‘Sunshine Tour’ genera 60 millones de euros en Cádiz

La Dehesa Montenmedio, en Vejer de la Frontera, acoge desde este mes la XXVII edición de este circuito hípico en el que participan 2.000 caballos y 400 jinetes de 40 países.

U n oasis generador de empleo y riqueza en plena temporada baja y en una de las provincias españolas más castigadas por el paro. Eso es cada año el Sunshine Tour, que se celebra en la Dehesa Montenmedio en Vejer de la Frontera (Cádiz). Desafiando a la pandemia, el circuito hípico que está considerado uno de los más importantes de Europa, ha comenzado este mes y se prolongará hasta el 28 de marzo. Un total de 7 semanas en las que esta finca reunirá a unos 2.000 caballos y 400 jinetes procedentes de 40 países. Una competición de alto nivel que genera en la comarca un impacto económico cercano a los 60 millones de euros.

“Comenzamos a trabajar en septiembre preparando las reservas y la agenda deportiva, ahí empezaron las primeras contrataciones que se prolongan has marzo. Es un gran volumen de trabajo en un momento complicado y en plena temporada baja. Es una bomba de oxígeno para las familias de Vejer, de Conil y de toda la comarca”, comenta a elEconomista Andalucía Teresa Blázquez, directora general de Sunshine Tour.

Un volumen de trabajo que en cifras supone unos 200 empleos directos en la propia finca, donde prestan sus servicios desde personal de oficina, hasta jardineros, mantenimiento u hostelería, y alrededor de 1.200 puestos indirectos a través de proveedores, hoteles, restaurantes o veterinarios.

El Sunshine Tour es una competición de saltos de obstáculos que se ha convertido en un auténtico referente internacional, pues se disputa en la mayor instalación hípica de Europa, la Dehesa Montenmedio, que cuenta con más de una veintena de pistas de competición de hierba y arena.

La principal novedad, al margen de las medidas impuestas debido a la pandemia que provocarán que la competición se celebre sin público y a puerta cerrada, es que añade una semana más de duración respecto a las ediciones anteriores. Por lo tanto, serán siete semanas de competición internacional, con 38 pruebas ranking, en las que se repartirán más de dos millones de euros en premios en metálico.

En las semanas que dura la competición, el circuito genera un volumen de negocio que ronda los 40 millones de euros, a los que se suman los casi 60 millones de impacto económico en la zona.

“Es una burbuja, la gente se instala aquí, son muchas semanas y hacen vida en el pueblo, alquilan apartamentos o se quedan en hoteles, hacen su compra, va a las farmacias, a los restaurantes y supermercados. Se crea una pequeña ciudad que necesita de todo, además, en una época del año en la que aquí no hay nada. Muchos de los restaurantes abren cuando empezamos nosotros. La gente de Vejer lo acoge con mucha alegría, para ellos es abrir su pueblo al mundo, darle su sitio a esta zona en el mundo hípico, todo el mundo conoce el circuito de Vejer, supone poner el pueblo en el mapa”, destaca la directora.

Celebrar la competición este año en plena pandemia ha supuesto una importante inversión para garantizar la seguridad de los participantes y un reto para la organización. “Va a ser un año difícil, estamos en plena pandemia y en Vejer la situación aún es complicada, pero la gente viene muy concienciada, hemos invertido 60.000 euros en medidas de seguridad y purificadores. Ha sido todo un reto, nos animamos a celebrarlo porque ya hemos desarrollado varias competiciones internacionales en 2020 y no hemos tenido ni un solo contagio. También es una oportunidad para el sector, que se ha visto muy afectado”, subraya Blázquez.

Además de las cifras económicas, el Sunshine Touestá avalado por formar parte del calendario de la Federación Ecuestre Internacional, cuyas fechas ya están cerradas, y alberga competiciones clasificatorias para los campeonatos de Europa, del Mundo y los Juegos Olímpicos, por lo que está incluido en una planificación deportiva internacional.

“Los caballos van a salir de aquí preparados para las olimpiadas internacionales. Sabemos lo que hacemos, es una finca muy grande, con más de 60 hectáreas, todas las pruebas son al aire libre, sin público y cumpliendo estrictas medidas de seguridad”, explica la directora. Una competición que ha logrado sobrevivir a la pandemia, situando a Andalucía en el mapa mundial de la hípica.