José María García Urbano, Vicepresidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y alcalde de Estepona: “El Gobierno está perdiendo una oportunidad enorme de contar con los ayuntamientos”

El pasado año volvió a ser el alcalde más votado de España tras conseguir levantar Estepona de la quiebra con la que cogió su ayuntamiento en 2011. Además, su responsabilidad en la FEMP le permite hablar con claridad de las recetas que los municipios ofrecen unánimes a un Gobierno con el que se muestra muy crítico

¿Cómo calificaría el papel que están jugando los ayuntamientos durante la pandemia?

El Gobierno está perdiendo una oportunidad enorme para contar con los ayuntamientos y superar juntos esta crisis económica en la que estamos. Porque la sanitaria ya está más o menos superada, pero ahora estamos todos preocupadísimos en darle salida a esta nueva crisis que afrontamos. El Gobierno está acudiendo a medidas de endeudamiento público, de endeudamiento externo fuera del país, cuando en realidad tenemos dentro unos recursos municipales que podríamos poner al servicio de esa recuperación económico y social y que estamos deseando hacerlo.

El Gobierno se reúne periódicamente con las comunidades... ¿Y con los alcaldes?

A la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) nos reunió hace un mes y nos dijo que nos reuniríamos cada 2 semanas pero ya han pasado 4 y hasta no nos ha vuelto a llamar. Y no solo eso, sino que ha hecho caso omiso a la totalidad de las propuestas que le hicimos en su día. Eran propuestas razonables y consensuadas por unanimidad en el seno de la FEMP, una organización en la que están representados todos los partidos políticos. Por eso sostengo, con mucho pesar, que el Gobierno de Sánchez ha hecho mucho más profunda la crisis económico y social no solo por los errores, sino también por la ausencia de agilidad en la toma de decisiones.

¿Cuáles son las principales reclamaciones?

En primer lugar pedimos que nos dejen gastar el superávit de los ayuntamientos de 2019. Ahí tenemos aproximadamente 3.800 millones de euros de más de 7.000 consistorios que hemos tenido esas cifras con el esfuerzo de los vecinos. Es un dinero que tenemos ahí y que podríamos inyectar de manera inmediata en la economía real. Otra propuesta es poder invertir los remanentes. Es decir, los ahorros de años anteriores. Desde 2012 al 2018, en la época de la legislación de Cristóbal Montoro, hubo unas medidas que obligaban a los ayuntamientos a un control del gasto, y merced a estas medidas, muchos ayuntamientos hemos ahorrado mucho dinero. Estamos hablando de nada menos que 28.000 millones de euros. Es un dinero que tenemos en cuentas bancarias y que ahora, en época de interés en negativo, nos cuesta dinero mantenerlos. Por lo tanto, es una cantidad que se tiene para usarla cuando se necesita. ¿Así que a qué estamos esperando a utilizarlo, si ahora es el momento de mayor necesidad? Porque no hablamos de grandes reformas legislativas. Todo esto solo serían dos párrafos añadidos a los decretos leyes que están promulgando, y que seguro contarían con el apoyo de todos los partidos. Pero aún hay más: el presupuesto corriente. Las comunidades autónomas tienen este año 7.000 millones de euros para inversión. Pero es que los ayuntamientos tenemos presupuestados otros 7.000 millones para inversión en el ejercicio corriente del presente año. Si sumamos todas estas cantidades tenemos 40.000 millones de euros. Pero es que se nos ha estado impidiendo la contratación administrativa. Durante dos meses, de manera inexplicable, el Gobierno ha paralizado y ha prohibido que los ayuntamientos hagan contrataciones de obras y servicios. Entonces, es una pena que ahora tengamos que esperar dos o tres meses para relanzar la contratación.

Los ayuntamientos son las administraciones más cercanas y a la que la que están acudiendo los vecinos con sus problemas. ¿Cómo los están viviendo?

