Tiempo de oportunidades
Los acontecimientos acaecidos en el último año han supuesto una auténtica tragedia. Dejando claro este aspecto para no parecer frívolo, permítanme que, referido al momento económico, recuerde una cita célebre: “Un optimista ve una oportunidad en toda calamidad, un pesimista ve una calamidad en toda oportunidad”. La forma en que se está abordando esta crisis desde diferentes administraciones, con políticas expansivas frente a medidas de austeridad, es una oportunidad para abordar la modernización de la economía andaluza.
Por un lado, la Junta de Andalucía ha creado tres fondos de capital riesgo dotados con más de 50 millones de euros y centrados en apoyar pymes en fase semilla o de expansión temprana a través de capital y préstamos participativos. Por otra parte, el Gobierno de España aprobó el 12 de marzo la movilización de 11.000 millones de euros en ayudas a empresas afectadas por la crisis Covid-19. Y, por último, destaca el Fondo Next Generation, lanzado por la UE para financiar proyectos de transformación digital, reindustrialización y uso de energías limpias. Por su dimensión (A España le corresponden 140.000 millones, equivalentes a un 11% de su PIB), supondrá una auténtica revolución. El modo en el que los fondos llegarán a las empresas aún está lleno de incertidumbre. Uno será a través de Pertes, proyectos liderados por grandes empresas que, aunque cuenten con participación de pymes, no supondrán el acceso general de éstas a los fondos. Se espera un incremento en la dotación de las habituales convocatorias (REINDUS, CDTI...) junto con la creación de otras nuevas. Los detalles comenzarán a desvelarse antes del 30 de abril, límite para presentar el plan de ejecución a la CE.
Frente a esta visión, tenemos la contraria. La globalización ha hecho que la competición económica sea una liga mundial. La gran empresa lo asumió hace tiempo, pero aún hay una gran parte de las pymes, mayoría del tejido productivo andaluz, que no han interiorizado esta idea. Así, la oportunidad puede tornar en amenaza. Si la mayoría de tus competidores acometen acciones de innovación y modernización, la consecuencia directa de no sumarse a este carro es una pérdida de competitividad. Nadie dice que sea fácil. Captar financiación y ejecutar proyectos sin planificación conducirá a una asignación inadecuada de recursos y a una pérdida de tiempo y dinero.
Desde CTA, ayudamos a empresas a alinear la estrategia de innovación a la estrategia empresarial para obtener los mejores resultados y estamos especializados en el asesoramiento a pymes innovadoras en la elaboración de Planes de Negocio y financieros robustos como herramienta para captar financiación pública y privada. Tras esta crisis, como en las anteriores, habrá compañías que refuercen su posición y otras que quedarán atrás. Cabe preguntarnos con que visión nos posicionamos y en CTA lo tenemos claro: somos optimistas y tenemos que aprovechar esta oportunidad.