Ximénez, 75 años iluminando
el mundo desde Puente Genil

En la Navidad de 1945 Francisco Jiménez Carmona fabricó una pequeña estrella de luz y la colocó como reclamo en el escaparate de su modesta tienda de electrodomésticos en Puente Genil (Córdoba). Tal fue el éxito, que al año siguiente el Ayuntamiento le pidió que adornara la calle principal del pueblo. Así, por casualidad, nació lo que hoy es Ximénez Group, una compañía líder en decoración lumínica que en sus 75 años de historia ha llevado sus proyectos a 600 ciudades de 75 países de los cinco continentes.

El 75 aniversario ha quedado marcado por las consecuencias de la pandemia pues, aunque la Navidad es su temporada principal, la empresa también realiza proyectos de gran envergadura en otras fiestas a lo largo del año como el carnaval, las Fallas de Valencia o las ferias de diferentes ciudades. “Llegamos a colocar la iluminación en Las Fallas, pero las ferias se cancelaron todas, hemos perdido alrededor de 35 y eso ha tenido un importante impacto en el grupo”, ha comentado a elEconomista Andalucía Mariano Ximénez, Ceo de Ximénez Group.

El grupo cierra su facturación en marzo, por lo que aún no han calculado el porcentaje de pérdidas exacto que habrá provocado este año sin ferias ni fiestas en sus cuentas anuales. La facturación de 2019 alcanzó los 43,7 millones de euros, cifras que previsiblemente se verán mermadas.

La Navidad está siendo clave para amortiguar el efecto de la pandemia, de hecho, en septiembre la única empresa del grupo que había tenido que aplicar un ERTE en su plantilla, ya había recuperado al 100% de los trabajadores afectados.

A pesar del debate público que supuso a principios de otoño la colocación de la decoración navideña en este complicado año, la mayoría de Ayuntamientos del país han optado finalmente por mantenerla como un impulso a la economía.

“Los clientes nos dicen que la iluminación es un recurso estratégico para poder dinamizar sus economías locales y contribuir a la reactivación del comercio y de la hostelería, además también para devolver el ánimo e ilusión a la sociedad en este año tan complicado”, ha comentado el CEO.

En la ciudad de Málaga el impacto económico de la Navidad, provocado en gran medida por el espectáculo de luz y sonido de la céntrica calle Larios, superó en 2018 los 200 millones de euros.

Desde la empresa explican que la demanda de decoración navideña comenzó este año de manera pausada, pero finalmente han logrado igualar las cifras de ejercicios anteriores y mantener sus grandes proyectos en ciudades como Madrid, Barcelona, Málaga o Vigo, a las que se suman otras como Zaragoza que también está apostando fuerte por la iluminación de sus calles o A Coruña que ha puesto de la mano de Iluminaciones Ximénez en marcha el proyecto sostenible “Slowlight”.

A nivel internacional, las luces de Navidad cordobesas están iluminando este año ciudades de 25 países. La empresa ha logrado llegar a dos mercados nuevos, Suecia y Dinamarca y además mantiene a sus países clave como son EEUU, Rusia, Portugal y otros como Méjico, Dubai, Noruega y Panamá.

Los proyectos de Navidad han logrado amortiguar las pérdidas y el grupo ha conseguido mantener las cifras de empleo que en temporada alta supera los 580 trabajadores.

Una trayectoria de 75 años encendiendo la Navidad del mundo desde Andalucía, que ahora mira hacia el futuro más inmediato con la esperanza de que la pandemia remita y permita recuperar una normalidad en la que tengan cabida las fiestas y la ilusión.