Vicente Mollá, country general manager de CHEP España: “Los actores logísticos estamos obligados a ser más ágiles”
La filial española de la australiana CHEP mueve anualmente en España una media de 60 millones de palés con un tráfico de 1.000 camiones al día, y cuenta con 83.000 puntos de entrega. Son más de 50 centros de servicio y cuentan con más de 4.000 clientes
El sector de la logística y de la distribución ha afrontado la situación derivada de la pandemia con el desarrollo de nuevas estrategias tanto en la relación con los clientes, proveedores, como con los destinatarios finales. Para el responsable de la filial de la empresa australiana en España, CHEP, especializada en la paletería y en los contenedores logísticos, Vicente Mollá, “la pandemia ha supuesto un duro reto para las cadenas de suministro de todo el mundo”. Y a su juicio se ha puesto de manifiesto la necesidad de llevar a cabo un trabajo conjunto entre productores, recolectores, distribuidores, transportistas, etc., “todos hemos tenido que trabajar duro y juntos, poniendo todo lo que estaba en nuestras manos para responder con la mayor agilidad posible, a la demanda que se ha presentado en una mayor medida de la esperada”.
¿Cómo se afronta una situación como la forzada por el Covid-19, y como se planifica el posible repunte de la demanda?
Hemos trabajado estrechamente con nuestros clientes para cumplir con la demanda fluctuante durante este periodo, asegurando en todo momento el suministro de productos. Desde CHEP hemos sabido gestionar la volatilidad de la demanda, que nos ha llevado a aumentar la frecuencia de nuestra planificación y preparar planes de contingencia teniendo en cuenta los múltiples escenarios posibles y las potenciales restricciones de la actividad.
¿Qué hemos aprendido con esta situación?
Hemos podido identificar aquellos puntos fuertes que han permitido garantizar el buen funcionamiento de las cadenas de suministro y, además, nos ha dado la clave del futuro de la logística: la comunicación transparente y fluida, la agilidad en los procesos y en las tomas de decisiones, establecer como prioridad a las personas y, por último, la colaboración dentro de la compañía y con terceros.
Usted hablaba antes de un trabajo conjunto de todos los actores en la cadena de suministro
El Covid-19 ha demostrado que la colaboración es parte del éxito para seguir avanzando. Sea lo que sea que traiga el futuro, no podemos ni queremos hacerlo solos. Desde los proveedores hasta los clientes finales, es la colaboración la que nos permitirá alcanzar nuestros objetivos comunes de sostenibilidad para crear un planeta mejor, así como innovar en una oferta de servicios comunes y asegurar la continuidad de las cadenas de suministro en tiempos de crisis. Porque, además, la pandemia no sólo ha provocado cambios en los hábitos de consumo, sino también en la manera de trabajar, con planes de trasformación digital.