Aprobar el presupuesto, el reto del último curso político antes de las elecciones

El Gobierno del cambio ha comenzado su último curso político antes del año electoral, si es que se culmina la legislatura al completo, con el gran reto de lograr los apoyos suficientes para poder sacar adelante el presupuesto del 2022. El propio consejero de Hacienda y Financiación Europea, Juan Bravo, admitía que el Gobierno andaluz atraviesa “una situación más complicada que nunca” para poder dar luz verde a las cuentas, y es que a la falta de apoyos se suma el recorte de financiación de 2.317 millones de euros por parte del Estado y la cercanía a un año electoral.

Las dificultades para sacar adelante el presupuesto han vuelto a sacar a la luz el fantasma del adelanto electoral que amenaza a este gobierno en minoría desde que estalló la crisis de Ciudadanos a nivel nacional, aunque tanto el partido naranja como el PP se afanan en mostrar su firmeza y el objetivo de acabar la legislatura completa.

“Algunos creen que no queremos Presupuesto y queremos Presupuesto cuanto antes y no queremos elecciones. Pienso en Andalucía hasta el último minuto que esté al frente del Gobierno de Andalucía”, aseveraba tajante el presidente, Juanma Moreno, situando la aprobación de estas cuentas como la prioridad del último trimestre del año.

Vox, que el año pasado ya presentó una enmienda a la totalidad del presupuesto retirada tras un acuerdo in extremis, ya comenzaba el curso político advirtiendo que para conseguir su apoyo a las cuentas el equipo de gobierno debe cumplir con los acuerdos presupuestarios suscritos entre ambas partes en lo que va de legislatura así como el acuerdo que posibilitó la investidura en enero de 2019.

Una amenaza de calma tensa que vuelve a poner contra las cuerdas al presidente del gobierno andaluz y que no tardó en aprovechar el PSOE, mostrando su buena voluntad para alcanzar un acuerdo que permita sacar adelante unas cuentas trascendentales para la región en un momento crucial de recuperación económica.

Una mano tendida por parte del líder del PSOE andaluz, Juan Espadas, que sin embargo no logró convencer. El vicepresidente y líder de Ciudadanos, Juan Espadas, catalogó el ofrecimiento de “puesta en escena”, reconociendo que la única alternativa que les quedaba era cerrar un acuerdo con Vox.

Un escenario convulso en el que la prórroga de las cuentas parece cada vez estar más cerca, un presupuesto que marcará sin duda el final de una legislatura ¡histórica por muchos motivos y que servirá como termómetro de la firmeza y solvencia del gobierno del bipartito.