavera. Aun así, los amantes del esquí han encontrado como cada año su particular oasis invernal en Sierra Nevada, la estación ha retomado la normalidad tras dos años duros marcados por la pandemia, aunque todavía con importantes medidas de seguridad para evitar la propagación del virus.

La estación de esquí granadina que abrió al público el 27 de noviembre y estará operativa hasta el 24 de abril, alcanza el ecuador de la temporada de invierno con cifras positivas que ya se acercan a las que se venían registrando antes del 2020.

“La temporada está siendo razonablemente buena, con una importante afluencia de usuarios, que recuerda las campañas previas a la pandemia. Casi hemos retomado la normalidad, aunque seguimos aplicando los protocolos anticovid. Actualmente es obligatorio el uso de mascarillas en los establecimientos cerrados, en los telecabinas (remontes cerrados) y en los momentos de aglomeración en los accesos a remontes”, explica a elEconomista Andalucía Santiago Sevilla, director de Comunicación de Cetursa Sierra Nevada.

El puente por la celebración del Día de Andalucía ha sido el primer gran examen del año para Sierra Nevada, que ya había registrado niveles de ocupación elevados durante las fiestas de finales del 2021 y también en los fines de semana de enero y febrero.

Tanto los hoteles como la propia estación de esquí han superado el 85% de ocupación durante estos días en los que miles de andaluces han decidido celebrar el 28F esquiando o disfrutando de las múltiples actividades que ofrece el paraje en torno a la nieve.

Optimismo y recuperación que también ha llegado al empleo y es que tras dos años duros, Sierra Nevada ha generado esta campaña más de 3.000 empleos directos tanto en la estación como en los bares, restaurantes, tiendas, hoteles y demás empresas que dan servicio a los visitantes.

“La temporada pasada fue muy floja debido a las restricciones de movilidad derivadas de las medidas COVID. No es comparable con ninguna otra, ahora tanto la estación como la mayoría de las empresas han recuperado la normalidad”, comenta el portavoz de Cetursa.

Desde la Asociación de Empresarios de Sierra Nevada cifraron en un 70% la caída de la facturación el año pasado, con respecto al volumen de negocio que las empresas registraron en 2019 y confían en esta temporada para la recuperación.

El estado de la estación y la llegada de turistas extranjeros serán aspectos clave para la actividad durante los dos próximos meses. “Aún es pronto para ser concluyentes. La evolución de la nieve determinará el desarrollo de la segunda parte de la campaña invernal, que en su primera etapa ha sido bastante buena”, comenta el portavoz.

Mejorar las infraestructuras es uno de los principales retos que afronta ahora la estación de Pradollano. Cetursa lleva tres años realizando importantes inversiones en la renovación de sus instalaciones, especialmente dirigidas en este periodo a mejorar el sistema de nieve producida, “ahora es más eficiente, eficaz y sostenible”, apunta Sevilla.

Uno de los principales proyectos ha sido la renovación de las máquinas pisapistas, Sierra Nevada se ha convertido en la primera estación española que incorpora maquinaría híbrida para esta tarea. Una tecnología con propulsión combinada de diésel y electricidad, que reduce sustancialmente el consumo energético y produce un 20% menos de emisiones de CO2, sin que ello afecte al rendimiento en el pisado y acondicionamiento de la superficie esquiable de la estación.

Ahora, la intención de los responsables de la estación de esquí es sustituir también los cuatro remontes antiguos, con el fin de seguir modernizando las instalaciones, aunque esta mejora está pendiente de los FEDER React.