Lorenzo Amor, presidente de la Asociación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA): “En once meses he visto llorar a más autónomos que durante los cinco años de la anterior crisis”
La pandemia ha devastado a unos 60.000 autónomos andaluces. Desde la Federación Nacional de Trabajadores Autónomos ATA llevan casi un año pidiendo a las administraciones ayudas directas, suspensión de impuestos e indemnizaciones por cese de actividad para ayudar a las microempresas a sobrevivir a la crisis.
Los autónomos están siendo los grandes afectados por las consecuencias económicas de la pandemia, ¿cuántas empresas se ha cobrado ya la crisis en Andalucía?
En los primeros nueve meses del año prácticamente 30.000 empresas y casi 60.000 autónomos han cerrado en Andalucía víctimas de la pandemia. Si analizamos los datos de cierres y creación de empresas estaríamos hablando de una diferencia de 20.000 y en el caso de los autónomos Andalucía ha reflejado casi el 80% de los autónomos que se abonaron en España en 2020, con un crecimiento de unos 9.000 autónomos y unas cifras históricas. Pero hay que poner todas las cosas encima de la mesa, tenemos actualmente alrededor de 65.000 autónomos que están cobrando la prestación por cese de actividad y por tanto no sabemos si van a poder volver abrir sus negocios o no. Son datos complejos que reflejan la realidad y es que se están destruyendo empresas y autónomos. Mientras estén los Ertes y las ayudas por cese de actividad no vemos la evolución real del mercado de trabajo y en el tejido empresarial.
¿Cuánta responsabilidad tienen las Administraciones públicas en este sentido?
Yo creo que la responsabilidad la tiene en primer lugar la pandemia, en segundo lugar es verdad que las administraciones públicas han tomado medidas, pero se ha demostrado que esta crisis no era de dos meses, ni saldríamos más fuertes, llevamos casi un año de pandemia y se ha demostrado que las medidas han sido claramente insuficientes, entre otras cosas porque la destrucción de empresas en España ha sido mayor que en otros países de nuestro entorno. La caída del PIB ha sido mayor que en otros países europeos. Lo ha dicho el BCE y el FMI: somos el país que menos ha destinado a ayudas directas a las empresas y a los autónomos. En los países que si ha habido ayudas se ha logrado salvar más tejido empresarial. Ningún autónomo ha cerrado por su propia voluntad, la inmensa mayoría ha echado el cierre por restricciones y por limitaciones, por orden administrativa y la Administración no ha compensado esos cierres, no ha indemnizado por esos cierres. Un empresario cuando despide a un trabajador tiene que indemnizarlo, porque no se le permite trabajar, a un autónomo o empresario en estos momentos no se le permite trabajar y nadie lo indemniza. En otros países ha habido indemnizaciones lo hemos visto en Alemania, Francia, Reino Unido o Portugal.
¿Qué habría hecho falta para evitar el cierre de tantas empresas?
En primer lugar, que la Administración Central hubiera puesto en marcha el mismo nivel de ayudas que han puesto Alemania, Francia o Italia. En esos países están los Ertes, ha habido avales de bancos, pero la diferencia es que también han tenido ayudas directas y aquí no ha habido un solo euro en ayudas directas. En España hemos tenido moratorias y aplazamientos, que eso es pan para hoy y hambre para mañana, porque hay que pagarlo, como los créditos ICO. El problema es que ya llevamos casi un año y la vaca se está quedando sin leche, el pozo se está quedando sin agua o llega una inyección o muchos se van a quedar en el camino. No se puede fijar el futuro de gran parte del tejido empresarial, de los autónomos y de las pymes a que se cumplan los planes de vacunación o a que lleguen los fondos europeos. En estos momentos lo que necesitamos es que nuestro Gobierno reaccione al mismo nivel que han reaccionado los gobiernos de otros países de nuestro entorno europeo. Cuando se reaccione con ayudas directas tienen que ser a fondo perdido, lo que se necesita es una inyección económica. El 90% de los autónomos y empresas que en estos momentos están teniendo problemas eran viables el 17 de marzo del año pasado, si tienen dificultades no es por ellos. Ahora se está hablando de ayudar a las empresas viables.
¿Cómo valora ATA la actuación de la Junta y del Gobierno central en lo que se refiere al apoyo a los autónomos?
Las administraciones han dado un cierto apoyo, por ejemplo el Gobierno Central puso en marcha la prestación por cese de actividad, los Ertes, las ayudas de ICO..., pero se ha demostrado que esto es claramente insuficiente porque la situación no era para dos ni cuatro meses. Se llegó a decir que las consecuencias económicas que iba a tener la pandemia iba a ser prácticamente nulo, después se dijo que esto se desenchufaba dos meses y después se volvía a activar, luego que saldríamos más fuertes, que la segunda ola no tendría efecto en la economía, que no habría una tercera ola y ya se oye hablar de la cuarta ola. Veo excesivo triunfalismo y poco realismo, no ha habido un análisis claro de la situación que está atravesando el tejido empresarial. Echo de menos ayudas directas de la administración y suspensión de impuestos para los sectores afectados. En el ámbito autonómico, las autonomías en general han hecho un esfuerzo, a todos nos hubiera gustado que hubiesen llegado más lejos. Creo que la Junta de Andalucía tiene que reaccionar ante esta tercera ola, se necesitan más ayudas. Es verdad que ha hecho un esfuerzo con un paquete de ayudas en el último tramo del año acordado con la CEA y la Cámara de Comercio, lo que ha permitido que prácticamente 120.000 autónomos y pymes puedan tener una ayuda. Esas ayudas han estado muy bien, pero necesitamos más. En el ámbito de la administración local ha habido ayuntamientos que han reducido o eliminado tasas, incluso algunos que han dado ayudas directas a los sectores afectados, pero también se necesita que se destinen más recursos porque la crisis se está alargando. Parte del presupuesto de este 2021 se tiene que seguir destinando a ayudas para los sectores más afectados.
