Óscar Vall

Nueva ley de alquileres: un freno al sector

La nueva Ley de alquiler establece que el índice de precios se fijará de acuerdo con el índice de referencia que ha establecido la Generalitat. La totalidad del sector inmobiliario, Apis, Inmobiliarias, promotores, etc., coinciden en valorar esta Ley como una herramienta política, más que como una solución al conflicto de los alquileres. Regular la propiedad privada en lugar de invertir en construir vivienda social, no es la mejor de las fórmulas para solucionar el problema del acceso a una vivienda.

Con esta nueva medida, como ya se viene advirtiendo desde hace meses, se puede provocar el efecto contrario. Existirá menos parque de alquiler disponible, ya que todos los grandes tenedores retiraran su producto de alquiler tradicional y, o bien optarán por el alquiler temporal, el cual queda exento de esta regulación, o esperarán a que pueda derogarse dicha Ley en unos meses. Por tanto, los inquilinos tendrán a su disposición menos oferta y más inestabilidad contractual al encontrarse con más oferta temporal, todo lo contrario de lo que se buscaba. En los últimos años tanto promotores estatales como grandes inversores extranjeros compraban y construían para dedicar al alquiler -built to rent- y gracias a ello se fue generando un gran parque de alquiler. En cambio, ahora con la limitación, muchos de ellos se pensarán si les conviene invertir en España. La inversión quedará muy limitada a estos índices, nada real, y prohibiendo a todos los propietarios alquilar algo que es suyo, por el precio que quieran o el mercado esté dispuesto a pagar.

En el entorno actual, marcado por la crisis sanitaria, los compradores se lo piensan todo más y la compra es lenta, y los propietarios y arrendatarios sufren una inseguridad jurídica insostenible. Por otro lado, a los inquilinos en realidad tampoco les beneficia todo esto. Las rentas quedarán limitadas, pero no los gastos derivados de los pisos, los propietarios los imputarán por lo que los precios no van a bajar tanto. Todo ello hace que ninguna de las decisiones tomadas ayuden mucho al sector. Desde hace unos años el parque de obra nueva de alquiler estaba creciendo, pero esta limitación conllevará volver atrás. El alquiler estaba arraigando en nuestro país como una opción de vida. En nuestro país queda mucho camino para conseguir una mayor estabilidad, sin mermar la libertad de precios.