Con mucha responsabilidad e intensidad. ¿Qué estamos haciendo la gran mayoría? Pues pequeñas modificaciones presupuestarias en el 2020 para alterar las prioridades y atender fundamentalmente al gasto social. En el caso de Estepona, se ha creado una partida ilimitada y el mensaje es que todo el mundo esté tranquilo y que el Ayuntamiento se ocupará de que las necesidades básicas estén resueltas. Hemos tomados otra serie de medidas como un plan de apoyo a las empresas locales; o un programa de inversiones de 80 millones, que para Estepona es muchísimo. Es algo que hemos hecho con los recursos actuales, sin contar con los remanentes. Por eso estoy convencido de que aquí la recuperación será más veloz.

¿Cree que ha sido correcta la decisión de dejar a Málaga y Granada una semana más en la Fase 0?

Las provincias de Málaga y Granada hemos percibido como un castigo injustificado y no explicado por qué la desescalada se ha retrasado, una decisión que no se entiende, pues no nos lo han explicado. Por fortuna, solo ha sido una semana más. La empresas se había aprovisionado y los empleados estaban avisados para comenzar, pero cuando se tomó esa decisión de no avanzar a Fase 1 todos nos sentimos frustrados.

¿Qué opinión le merece la labor de la Junta?

A nivel andaluz, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, está haciendo un buen trabajo y está dirigiendo propuestas muy claras al Gobierno central. No hay que olvidar que el Ejecutivo de Sánchez es quien tiene el mando único. Las comunidades pueden proponer, pero no deciden. El Gobierno andaluz está implementando un plan para abrir las playas, con ayudas a los municipios; y otra serie de medidas fiscales para adaptarlas a toda la región.

La Junta propone abrir las playas desde hoy ¿cuándo cree usted que sería positivo y prudente abrirlas?

La Junta de Andalucía y los ciudadanos lo que quieren son respuestas concretas de quien tiene la información. Y también claridad. Lo que nos sorprende es que un miembro del Gobierno lance con frialdad y frivolidad que no se abrirán los hoteles ni los establecimientos de cultura y ocio hasta finales de año y luego se retracte. Y lo que ya nos parece una frivolidad absoluta, en una comunidad tan turística como la nuestra, es que otro miembro del Gobierno diga que el sector hotelero y la restauración no generan valor añadido, y que por tanto no es un sector esencial. Esto desconcierta al sector turístico y hace mal de cara al extranjero. Todas estas cosas no ayudan y hay una sensación de que este Gobierno le tiene cierto desprecio al sector turístico, que es uno de los motores de la Costa del Sol, pero también de Andalucía y de España. ¿Qué día deben abrir las playas? Pues eso son las autoridades sanitarias las que deben tomar las decisiones, pero con responsabilidad. Todos los mensajes frívolos y equívocos, perjudican a la marca España, a la marca Andalucía y a la marca Costa del Sol.

¿Está Estepona lista para abrir playas?

Vamos a seguir con toda disciplina las directrices que den el Gobierno nacional y las que sugiera o haga el Gobierno autonómico. No tiene ningún sentido que tomemos medidas unilaterales. La solución debe ser global. Nuestros servicios municipales han estado trabajando intensamente en estos meses y estamos perfectamente preparados para recibir visitantes. Pensamos que vamos a recibir un turismo de interior y nacional. Hay mucho español que tiene segunda residencia aquí y puede que este año vengan más tiempo. Debemos compensar de alguna forma la bajada del turismo exterior con el turismo interior.

¿Cuál ha sido la incidencia del coronavirus en Estepona?

Mínima. Esta parte de la provincia está muy por debajo de la media nacional e incluso de la media de Málaga.

Usted fue el gran impulsor de un hospital en Estepona, que entregó a la Junta en octubre. ¿Por qué no se ha abierto aún?