¿Se han sentido los autónomos abandonados por las administraciones?
Si, los autónomos se han sentido abandonados por las administraciones. Si uno habla con el sector de la hostelería se sienten los paganos de esta situación. Si hablas con el sector del ocio infantil, pues es incomprensible que esté cerrado en Andalucía desde el 17 de marzo y en otras comunidades no. Si hablas con el sector de los feriantes, pues no han ingresado nada, ni van a ingresar nada y las ayudas han sido escasas, por no decir nula. Si hablas con el sector de la cultura, el espectáculo y el audiovisual, es que no saben cuando van a volver a tener conciertos y también se sienten abandonados. Es que no ha habido indemnización a lo que se está perdiendo, ojalá hubiéramos tomado el ejemplo de Alemania que se ha indemnizado a los sectores afectados con el 70% de lo que facturaron el año anterior.
El cierre de la actividad no esencial en grandes ciudades como Málaga ha supuesto un nuevo varapalo, ¿Qué le parecen este tipo de medidas?
Yo soy de los que opino que la pandemia hay que cortarla y las medidas drásticas hay que respetarlas y acatarlas, porque no se toman por voluntad propia. Ahora bien, los cierres administrativos tienen que venir acompañados por medidas que indemnicen.
La hostelería y el comercio están siendo los grandes afectados, ¿considera que las administraciones han estado a la altura para prestar ayuda a estos sectores?
Las administraciones no han estado a la altura ni el ámbito económico ni en el ámbito sanitario. La pandemia les ha pasado de largo, no solo en España, también en el resto de Europa.
Los empresarios han tenido que reinventarse en estos meses, la pandemia ha sacado a las fortalezas del tejido empresarial andaluz, pero ¿cree que también han dejado en evidencia las carencias?
Yo creo que el tejido empresarial se ha adaptado mucho mejor a la realidad de la pandemia que la propia administración, en el ámbito de la digitalización, en el ámbito de la innovación, en el ámbito del teletrabajo..., creo que hemos dado suficientes respuestas. Basta con ver como en aquellos fatídicos días de marzo, fue el sector privado el que estuvo echando una mano importantísima al sector público para armar todos esos hospitales de campaña y todo lo que era necesario. España y Andalucía se van a recuperar, es verdad que la recuperación va a ser lenta y va a tener mucho que ver con el índice de vacunación que vayamos teniendo. Ni se van a llenar los hoteles al día siguiente, ni va a haber conciertos al día siguiente, si se van a vender trajes al día siguiente, ni una fábrica de cera de Andújar va a comenzar a vender cera al día siguiente. Esto va a ser lento y por tanto tenemos que trabajar de manera conjunta el sector público y privado con una colaboración importante para que la recuperación sea lo antes y lo más plena posible y deje el menor daño colateral.
La vacuna será clave para la recuperación económica, ¿cómo valora el desarrollo de los procesos de vacunación y cómo cree que las irregularidades en ese sentido pueden resentir también la economía?
Uno mira a otros países como Israel, EEUU o Reino Unido con envidia, porque los procesos de vacunación van mucho más rápido que en nuestro país. Esto me lleva a una reflexión y es que alguien se ha equivocado, en la gestión sanitaria de la pandemia vamos con retraso y con el pie cambiado y en la vacunación se está viendo. Espero que no haya corporativismo como lo ha habido con los test de antígenos, me resulta que en pleno estado de guerra contra un virus, no se pueda hacer un test de antígenos en las farmacias por puro corporativismo. Veo a Israel con los militares vacunando o EEUU vacunando en estadios, espero que las mutuas puedan vacunar a los autónomos y a los trabajadores de las empresas, espero que la sanidad privada pueda vacunar, los militares también y los farmacéuticos, que todas aquellas personas que puedan vacunar estén vacunando y que no nos pase como con los test de antígenos, que me parece una vergüenza.
¿Cómo ha sido el trabajo de ATA en estos casi 11 meses de pandemia para ayudar a los autónomos?
Yo he visto llorar a más autónomos en estos 11 meses que en cinco años de la anterior crisis. Hemos estado al lado de ellos, dando ánimos y evitando esa soledad que sentían. Hemos atendido a 120.000 autónomos a través de nuestras líneas telefónicas, de nuestra web y en nuestras oficinas cuando se pudo. Esto muestra lo dura que ha sido la crisis para los autónomos, la sensación de soledad que han tenido y las dificultades que han encontrado para mantenerse. Al principio nos preocupaba que las bajas pudieran suponer merma de socios de ATA y sorprendentemente hemos aumentado la afiliación e, aún nos queda mucho trabajo por hacer.
¿Cómo ven los autónomos la intención del Gobierno central de querer derogar la reforma laboral?
Vemos que ahora es el momento de ayudar a las empresas a sobrevivir no de modificar la reforma laboral, aunque haya aspectos en los que podamos estar de acuerdo.
La primavera y el verano son épocas claves para el desarrollo económico andaluz, muy ligado al turismo y la hostelería, el año pasado fueron muy duros. Ahora con una tercera ola que por fin parece que comienza a remitir, ¿qué previsiones manejan?
Confiamos en que el verano pueda ser al menos como el de año pasado, que permitió cierto crecimiento del PIB. No creemos que para Semana Santa se puedan dar las condiciones de recuperación económica ni por el avance de la vacunación, ni por la situación sanitaria actual, pero para el verano esperamos que mejore y sea al menos como el de 2020.