El precio de la vivienda se desploma un 10% en Andalucía durante 2020

La Sociedad de Tasación Tinsa sitúa a la región entre las que acumulan mayores caídas del país, estableciéndose muy por encima de la media nacional del 2,3%. Almería y Córdoba son las provincias más afectadas.

El mercado inmobiliario viene reflejando las consecuencias de la pandemia desde que el virus irrumpió con fuerza en el país en la primavera del año pasado. La caída de precio ha sido generalizada en todas las comunidades autónomas, pero Andalucía se encuentra entre las más afectadas y muy por encima de la media nacional. Según los datos de la Sociedad de Tasación Tinsa el coste de la vivienda, tanto nueva como usada, ha caído en el acumulado de 2020 un 10%.

A pesar de que en el último trimestre del año las cifras han comenzado a registrar cierta moderación, Andalucía supera con creces la caída media nacional que se sitúa desde marzo en el 2,3%. La región acumula junto con La Rioja, Extremadura, Castilla y León, Aragón, y Navarra los mayores descensos tanto anuales como durante los meses más duros de la pandemia, alcanzando cifras de dos dígitos.

“Las cifras de compraventas han mostrado tanto un impacto inmediato y contundente hasta el verano como cifras relativamente positivas en meses posteriores, con mejor comportamiento hasta la fecha en la obra nueva. Es de esperar que la demanda en los últimos meses de 2020 haya vuelto a acusar el empeoramiento reciente de la situación sanitaria”, comenta Rafael Gil, director del Servicio de Estudios de Tinsa.

Por provincias, todas se encuentran por encima de la media nacional, pero la que registra una mayor caída en el precio de la vivienda es Almería con un descenso del 11,8%, seguida de Córdoba con un descenso del 10,2%, Granada con un 9,3%, Málaga con un 8,7% y Huelva con 8,3%. Las que mejor han resistido el desplome son Cádiz con un 6,1%, Jaén con un 6,5%, y Sevilla con un 7,9% de descenso.

En cuanto a las capitales de provincia, todas se encuentran por encima de la caída media en el acumulado anual, Málaga es la más afectada con un descenso del 9,6%, seguida de Córdoba (8,3%), Jaén (8,2%), Sevilla (7,6%), Huelva (7%) y Almería (4,5%). En el otro extremo se encuentran las ciudades de Cádiz (2,1%) y Granada (3,3%).

A pesar de estas caídas generalizadas en los datos que albergan el año completo, en el último trimestre del 2020 algunas zonas han comenzado a mostrar signos de estabilización. Las ciudades de Málaga y Sevilla ya han experimentado atenuación de la bajada de precios.

En lo que se refiere al pago de las viviendas, los andaluces destinaron de media el 21,4 % de sus ingresos familiares disponibles a afrontar el primer año de hipoteca en el tercer trimestre del año, lo que representa un incremento desde el 20,5 % que se observó en el segundo trimestre del año. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, la hipoteca media en España se situó en 133.976 euros, también por encima de los 128.169 euros del segundo trimestre, con una cuota mensual media de 610 euros.

Málaga se sitúa entre las provincias con las hipotecas más caras de España. Según las cifras provinciales de hipoteca media publicadas por el INE para el tercer trimestre del año, en Málaga el esfuerzo financiero neto para hacer frente a este pago alcanza el 30,3%.

La ralentización que ha sufrido el mercado se deja notar en las ratios de compraventas y visados. España registró entre el último trimestre de 2019 y el tercer trimestre y el 2020, un total de 18,8 transacciones por cada 1.000 viviendas existentes, frente a la ratio de 21,2 compraventas observada en el primer trimestre. Las provincias de Málaga y Almería se sitúan entre las más activas del país, aunque con cifras inferiores a las de seis meses antes. En el año comprendido entre el cuarto trimestre de 2019 y el tercero de 2020, se transaccionaron en Málaga un total de 28,8 viviendas por cada 1.000 existentes en la provincia, frente a las 32,8 compraventas del primer trimestre. En Almería la ratio fue de 25,2 viviendas.

“La actividad del mercado durante 2021 seguirá sujeta a “la evolución de la pandemia y a los daños acumulados en la economía española, así como a su capacidad de recuperación, la del resto de Europa y la vuelta de cierta normalidad en la movilidad internacional, entre un sinfín de factores. Este año podría volver a mostrar escenarios puntuales de afectación significativa tanto positiva como negativa. Los valores medios residenciales podrían ahondar su ajuste apenas comenzado o verse sostenidos por un mercado reactivado”, estima el director del Servicio de Estudios de Tinsa, confiando en la fortaleza del sector para su recuperación.