El Gobierno socialista estuvo años negando a Estepona este centro hospitalario. Incluso la ministra actual de Hacienda, entonces consejera de Sanidad, vino a poner la primera piedra en el 2007 y luego nunca hubo una segunda. Por eso ofrecí que Estepona levantara el edificio y después el SAS lo dotara de equipamiento y lo pusiera en funcionamiento. Tengo el compromiso del presidente de la Junta de que este proyecto será una realidad, aunque sí es verdad que con lo que está sucediendo ahora tenemos que tener paciencia. No tengo ninguna duda de que se va a equipar y se pondrá en marcha, pues el Ayuntamiento hizo sus deberes y el proyecto lo ha entregado y lo ha ejecutado, exactamente tal y como nos comprometimos con el Servicio Andaluz de Salud. Estoy completamente convencido que en los próximos meses se procederá a su apertura.

.¿Cuál es la incidencia económica del coronavirus en Estepona? ¿Tienen ya evaluado desde el ayuntamiento cuánto puede ser la repercusión en la economía?

El dato es muy malo. El momento de mayor desempleo en Estepona fue en febrero de 2012 y a finales de abril estábamos ya cerca de aquel momento. Ahora, a finales de mayo podemos encontrarnos con una situación muy complicada. Pero también estoy seguro, siendo optimistas, que en Estepona la reactivación será rápida, como en aquel momento. Estoy convencido de que esos 80 millones que vamos a movilizar desde el Ayuntamiento, y que ya hemos movilizado más de 30, ayudarán a ello. Y es que ese tipo de inyección económica en la economía real tira de todos los sectores. El sector hotelero se va a ralentizar, pues hay muchos hoteles que no abrirán hasta julio o septiembre.

¿Se han paralizado muchos proyectos de inversión por la actual situación?

Paralización no. Lo que hay es una situación de indecisión y alguna ralentización, como el Hotel Ikos, que retrasa su apertura de mayo a septiembre. Se está esperando también qué medidas vendrán impuestas por el Gobierno central. Se habla de subida de impuestos, de nacionalizaciones... cuando un programa económico genera dudas e incertidumbre, los operadores turísticos tienen dudas.

Usted cogió el ayuntamiento en 2011, en plena crisis, con el Ayuntamiento en quiebra y casos de corrupción, ha estado 8 años levantando Estepona y ahora se encuentra con esta nueva crisis. ¿Cómo lo afronta?

Aquellos fueron momentos realmente difíciles. Heredamos una deuda de 300 millones de euros y en diciembre de 2019 ya estaba a 104. La hemos bajado enormemente. Y todo eso en paralelo con una fuerte reactivación económica y numerosas inversiones, habiendo convertido Estepona en el “Jardín de la Costa del Sol”. Ahora estamos en otra situación complicada, pero en esta vida te toca lo que te toca. Y yo me siento bien haciendo el bien.

Hace ahora un año volvió a ganar las elecciones con una mayoría aplastante. Supongo que lo considera una recompensa...

Han sido 8 años de gobierno con mucha seriedad y participación, con medidas creíbles y aceptadas por los ciudadanos. Que un proyecto político genere simpatía es muy importante. Poco a poco, con trabajo y esfuerzo, e implementando medidas aceptadas por la ciudadanía, avanzamos conjuntamente. En 2011 tuve el 48% del respaldo electoral. El 60% en 2015. Y el 70% en 2019. Lo que importa es ver que tu ciudad avanza, que es lo importante. Y ahora tengo la oportunidad de volver a intentar a hacer las cosas bien.

¿No se arrepiente de no haber escuchado cantos de sirena para irse al Ayuntamiento de Málaga o a la Junta?

Yo estoy muy agradecido al PP de todo lo que me proponen. Muy agradecido a Paco de la Torre por la propuesta que formuló en su día pero mi sitio está aquí, y estoy muy bien aquí. Pero claro, cuando perteneces a una gran organización como el PP siempre hay que estar dispuesto a todo, y yo lo estoy.