Gonzalo Velarde

Acuerdo para la reforma en el Pacto de Toledo después de nueve años

El último consenso en la Comisión se produjo en 2011 con el Gobierno socialista. El PP introdujo nuevos cambios en la ley de las jubilaciones en 2013 para cauterizar el déficit financiero del Sistema, pero estos cambios fueron derogados de facto por Mariano Rajoy en la negociación de los Presupuestos de 2018.

El Pacto de Toledo a finales de este mes de octubre a un acuerdo para la reforma del sistema público de pensiones en España tras cuatro años de duras negociaciones sobre cómo revertir la situación financiera que afronta la Seguridad Social con un déficit estructural y una senda de gasto ascendente que compromete la sostenibilidad a futuro del Sistema. El anterior pacto alcanzado en esta Comisión para reformar las pensiones se dio hace ya 9 años con el PSOE en el Gobierno.

En este sentido, la Comisión cerró un acuerdo para renovar sus recomendaciones en materia de pensiones en el órgano de mesa y portavoces, y que fue sometido al final del mes de octubre entre todos los miembros que conforman el Pacto de Toledo para dar luz verde a la reforma de pensiones y para unos días después llevarlo al Pleno del Congreso de los Diputados. Cabe recordar que lo que se presentará una vez se sustancie el acuerdo en el Congreso son recomendaciones sobre aspectos que afectan al funcionamiento de las pensiones y de la Seguridad Social y que suponen un mandato para el ministro de la materia, José Luis Escrivá, quien será el encargado de trasladar estas recomendaciones a cambios normativos en la legislación de la Seguridad Social.

Fuentes de Unidas Podemos mostraron satisfacción con “el acuerdo alcanzado” en torno al texto y pusieron el acento en que cumple con lo pactado en el programa de coalición porque garantiza “unas pensiones dignas y un sistema público sostenible”, además supone “la derogación de facto” de la reforma de las pensiones de 2013. Desde el PSOE, también celebraron llegar a este texto que se ha cerrado y que suscita un apoyo mayoritario. Mientras, desde el PP no quisieron desvelar el sentido de su voto el martes y señalaron que el compromiso de que el nuevo sistema de cotización de los autónomos se aborde en el diálogo social y no se adopte “de forma unilateral” por el Gobierno, recogido en el texto final, es uno de los puntos fundamentales para condicionar su apoyo.

Con el acuerdo, se pone fin a un camino iniciado en otoño de 2016, hace dos legislaturas, cuando bajo la presidencia de la ‘popular’ Celia Villalobos en la Comisión el Congreso inició el proceso para renovar las recomendaciones hacia una nueva reforma de pensiones que garantizara la sostenibilidad del sistema, y que ha zanjado la actual presidenta del órgano y exministra de Trabajo, Magdalena Valerio.

“Sería muy importante poder sacar adelante el acuerdo este año”, auguraba este verano la presidenta del Pacto de Toledo, Magdalena Valerio, en una entrevista concedida en exclusiva a elEconomista Pensiones. Reconocía con estas palabras la necesidad de generar certidumbre en cuanto a la normativa, el Pacto de Toledo es un marco que da unas recomendaciones, junto con la Mesa de Diálogo Social y la necesidad de recursos: “Ahora necesitamos una inyección del Estado porque estamos en déficit pero cuando se jubile la generación del baby boom de manera permanente vamos a necesitar inyección vía Presupuestos y vía impuestos para poder mantener nuestro sistema. Ni más ni menos que lo que están haciendo otros países de la UE como Francia con la Contribución Social Generalizada, o Alemania, con impuestos generales”, explicaba Valerio.