Àlex Soler Fontán

Dribo estudia lanzar una ronda para alcanzar el liderato

La autoescuela digital estudia el mejor modo de levantar el dinero, ya sea mediante una gran ronda o mediante una ronda puente antes de otra más importante

Simplificar la vida de los demás solventando sus necesidades. Estos son, a grandes rasgos, los objetivos principales de la startups. Aunque no todas consiguen crecer y establecerse como empresa, las que lo consiguen suelen presentar propuestas innovadoras que, tras un gran trabajo detrás, dan respuesta y solución a las inquietudes actuales de la gente. Este es el caso de Dribo, una autoescuela digital. “Es la digitalización del sector de la autoescuela”, define Enric Romero, su cofundador y consejero delegado. Dribo nace en 2017 en plena digitalización del sector del automóvil. Hasta ahora, han levantado dos rondas de financiación por un total de 700.000 euros y han expandido su negocio para saltar de Barcelona a ciudades españolas como Alicante, Sevilla, Murcia, Almería y Málaga, además de en la capital, Madrid. Su propuesta pasa, como explica Romero, “por la posibilidad de tener una experiencia digitalizada al máximo”. La compañía cuenta con una aplicación propia y su media de aprobados es, como dice orgulloso su cofundador y consejero delegado, “muy superior a la media, con un 98%”. Todo es digital en Dribo, desde el proceso de matriculación, hasta un modelo de estudio adaptado a cada alumno. Los estudiantes se matriculan, aprenden y hacen tests a través de la aplicación, desde la que también se gestionan las prácticas y los exámenes. “Obviamente, el teórico es presencial, siempre en sedes de la DGT. La parte formativa se la gestiona el alumno desde casa, pero el examen se hace presencial”, detalla Romero.

El modelo de negocio de Dribo pasa por cobrar un importe por la matriculación y por las prácticas. Asimismo, cuentan con autoescuelas asociadas que ofrecen la parte práctica, centros médicos para los test psicotécnicos y profesores autónomos que se ofrecen para hacer las prácticas. A todos estos actores se les cobra una comisión. Por último, aunque Romero admite “que lo acabamos de empezar a trabajar ahora”, Dribo aspira a acompañar al conductor más allá de la obtención del carné, convirtiéndose en una aplicación de servicios para el conductor, “acercando el seguro, redirigiendo al usuario a coches de segunda mano o a un escaparate de movilidad compartida”. “Es un espacio donde satisfacer las necesidades que el usuario antes no tenía porque no era conductor, pero ahora sí. Así podemos aportar valor, pero aún lo estamos trabajando”, concreta el directivo.

Tras establecerse en el mercado y levantar dos rondas, Romero explica que su principal objetivo es acelerar su crecimiento. “Sobre todo es acelerar la integración de autoescuelas para dar servicio a todo el territorio español para ganar liderazgo en el mercado porque no hay un líder claro. Estamos cerca de ser la autoescuela más grande de España. No es lo mismo negociar con inversores siendo líder que estando aún creciendo”. Para ello, la compañía buscará levantar, durante los próximos meses, entre 1,5 y 2 millones euros, aunque no tiene claro si lo levantarán en una sola ronda o en más de una. “Estamos considerando una ronda puente”, admite el directivo. “Con esto del Covid-19 algunos inversores se han caído y otros se han sumado. Estamos viendo cuál es la mejor formad e hacerlo”. Una vez conseguido, el dinero se destinará, según Romero, a “acelerar la integración de autoescuelas y a mejorar el producto invirtiendo en tecnología”.