El Economista

De la supervivencia a la innovación. Superando los desafíos actuales en el sector financiero

Tras la crisis provocada por Covid-19, todos los sectores se enfrentan ahora a una ardua batalla contra el impacto estructural y financiero de una pandemia mundial. El sector financiero no es ninguna excepción a las muchas empresas que se enfrentan al reto de adaptarse rápidamente a una realidad en constante cambio.

Ninguna empresa desea una interrupción no planificada de su productividad o servicios, y muchos de los grandes actores de los servicios financieros han realizado una gran preparación para apoyar la capacidad de recuperación de las empresas en situaciones de crisis, pero 2020 ha puesto sobre la mesa desafíos únicos para todos.

El reto inmediato más importante ha sido adaptar los negocios, los sistemas TI y los equipos para apoyar a una fuerza de trabajo totalmente remota y garantizar su resistencia operativa. Casi de la noche a la mañana, bancos de todos los tamaños tuvieron que cambiar rápidamente a miles de sus empleados para que trabajaran desde casa por primera vez, para garantizar la productividad y que las tareas vitales siguieran funcionando.

Trabajar desde casa no es un concepto nuevo para la mayoría de las empresas. Sin embargo, permitir y apoyar a más del 90% de la empresa para que trabaje en remoto al mismo tiempo representa un camino que pocos habían tomado anteriormente en el sector de los servicios financieros. Esto ejerce una enorme presión sobre los sistemas de TI, que no deben apoyar solamente a los equipos normales de funciones centrales, como RRHH, Finanzas o TI, sino también a equipos más orientados al cliente, como comerciales y agentes de call-center.

Hemos visto diferentes enfoques exitosos en los últimos meses, con muchos planes acelerados para pasar a soluciones de colaboración y productividad basadas en la nube o la adopción de soluciones de videoconferencias. Esta aceleración, que probablemente ha estado en la agenda de TI durante años, se ha producido ahora en meses, impulsada por la necesidad apremiante de reducir la carga de la conectividad de acceso remoto, permitir la colaboración virtual y explotar la elasticidad de las soluciones SaaS. Otro enfoque se ha centrado en construir una informática remota y una infraestructura de escritorio virtual (VDI) que se adapte a las demandas específicas de cada trabajador, teniendo en cuenta su sector, organización y usuarios finales. Sin embargo, muchas empresas que desplegaron rápidamente soluciones tácticas para permitir a los empleados trabajar a distancia están ahora reevaluando cómo pueden ofrecer esta capacidad de forma más estratégica y durante más tiempo. La atención se centra ahora en evaluar la capacidad de recuperación de los servicios de teletrabajo, garantizando que la infraestructura es adecuada para apoyar la productividad empresarial en un momento en que toda la organización depende de ella para funcionar.

Se trata de dos soluciones sencillas que las organizaciones están adoptando para ayudar a las empresas a continuar y a abordar sus problemas más urgentes en el futuro. En tiempos difíciles, asociarse con un proveedor de tecnología y de servicios fiable es clave para garantizar que su equipo TI pueda confiar en la infraestructura y en un equipo que le ayudará con cualquier diseño, despliegue o gestión de iniciativas de trabajo a distancia para ayudar a salir de la crisis más fuertes que nunca.

Gran parte de la atención sobre cómo las empresas financieras se ven afectadas por Covid-19 se centra en cómo pueden adaptarse durante la pandemia, pero es importante que las organizaciones se tomen el tiempo necesario para elaborar una estrategia de teletrabajo a largo plazo que se adapte a la continuidad y a la productividad de los empleados cuando haya terminado y surjan nuevas normas.

Aunque todos nos encontramos en aguas desconocidas, es fundamental que las organizaciones piensen en el futuro y adopten soluciones que sean técnica y financieramente flexibles para ayudarles a hacer frente a cualquier obstáculo que surja a medida que cambien sus modelos de negocio.

Con la pandemia reduciendo la necesidad de sucursales físicas y el consiguiente crecimiento de la banca digital, las organizaciones financieras ya pueden evaluar cómo utilizar los espacios físicos de manera diferente.

Al asumir más funciones a distancia, nadie puede estar seguro de cómo será la nueva norma. ¿Se reevaluarán las prácticas en el sector inmobiliario para considerar un cambio en cómo la gente quiere trabajar? ¿Cómo planearán las empresas la recuperación?

Independientemente de la forma en que el mundo se ocupe de la pandemia, la capacidad de recuperación operativa seguirá siendo una exigencia clave para todas las empresas. El papel que desempeñan las soluciones y plataformas de TI para hacer frente a cualquier cambio en la demanda o la transición será clave.

Las decisiones que las empresas de servicios financieros tomen hoy serán el motor clave para permitir la flexibilidad y la capacidad remota única que necesitarán mañana. Es una pieza crucial del puzle que ayudará a las organizaciones a avanzar a través de una innovación rápida y a seguir atrayendo a los mejores talentos que son imprescindibles para el sector.

HPE es una de las pocas compañías de TI que cuenta con financiera propia con la que puede ayudar a aliviar muchos problemas derivados de la crisis financiera actual. HPE Financial Services facilita acelerar la transformación necesaria hacia el trabajo en remoto con fórmulas financieras y de gestión de activos innovadoras que permiten reducir el gasto durante la actual crisis, mitigando la incertidumbre y asegurando la continuidad de los negocios.